Caso Iberpotash: indignación vecinal por el apoyo judicial a la empresa
Los vecinos de Sallent ultiman el recurso contra la decisión de TSJC de aplazar la regeneración del ecosistema afectado por los vertidos contaminantes
7 julio, 2017 00:00Los vecinos del barrio de la Rapinya de Sallent están a punto de presentar un recurso de alzada contra la interlocutoria de la sala tercera de lo contencioso administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) que ha dado dos años más de margen a la empresa Iberpotash, que explota las minas de Sallent y Súria, en Barcelona, para que inicie las tareas de regeneración de la zona y el cese de los vertidos.
Los vecinos que actúan como acusación popular están indignados porque la sentencia que obliga a la empresa Iberpotash a dejar de contaminar y revertir los enormes perjuicios medioambientes de sus vertidos es de 2013. Entonces, y tras una cuanto menos extraña resolución de la comisión territorial de urbanismo de la Generalitat, el TSJC, tras un año de deliberaciones, accedió a conceder una moratoria a la empresa.
Maniobras procesales
El regalo fue de tres años. La empresa tenía, pues, hasta el 30 de junio del corriente para cumplir con su obligación. Un día antes del vencimiento la compañía presentó lo que se conoce como un conflicto de ejecución de sentencia que en sólo 24 horas resolvió el TSJC a favor de ampliar hasta el 2019 el margen concedido a Iberpotash.
La empresa tiene hasta el 2019 para limpiar las miles de toneladas de sales contaminantes vertidas por la factoría durante años. Como han acreditado los informes medioambientales que obran en las distintas causas abiertas contra la industria, la filtración de esas sales ha perjudicado de forma irreversible a acuíferos y cuencas fluviales, en especial a la del Llobregat.
Han pasado cuatro años desde que se pronunciase la justicia y la empresa, a través de diversas maniobras procesales ha logrado ganar tiempo para no cumplir con el mandato de los tribunales.