El Consorci Sanitari de Terrassa (CST) o Hospital de Terrassa tiene una nueva unidad de terapias complementarias / CG

El Consorci Sanitari de Terrassa (CST) o Hospital de Terrassa tiene una nueva unidad de terapias complementarias / CG

Vida

Un hospital público de Terrassa abre una unidad de bioenergía pese a perder 1,2 millones al año

Los expertos piden al Consorci Sanitari de Terrassa que "no confunda estas terapias con la medicina convencional"

13 marzo, 2016 14:32

Un hospital público de Terrassa ha abierto una unidad de terapias alternativas pese a que pierde 1,2 millones de euros al año. El Consorci Sanitari de Terrassa (CST) estrenó la Unidad de Salud Integrativa en enero, formada por seis profesionales del complejo más un acupuntor externo. El departamento busca aliviar los síntomas de los pacientes de oncología médica, curas paliativas y radioterapia, aunque los expertos piden "precaución". 

Preguntado sobre la cuestión, un portavoz del centro ha señalado que la unidad se nutre de empleados "que realizan las tareas de forma voluntaria y fuera de su jornada laboral". Además, el espacio "busca la complementariedad entre la medicina convencional y las terapias alternativas".

En la actualidad, la UMI ofrece cuatro tipos de tratamientos: acupuntura, nutrición, mindfulness y terapias bioenergéticas.

"Separar conceptos"

Pese al entusiasmo de la dirección del hospital, los facultativos recomiendan prudencia. "Las terapias complementarias sólo alivian los síntomas y no curan enfermedades. No hay que confundirlas con la medicina convencional o alopática, que ataca la raíz del problema para sanar", explica Antoni Barberà, médico internista y una de las caras visibles de la Plataforma Dempeus per la Sanitat Pública.

Precisamente, el facultativo alerta del riesgo de no compartimentar bien las especialidades. "No niego la efectividad de la acupuntura u otras terapias. Pero a menudo son sólo placebo y la vía para vender tratamientos privados dentro de un centro público", alerta.

"Pueden funcionar"

La cautela expresada por algunos doctores llega un mes después de conocerse que la Universidad de Barcelona (UB) suprimiría el Máster de Homeopatía tras desaconsejarlo la facultad de medicina del centro. Una docente de esta universidad, Gemma Martínez, recuerda que "hay que demostrar que las terapias complementarias funcionan, igual que la medicina convencional".

Según la también jefe del Área de Formación del Hospitall de Bellvitge, algunos tratamientos tradicionales "tienen base fisiológica clara", y su efectividad aumenta porque "se acompaña al paciente durante su tratamiento".

145 millones al año

El Consorci Sanitari de Terrassa tiene un presupuesto cercano a los 145 millones de euros al año. El último resultado anual auditado del centro, el de 2013, arroja una pérdida neta de 1,2 millones de euros, un 39% más que el año anterior.