El regreso (o no) de Puigdemont para reventarlo todo
El entorno del prófugo sostiene sin fisuras que Puigdemont regresará para fastidiar la investidura de Illa. Se da por hecho el acuerdo entre socialistas y republicanos.
27 julio, 2024 09:53Noticias relacionadas
De los titulares de algunos medios de comunicación se infiere que Carles Puigdemont ya ha hecho las maletas para regresar a España aunque corra el riesgo de ser detenido, conducido hasta un juez y enviado a prisión provisional hasta que el TC y el TJUE resuelvan su caso. Sin embargo, las especulaciones del entorno del expresidente catalán y muy especialmente de su ilustre y simpar letrado, el señor Boye, sobre el retorno del hombre del maletero parecen tener fuerza de palabra divina. De modo que ahí está la prensa ojo avizor, al acecho de los movimientos del perdedor de las elecciones del 12 de mayo. Que estemos en periodo vacacional y que el independentismo pase millas de movilizarse para celebrar la vuelta del líder del 1-O no cuenta en la ecuación del regreso.
Mientras se cocina la vuelta o no vuelta de Puigdemont, socialistas y republicanos negocian ajenos a la presión del independentismo, que a estas alturas de la jugada tiene menos fuerza que el pellizco de una monja. ¿Duele? Un poco, pero nada que no sea perfectamente soportable. Aguantar la cara de manzanas agrias de Lluís Llach tal vez sea lo peor y lo más desagradable de la movida.
De la prensa del día destaca una pieza de Toni Bolaño en La Razón que lleva por título la siguiente frase: "48 horas decisivas para la investidura de Salvador Illa". En el sumario se sostiene que "ERC y PSC cerrarán el preacuerdo y Puigdemont tratará de forzar la repetición electoral con su vuelta". Del texto de Bolaño: "Fin de semana de nervios, tensión y emociones desbordadas en la política catalana. 48 horas decisivas y con dos grandes incógnitas por resolver. Por un lado, Junts y Carles Puigdemont celebran hoy un acto con su órdago o farol sobre su hipotética vuelta a España tantas veces prometida como incumplida. Por otro lado, ERC y PSC siguen apurando las últimas horas de negociación a la espera de fumata negra o fumata blanca que, en todo caso, tendrá que ser luego avalada por la militancia republicana. Puigdemont ha dado cita a sus fans en Els Banys d’Arlès i Palaldà en la región de Occitania. Una Trobada de Estiu –Encuentro de Verano– para descifrar sus intenciones y, un tema no menor, ver su capacidad de convocatoria. Al final no se ha buscado un aforo más pequeño y el acto tendrá lugar en el Teatre de la Verdor con capacidad para 5.000 personas, pero en el recuerdo está el pinchazo de la manifestación convocada por la ANC a la que solo acudieron 1.500 a expresar su apoyo a Puigdemont y contra el Supremo. Lo llene o no lejos quedan aquellas citas multitudinarias porque es 27 de julio y porque también sus seguidores se cansan de anuncios de vuelta a España que siempre se suspenden. ¿Lo volverá a hacer?".
Sigue la nota: "Su entorno afirma que sí, que volverá a España a pesar de que será detenido y no se descarta algún otro numerito de impacto mediático ante una situación de retorno agravada por la actitud del Tribunal Supremo que ha generado a juicio de Junts «unas circunstancias no deseadas por culpa de este golpe de toga a la democracia», por parte de los jueces del alto tribunal en su cuestión de inconstitucionalidad en la que se refiere a los hechos por los que fueron condenados los líderes del «procés» como un golpe de Estado. Para añadir más tintes melodramáticos el presidente del Parlament, Josep Rull, ha blindado la Cámara catalana para que Puigdemont no pueda ser detenido en el interior del hemiciclo".
Y: "Hoy el expresidente huido resolverá la incógnita de si vuelve a pisar suelo español y cuándo lo hace. Hay dos momentos encima de la mesa. El día 1 de agosto, día previsto para la consulta a la militancia de ERC para ratificar el acuerdo con el PSC, con el fin de sabotearla, o el día que se fije la investidura de Illa, en caso de que las bases republicanas avalen previamente el preacuerdo con los socialistas. El primero serviría para presionar a las bases republicanas; el segundo, para presionar a los 20 diputados republicanos si el expresidente es detenido, antes o después de entrar en el Parlament. Esta segunda opción es la que parece la preferida por Puigdemont, según las fuentes consultadas, porque cumpliría su promesa de «volver para la investidura»".
Si que Puigdemont vuelva es una posibilidad en la crónica de Bolaño, en el texto que abre El Español y firma M. A. Ruiz Coll es una certeza absoluta. "Puigdemont asistirá al Parlament a riesgo de ser detenido para reventar la investidura de Illa" es el titular de la pieza. Pues no hay más que hablar. Puigdemont volverá para la investidura de Illa. Punto. La pieza arranca así: "A la espera de una larga batalla judicial para poder beneficiarse de la amnistía, que probablemente tendrá que resolver el Tribunal de Justicia de la UE, Carles Puigdemont no quiere perder protagonismo ni verse condenado, de nuevo, al ostracismo en su Casa de la República de Waterloo. El líder de Junts ha comunicado a su círculo más cercano que mantiene la intención de regresar a España para asistir al debate de investidura en el Parlament, "ya sea la suya o la de Salvador Illa", aun a riesgo de ser detenido por orden del juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena. Puigdemont tiene previsto protagonizar este sábado un acto ante más de un millar de simpatizantes, en un escenario al aire libre en la población francesa de Amélie-les-Bains-Palalda (a apenas 15 kilómetros de la frontera española), para conmemorar el cuarto aniversario de la creación de Junts. Se trata del mismo escenario en el que ofreció un acto de precampaña el pasado 20 de abril, en el que utilizó un tono especialmente amenazador: "El PSOE se está hundiendo en toda España", afirmó, "Cataluña no puede ser su flotador". "Toca hacer temblar al Gobierno", añadió. Ya ha comenzado a cumplir esta amenaza".
Continúa el texto: "Fuentes próximas a Junts consultadas por El Español indican que, muy probablemente, Puigdemont aprovechará el acto de este sábado para reafirmar su compromiso de regresar este verano a Cataluña para participar en la sesión de investidura, tal como prometió en campaña. Desde entonces se han esfumado las posibilidades de que Puigdemont pueda ser investido presidente de la Generalitat. Para ello precisaría la abstención de los 42 diputados del PSC y los socialistas no están dispuestos a ofrecerle esa baza. Muy al contrario, el PSC apura este fin de semana las horas para cerrar el acuerdo de investidura de Salvador Illa antes de que, el próximo miércoles, venza el plazo concedido por ERC. La exigencia de un sistema de financiación diferenciado, similar al cupo vasco (una reivindicación que también comparte Junts), sigue siendo el principal escollo para cerrar el acuerdo".
También son sensibles en Vozpópuli al regreso del prófugo. "Puigdemont reactiva el rumor de su inminente vuelta para intentar romper el pacto entre ERC y PSC" es el titular de una nota de Beatriz Jiménez Nácher: "Dijo que volvería y mantiene su amenaza. En plena cuenta atrás para que ERC y el PSC culminen un preacuerdo para la investidura de Salvador Illa, desde Junts aseguran que la vuelta del líder del partido es inminente en cuanto se sepa que hay pleno de investidura. A pesar que se mantiene la orden de detención una vez pise suelo español, Carles Puigdemont vuelve a reactivar el rumor de su llegada este sábado desde Vallespir para volver a acaparar la atención política en un momento decisivo para el nuevo ciclo político en Cataluña".
También algunos de los medios editados en Cataluña sostienen la tesis del inminente encuentro en la tercera fase de Puigdemont con el pueblo elegido. "Junts es conjura amb un gran acte abans d’un possible retorn imminent de Puigdemont", titula El Món su nota de apertura. El texto es de Quico Sallés: "“Serà un míting, eh? D’aquells amb arròs i fideus”. Així intentava rebaixar un dels generals de l’estat major de Junts per Catalunya amb fil directe amb Carles Puigdemont, als passadissos del Parlament, l’acte que aquest dissabte celebrarà la formació a la Catalunya Nord. Un acte que altres fonts dels juntaires asseguren que va sorgir d’una visita del secretari general del partit, Jordi Turull, a Waterloo, en fer memòria dels quatre anys de la creació del partit. “En principi, no és previst que anunciï el dia i l’hora de la seva tornada”, adverteixen amb ironia les mateixes fonts. Però, la data, el lloc i el context polític no permeten la gosadia d’esborrar cap protagonisme a “aquesta festa d’aniversari”. En plenes negociacions d’investidura entre una ERC sotmesa a un ‘Vietnam’ cru i descarnat i un PSC que roman en silenci i abocant recursos per complir acords que feia anys i panys que s’esperen, la dinàmica desbocada de l’alta magistratura espanyola entrebancant sense cap delicadesa ni estètica l’aplicació de la llei d’amnistia, i sobretot, el compromís del retorn de Puigdemont a Catalunya si es convoca un debat d’investidura".
Y: "Tanta és la transcendència del que Johan Cruyff definia com “l’entorn” que les unitats d’elit dels cossos i forces de seguretat de l’Estat ja fa dies que ronden pels vorals de la Catalunya Nord esperant novetats. De fet, algunes fonts policials a Madrid alertaven, fins i tot a la premsa, que el 27 de juliol es convocava un “gran acte de masses” per “acompanyar Puigdemont a Catalunya” i entorpir la seva detenció. Des de Junts, “riuen” davant el que titllen de “paranoia” contra el president a l’exili, però el riure, en canvi, es desdibuixa del rostre de les mateixes fonts quan se’ls planteja la possibilitat d’acord entre socialistes i republicans i que les bases, encara que per la mínima, l’avalin. De tota manera, Junts insisteix que Puigdemont refermarà el com i el quan tornarà".
Después de todos estos textos se supone que Puigdemont no defraudará las expectativas y no dejará que Gonzalo Palomitas Boye quede como un mentiroso.
Más madera. "ERC acepta la oferta de Sánchez de un 'avance progresivo' hacia la 'soberanía fiscal' catalana para investir a Illa", afirma El Mundo. En el sumario apunta una condición: "A cambio, pide al PSC calendarizar el despliegue de la 'financiación singular' para que sus bases lo avalen". Escribe Víctor Mondelo: "ERC se mueve para intentar cerrar el acuerdo con los socialistas para la investidura de Salvador Illa. Según fuentes republicanas conocedoras del estado de las conversaciones, los negociadores del partido independentista han flexibilizado sus exigencias en cuanto a la aplicación inmediata del acuerdo y han trasladado al PSC que aceptarían un «avance progresivo» hacia la «soberanía fiscal» catalana si, a cambio, el pacto incluye un calendario de ejecución preciso con el que puedan convencer a sus bases de que el trato no es una mera declaración de intenciones de incierto cumplimiento y así facilitar que lo validen en la consulta vinculante a la que serán convocadas. La secretaria general de ERC, Marta Rovira, viene ofreciendo sutiles pistas de esta pequeña cesión desde inicios de semana. El lunes manifestó que la investidura de Illa sólo será posible con un «paso adelante claro y decisivo hacia la soberanía fiscal». La líder en funciones del partido ha venido regulando sus palabras desde que fijó la «financiación singular» como requisito imprescindible para el pacto con los socialistas. Y al preceder su reclamación de la expresión «paso adelante» estaba ya sugiriendo que bastará con poner la primera piedra de un modelo de financiación que permita a Cataluña recaudar, gestionar y liquidar todos los impuestos para que los diputados republicanos unjan al candidato socialista".
Sigue Mondelo: "El miércoles, Rovira volvió a posicionarse públicamente y habló de «paso importante» para que Cataluña obtenga «más soberanía fiscal». Asimismo, se refirió a la necesidad de acordar «avances sostenibles en el tiempo» que garanticen que «después no se pueda dar marcha atrás por parte de otro Gobierno». La jefa de filas de ERC también ha subrayado esta semana el término «irreversible» y «estructural» para advertir a Sánchez de que deben blindar legalmente el nuevo modelo acordado para que no sea derogado en el futuro. Postergar la aplicación efectiva del acuerdo es una idea que seduce especialmente al PSOE porque otorga margen al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para intentar implicar a Junts en el desarrollo del modelo acordado con ERC una vez Illa haya tomado las riendas de la Generalitat. Junts quiere pactar bilateralmente con el PSOE el concierto económico en la mesa de negociación que se reúne mensualmente en el extranjero bajo la supervisión del observador salvadoreño. Y ya ha advertido al Ejecutivo central de que no apoyará la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) si no accede a sacar a Cataluña del régimen de financiación común".
En ERC, por su parte, ya andan vendiendo el acuerdo. Según la portavoz Raquel Sans, la independencia es más fácil si tienes la llave de la caja", frase que destaca El Nacional. El texto es de Jordi Martín: "La vicepresidenta primera del Parlament y portavoz de ERC, Raquel Sans, ha apelado este viernes a la militancia para que reflexione sobre los potenciales beneficios y el avance de soberanía que podría conseguir Catalunya, sobre todo en materia fiscal, a través del eventual acuerdo para investir al líder del PSC, Salvador Illa, en el marco de las negociaciones que socialistas y republicanos mantienen. En una entrevista esta mañana al 3/24, Sans ha argumentado que "la realidad" de la situación política es que el independentismo no ha conseguido sumar, pero ha defendido que se abre esta vía de negociación con el PSOE para un "buen acuerdo" en beneficio de Catalunya: "La independencia es más fácil cuando tienes la llave de la caja que cuando no la tienes. Eso la militancia lo puede valorar en positivo", ha afirmado".
Xavier Trias deja la política. El hombre pasará a la historia por haber dicho que "us bombin" en un acto de constitución del plenario. Ah, sí, y también por pavimentar la Diagonal, obra cumbre de la ingeniería barcelonesa del siglo XXI a la altura de la peatonalización del Consell de Cent.
27 de julio, santoral: Cucufate, en catalán Cugat. Natalia de Córdoba, Simeón Estilita, Antusa de Mantinea, Celestino I papa, Desiderato de Besançon, Eclesio de Ravena, Hermipo, Hermócrates, Hermolao y Pantaleón de Nicomedia, Juliana y Semproniana de Iluro, Liliosa de Córdoba y Urso de Loches.