El pueblo medieval perdido por las montañas de Lleida: vistas espectaculares para sus cuatro habitantes
Descubre que municipio vive tranquilamente en un paraje sin igual y con dos lugares muy especiales, que puedes visitar
5 mayo, 2024 15:00Noticias relacionadas
Vivir en un pueblo con solo cuatro habitantes ha de ser una experiencia única que ofrezca un estilo de vida tranquilo y cercano a la naturaleza.
En un entorno tan pequeño, los lazos comunitarios suelen ser fuertes y los residentes tienden a conocerse entre sí de manera íntima. Esta cercanía crea un ambiente de apoyo mutuo y solidaridad, donde los vecinos se convierten en una especie de familia extendida.
Está claro que la contaminación es muchísimo más baja y el aire fresco y puro es un lujo del que poder disfrutar a diario. Por eso, uno de estos lugares es el pueblo de La Baronia de Sant Oïsme.
Historia del pueblo
La Baronia de Sant Oïsme es una localidad del municipio de Camarasa, en Lleida, que pertenece a la comarca de La Noguera. A mediados del siglo XIX, la localidad por aquel entonces parte del distrito municipal de Fontllonga, contaba con una población de 24 habitantes. En la actualidad, y según datos del INE, tiene solamente cuatro. ¡Tranquilidad en un ambiente medieval y con vistas al valle de Ager! Como atractivos del lugar destacan el castillo y la iglesia del pueblo.
La iglesia parroquial está dedicada a San Bartomeu y es románica de los siglos XI y XII. A su lado se erige el castillo de Sant Oïsme, centro de la baronía de Sant Oïsme, que en el siglo XVIII pertenecía a los Gassol, de los cuales pasó a los Sobies y a los Boatella, apellidados Sobies.
El castillo de Sant Oïsme
Uno de los encantos de este pequeño pueblo es el Castillo de Sant Oïsme, una maravillosa fortificación románica de época románica del siglo XI considerada Bien Cultural de Interés Nacional y al que se puede acceder gratuitamente.
En el siglo XIV aparece en un documento del rey Pedro III como castillo de San Oïsme, situado en la baronía de Meià. Parece que siguió una historia diferente en los castillos de la cuenca de Meià, que fueron incluidos en el marquesado de Camarasa.
La torre del castillo es su estructura principal y conserva una altura de 14 metros, con un diámetro interno de 270 metros y un grosor de muros de 1,5 metros a pie plano, mientras que en la parte superior el grosor es de 1,13 metros. La puerta principal se encuentra a 4 metros del suelo interior y está orientada hacia el sur y cubierta con un arco de medio punto.
El interior de la torre está construida con sillares rectangulares de tamaño medio unidos con un mortero de cal. Además de la torre, en la cima de la roca donde se encuentra ubicada, existen otros edificios pertenecientes al castillo. ¡Te invitamos a descubrir este solitario pueblo!