El caos sanitario catalán ha llevado a algunos médicos a renunciar a responsabilidades. Los facultativos advierten de que "no serán responsables de las consecuencias de tipo penal" del efecto que la saturación de las urgencias pueda tener sobre la seguridad de los pacientes. Esto ha ocurrido en al menos un hospital, la Corporación Parc Taulí de Sabadell (Barcelona), que ayer se volvió a taponar.

Según ha informado la Plataforma Asamblearia del Taulí (Patt) y han confirmado trabajadores de urgencias, la misiva se envió a principios de año a la dirección de la institución de enfermos agudos. "Desde entonces, se le ha recordado a la gerencia de forma verbal en varias ocasiones, y salud laboral también está informada", han agregado.

La tesis es simple: los galenos y enfermeros atienden a tantos pacientes que se ven obligados a extraer sangre en los pasillos, navegar entre camillas y les es imposible mantener un nivel mínimo de higiene.

Oxigenoterapia, también

La crisis hospitalaria se extendió ayer a la oxigenoterapia, tras haber retrasado operaciones programadas. Los ingresos en domicilio con tratamiento con oxígeno se retrasaron por la congestión. En el propio Parc Taulí hubo demoras de hasta cuatro horas en la prestación de este servicio asistencial a las personas con enfermedades respiratorias.

"Los médicos se quejan, pero no pueden hacer más. La prestación sanitaria intensiva en urgencias lo retrasa todo. Uno de los servicios impactados es el de oxigenoterapia. Ello ocurre porque, aunque venga de fuera, tiene que tramitarse a través de la unidad de Hospitalización Domiciliaria, que también trabaja a destajo", ha argumentado un enlace sindical.

Esperas

El personal de la unidad sí ha aportado más datos sobre la congestión de urgencias. "Estamos con esperas larguísimas para una cama. Algunas personas aguardan hasta ocho días. El personal hace lo que puede", ha indicado la misma fuente.

Fuentes no oficiales del centro explicaron que, el jueves, 46 personas esperaban una cama en el Nivel 2 de Urgencias, que tiene capacidad para 35 enfermos.

Hasta 25 personas llevaban más de 24 horas en esta situación. Casi todas eran personas mayores, o enfermos crónicos descompensados.

Rebelión de pacientes

La gerencia del Taulí está tomando medidas para paliar la crisis. Ha organizado grupos de trabajo con el personal de urgencias para hallar una solución. Además, ha desplegado más camillas, aunque los empleados lamentan que éstas "sean viejas". Otra de las medidas es la derivación de pacientes a hospitales como el General de Catalunya (HGC) y el Consorcio Sanitario de Terrassa (CST). 

Fuentes médicas han añadido que hasta 140 personas en el Taulí se han rebelado y se han negado a ser derivadas. La mayoría, agregan, son personas mayores que tendrían problemas de transporte.

Preguntada por todas las cuestiones planteadas por el personal, la gerencia del complejo médico, que comanda Modesto Custodio, no ha contestado a Crónica Global.