
El pueblo medieval a una hora de Girona que National Geographic recomienda visitar, Santa Pau CANVA
Ni Besalú ni Castellfollit: el pueblo medieval a una hora de Girona que National Geographic recomienda visitar
Este municipio conserva una impresionante fortificación y un laberinto de calles empedradas
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Girona es mucho más que la Costa Brava. Tampoco se acaba en la capital ni en los pueblos típicos como Besalú y Castellfollit de la Roca, dos de los municipios más bonitos de Cataluña.
Explorar las tierras gerundenses puede llevar a descubrir localidades increíbles. Pueblos que combinan pasado medieval y encantos naturales. Una mezcla que se puede disfrutar en Santa Pau.
Dónde está
Este municipio de más de 1.000 habitantes no sólo impresiona por su belleza arquitectónica. Su entorno es único. Se encuentra rodeado por tres volcanes inactivos en la región de Garrotxa.
Esta comarca está situada en el corazón del Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa, rodeado por los extintos volcanes de Can Simó, Santa Margarida y Croscat. Todo ello ha enamorado a National Geographic que hace poco recomendaba una escapada al lugar.
Una zona estratégica
Como indica la revista, en Santa Pau se pueden apreciar de manera destacada las características principales de los pueblos medievales, cargados de historia.
Este lugar no es una excepción. En otro tiempo el municipio fue el centro de la Baronía de Santa Pau, y el castillo de Santa Pau era la residencia principal de esta baronía.

Vista panorámica de Santa Pau
Su situación, en una colina a los pies de la Sierra de Finestres, era un gran lugar para tener controlado el territorio, de allí que se erigiera esta imponente fortaleza. Prueba de ello es la imponente Torre del Homenaje, que aún sobrevive a su lado.
La fortificación se encuentra en la parte más alta del pueblo y su zona antigua, conocida como la "Vila vella". Es esta parte de Santa Pau la que conquista a los visitantes con un laberinto de calles dentro de murallas.
Qué ver
Uno de los primeros lugares que debes visitar en Santa Pau es la Plaza del Mirador, que ofrece la vista más espectacular de la colina sobre la cual se encuentra el pueblo. Desde esta plaza, se puede admirar una parte de la muralla, las casas de piedra del núcleo antiguo que cuelgan en lo alto y el campanario de la iglesia.
Cerca de allí, se encuentra otro pequeño mirador que proporciona información turística. Allí uno tiene la oportunidad de tomar fotografías sin que se vean las terrazas de la plaza en primer plano.
El Castillo de la Baronía de Santa Pau
El auténtico corazón de Santa Pau es el Castillo de la Baronía de Santa Pau. Fue construido entre los siglos XII y XVIII y solía ser la residencia principal de los señores de la Baronía que dio origen al pueblo.
Este edificio se encuentra perfectamente integrado en la parte alta del núcleo antiguo y posee una imponente planta rectangular. Su apariencia se asemeja más a una casa señorial fortificada que a un castillo gótico típico.

Santa Pau
Su interior alberga un amplio patio y una enorme escalera que conduce. Asimismo, a también se aprecia un patio de armas.
Un entramado de calles empedradas
Más allá del castillo, la mejor manera de conocer Santa Pau es perderse por sus callejuelas. Este entramado de calles empedradas está muy bien conservado y ofrece lugares y elementos bastante pintorescos, como los dinteles de la Calle Mayor, que datan de los siglos XVII y XVIII.
Caminando por el pueblo, es probable que encontrarse con pequeñas esculturas distribuidas en varios puntos. Estas obras de arte fueron creadas durante un encuentro de artistas celebrado en 1992 en Santa Pau.

Calles de Santa Pau VISIT SANTA PAU
Tres de estas esculturas se han quedado permanentemente en el pueblo: "Les mans fosques" ("Las manos oscuras"), ubicadas en una callejuela cerca de la Iglesia, la escultura "La Nena" junto a la muralla exterior del castillo en la Vila vella, y "Trapezio", que se encuentra dentro del laberinto medieval.
Alrededores de Santa Pau
Por último, destacar la naturaleza exuberante que rodeada Santa Pau. El pueblo es un punto de partida ideal para diversas rutas por la zona que sirven para explorar la zona.
Una de las rutas más vinculadas al pueblo es la Ruta por las Tierras de los Barones de Santa Pau, que lleva hasta uno de los miradores más impresionantes de la Garrotxa: la cima de Finestres. Este sendero comienza en el pueblo y pasa por los restos del Castillo de Finestres y la ermita de Santa María de Finestres, ambos lugares con vistas panorámicas impresionantes.

Paisaje de La Garrotxa CANVA
Otra ruta interesante es la de los Antiguos Caminos de Monjes. Son cinco horas de trayecto hasta la capilla de Sant Abdó y Sant Senén y el santuario de Sant Julià del Mont.
Otra actividad popular en la zona son los emocionantes vuelos en globo, que permite contemplar los volcanes y el paisaje circundante desde lo alto. Una experiencia única.
Cómo llegar
Quien quiera visitar Santa Pau sólo hace falta que tome el coche. Está menos de una hora de Girona por la C-66. Lo mejor es ir por esta carretera hacia Banyoles y luego enlazar con la A-26 hasta la salida 75 en dirección a Olot. Desde allí, se sigue por la carretera GI-524, que atraviesa la zona volcánica de la Garrotxa y conduce directamente a Santa Pau.
Si se viaja desde Barcelona, el recorrido dura alrededor de una hora y 45 minutos. La ruta más recomendada es tomar la autopista AP-7 hasta la salida 6B en dirección a Banyoles-Olot, para luego continuar por la C-66 y seguir las anteriores indicaciones.