Fracasa el encuentro entre musulmanes para casarse con españolas y convertirlas al Islam
Una patrulla policial acude al Arabia Café la tarde en la que tenía que celebrarse la reunión
15 marzo, 2017 00:00Sin rastro del encuentro informativo de este martes al que se emplazó un grupo de musulmanes de Barcelona la semana pasada. Se dieron cita a través de carteles publicitarios colgados en algunos postes del barrio del Raval, en el distrito de Ciutat Vella.
En los pasquines, cuyos responsables no se han identificado, se daban cita a las cuatro de la tarde en el bar Arabia Café, situado en la calle Escudellers de la capital catalana, para tratar un tema claro y directo: “Alianza entre musulmanes y españolas”. Una reunión que tenía como objetivo instar a los hombres de la comunidad a contraer matrimonio con mujeres españolas para convertirlas al Islam.
“Hermano, únete en alianza con una española, enséñale que el Islam es la religión verdadera. La ley islámica dicta que los frutos de dicha alianza seguirán el Islam, lo que fortalecerá aún más nuestra comunidad”, decían los carteles.
La policía, atenta
Pero a la hora en la que debía empezar el encuentro, no había ningún grupo de hombres en el café que hablara sobre el tema, según ha podido comprobar Crónica Global. Veinte minutos antes, una pareja de policías de paisano ha accedido al local, identificándose como agentes ante el camarero que los ha atendido.
Éste les ha emplazado a tomar asiento y ha avisado al propietario, que ha acudido a la mesa a saludarles. “Nos quedaremos aquí hasta las cuatro y media, más o menos”, le ha dicho uno de los policías a su compañera.
Ni rastro de los musulmanes
Mientras tanto, hasta cinco trabajadores del Arabia Café se concentraban en la puerta, comentando la jugada y girándose a observar a los agentes. Del encuentro entre musulmanes que apostaban por las españolas para convertirlas a su comunidad, ni rastro. Ni en el salón de arriba, ni en el de abajo, cerrado al público con una cuerda roja que denegaba el acceso.
Al conocer la noticia del evento, el propietario del local sostenía que no había recibido ninguna llamada en la que reservaran una mesa para un grupo grande y negaba que el Arabia Café fuera la sede de tal acontecimiento.