La campaña electoral catalana ha adquirido un cierto interés tras el paréntesis reflexivo de Pedro Sánchez. La presencia en estas tierras del presidente del Gobierno parece haber desperezado a los dirigentes independentistas, sumidos en un letargo amarmotado y encallados en la legitimidad del 1-O. El discurso de Sánchez nada tiene que ver con el menú clásico de la política catalana, lo que convierte sus intervenciones en discursos verdaderamente disruptivos, algo así como decir Lérida o Gerona desde la perspectiva de un independentista medio.
La presencia de Sánchez oscurece las deambulaciones de Puigdemont y aún más las de Pere Aragonès, que empieza a comprender por las caras que pone que la "jugada maestra" de anticipar las elecciones por la broma de los comunes de no apoyar el Hard Rock le está saliendo como un tiro en el pie.
De eso va la crónica de Toni Bolaño y Javier Gallego en La Razón. "El separatismo se asoma al precipicio en el ecuador de la campaña del 12M" es el titular de una pieza que arranca así: "La campaña de las elecciones catalanas llega este viernes justo al ecuador y el independentismo está más cerca del abismo que nunca. Encuesta tras encuesta parece reforzarse la idea de que el separatismo se puede quedar el 12 de mayo sin la mayoría absoluta que ahora atesora en el Parlament y eso abriría prácticamente una nueva era en la política catalana con un Salvador Illa que resiste a todos los envites y ha puesto paso firme hacia una holgada victoria. De hecho, el escenario del independentismo es ahora mismo tan diabólico que, aunque sumase mayoría, muy probablemente tendrá que depender del partido ultraderechista Aliança Catalana".
Sigue el texto: "En estos momentos, Esquerra parece que sigue sin encontrar un revulsivo que permita a Pere Aragonès dar con la tecla de la remontada y evitar perder la presidencia de la Generalitat. Y eso que los republicanos parecen haberle imprimido un tono más duro a la campaña frente a Pedro Sánchez y Carles Puigdemont, con un discurso más desacomplejado. De hecho, el republicano no dudó el lunes en calificar el periodo de cinco días de reflexión de Sánchez de «comedia» y ayer tampoco dudó en tildar al Gobierno socialista de «debilitado» y por ello quiso hacer un llamamiento a acelerar la negociación de las cesiones que le corresponden (traspaso de Cercanías, mejora de la financiación...). Pero la inacción en el Govern de Aragonès está pasando mucha factura a una Esquerra que ni rescatando ahora en plena campaña la ampliación del aeropuerto de El Prat o medidas contra la sequía está siendo capaz de contener la hemorragia de votos, según las encuestas".
Y: "Los republicanos siguen ligeramente por detrás de un Junts que sí resiste en torno a la treintena de escaños gracias a un descafeinado «efecto Puigdemont» ya que el expresident tampoco está siendo capaz de mejorar los resultados de Laura Borràs en 2021 ni de acercarse a Illa. De hecho, una señal de que las cosas tampoco parecen ir por el buen camino en el cuartel general de Junts es que ayer el propio Puigdemont ya se abrió a pedir una investidura pese a que el independentismo no logre la mayoría absoluta. En este punto, retó a Illa, que se podría convertir en la llave de su investidura: «No negociaré con ellos ni habrá cambio de cromos. El PSC sabrá lo que debe hacer y tendrá que asumir las consecuencias de sus decisiones», advirtió el candidato de Junts, en alusión velada a la Moncloa. Y, en parte, esta debilidad de Junts se produce por el «voto cabreo» que se puede producir este 12 de mayo, ya que Aliança Catalana, partido de Sílvia Orriols, está atrayendo a votante molesto con los posconvergentes por dos cuestiones principalmente: por la inmigración, que es una cuestión que genera mucho debate en Cataluña; y, por la falta de avances en la independencia".
Del aterrizaje en la campaña del presidente del Gobierno se habla en al apertura de El Diario. "Sánchez irrumpe en la campaña catalana y pide votar a Illa para “ganar al fango”" es el titular de una nota que firma Arturo Puente: "Pedro Sánchez ha pasado en una semana de preguntarse si merecía la pena seguir y confesar no tenerlo claro a proclamar que “merece la pena trabajar para que Illa abra una nueva etapa en Catalunya”. El presidente ha irrumpido este jueves en la campaña catalana en Sant Boi, en su primer acto público tras una semana de infarto en el Gobierno y en su partido. Pasado el momento de tribulación, Sánchez se ha declarado “dispuesto” para movilizar todo el voto posible en Catalunya. “El próximo 12 de mayo, ganemos al fango votando a Salvador Illa”, ha reclamado el líder del PSOE, que ha pronunciado en Sant Boi un discurso centrado en los hitos de su presidencia y el debate nacional, sin apenas referencias a la situación interna en Catalunya. Tras recordar diferentes episodios relacionados con los ataques que le dirige la derecha, como la consigna “que te vote Txapote”, Sánchez ha pedido el voto de los catalanes para demostrar que “la democracia puede más que el fango y los bulos”. “De estos cinco días que nunca olvidaré he extraído muchas lecciones”, ha asegurado en un polideportivo abarrotado por unos 2.000 asistentes dentro y otro millar que seguía el acto a través de pantallas colocadas en el exterior. “Después de ver toda la corriente de solidaridad, me he dado cuenta de que vivimos en un gran país, de que somos más los que queremos una política limpia frente a los bulos y la difamación. Estos cinco días me han demostrado que el camino de nuestras siglas no es el más sencillo, pero es el más justo”, ha asegurado".
Continúa la pieza: "Hay pocas cuestiones más prioritarias para el líder socialista que Catalunya en este arranque de la legislatura en España. Al menos desde el punto de vista electoral. Que Illa acceda a la presidencia de la Generalitat tras el 12 de mayo supondría para el PSOE, por un lado, cerrar el procés y legitimar su estrategia, que ha sido blanco constante de críticas de la oposición. Por el otro, debilitar a los independentistas, que ejercen una presión a veces asfixiante en el Congreso. Con estos dos objetivos en el punto de mira, Sánchez tiene previsto volcarse en lo que resta de campaña catalana para ayudar a un Illa que se sabe en cabeza y ahora busca maximizar sus apoyos. “El domingo 12 de mayo ganaremos las elecciones, gobernaremos Catalunya y abriremos una nueva etapa”, ha proclamado el candidato a la presidencia nada más subirse al escenario. El próximo 12 de mayo no elegimos quién le va poner las cosas difíciles al Gobierno de España, sino quién gobernará Catalunya”, ha recordado Illa, aterrizando el acto en la campaña catalana".
Puigdemont, convertido en un actor secundario, apunta que no hará presidente a Salvador Illa. Está claro que pretende serlo él si logra quedar por encima de ERC. Sostiene que "en un escenario sin mayorías absolutas, Junts será quien tendrá más posibilidades de gobernar", según explica Marta Lasalas en El Nacional: "El escenario de fragmentación del Parlament que dibujan las encuestas está situando los acuerdos postelectorales en el primer plano. El candidato de Junts, Carles Puigdemont, ha respondido tajante este jueves desde Argelers a la oferta de Salvador Illa, después de que el líder socialista se ha mostrado dispuesto a hablar con él para formar gobierno. “Nosotros no pactaremos con el señor Illa”, ha asegurado Puigdemont, a la vez que ha emplazado el resto de formaciones a explicitar con la misma claridad cuáles serán sus pactos postelectorales. “Ningún voto de la candidatura que encabezo servirá para hacer presidente Illa y su proyecto y sus políticas”, ha reiterado. En una rueda de prensa convocada por la ACN y moderada por su director, Iu Forn, Puigdemont ha ironizado que hasta ahora Illa no había querido saber nada de Junts ni de él en particular y ha asegurado que la última vez que hablaron con el dirigente socialista fue tras las municipales, cuando les dijo que no harían ningún pacto con el PP para impedir que Xavier Trias fuera alcalde de Barcelona, por lo cual el dirigente socialista les merece “credibilidad cero”. El cabeza de lista de Junts ha insistido a dar por descontado que el candidato del PSC tiene ya un acuerdo cerrado con el mundo de los Comuns y Podemos, y que contará con ERC para hacer un gobierno de izquierdas catalanas y españolas, por lo cual le ha emplazado a explicar con claridad sus proyectos".
Y: "En cualquier caso, Puigdemont ha pronosticado que en un escenario en que ningún partido consiga la mayoría absoluta, como dibujan los sondeos, Junts tiene “muchas más opciones de alcanzar la presidencia que el partido socialista”. En este sentido, el candidato ha recordado que en la última legislatura Pere Aragonès ha gobernado con solo 33 diputados, después de ser investido con los votos de su partido, al igual que en la anterior legislatura fue Esquerra quien votó la investidura de Quim Torra. Por lo tanto, en caso de que no haya mayoría absoluta es “mucho más probable un gobierno de Junts con ERC”, dado que aplicando la misma lógica “no tiene que haber grandes obstáculos para trabajar para el acuerdo al día siguiente mismo”".
Tampoco ERC quiere saber nada, ahora, de PSC, según se vio anoche en el primer debate televisado de la campaña, el de TVE. Los pactos fueron el trasunto que recorrió los cuatro bloques. Así lo cuenta Camilo S. Baquero en El País: "El candidato socialista a la presidencia de la Generalitat, Salvador Illa, fue anoche la principal diana de los cuestionamientos sobre los pactos postelectorales, durante el primer debate televisado de esta campaña, organizado por Televisión Española. El representante del PSC tuvo que sortear la insistencia con que los representantes de los otros partidos le instaban a aclarar, como había dicho en una entrevista a la Cadena SER por la mañana, si no cerraba la puerta a un acuerdo con Junts per Catalunya. Illa optó por ir a un planteamiento elevado, aprovechando la tendencia que muestran las encuestas. “Yo me presentaré a la investidura: ¿la bloquearán?”, le espetó el socialista a los candidatos de Junts, Josep Rull —el número uno de la lista, Carles Puigdemont no participa por su situación legal— y al republicano Pere Aragonès. El president candidato le afeó que se mostrara como ganador e ignorara de entrada el veredicto del 12-M. “Bajemos un poco [el ritmo] y que hablen las urnas”, aseguró Aragonès. Los dos independentistas coincidieron en la imposibilidad de apoyar a un Illa que ven lejos de sus propuestas de “ambición nacional” y se niega a que la Generalitat recaude en solitario todos los impuestos".
Sigue Baquero: "El PP y Ciudadanos también cargaron contra Illa porque incluya en “la nueva etapa” que promulga a los independentistas. El socialista fue especialmente amargo en su réplica al popular Alejandro Fernández. “Yo expliqué las reuniones con todos los partidos, mientras que el PP ocultó reuniones con Junts”, defendió Illa, que también intentó hurgar en la falta de sintonía personal de Fernández con la cúpula de su formación. “Quizás usted [en referencia a Fernández] no las sabe, porque ya sabemos la relación con Alberto Núñez Feijóo”. El candidato del PP respondió airado: “Quizás no es tan elegante como aparenta. Yo soy un catalán rebelde y cuando tengo mi opinión, la digo; a diferencia de usted, que cuando aparece Sánchez, hace una genuflexión. En mi partido se puede discrepar, no como en el PSOE, que expulsó a Redondo Terreros por discrepar de la amnistía”".
Y: "Solo Jéssica Albiach, líder de la candidatura de Comuns Sumar, fue clara respecto a que no piensa dar sus votos a los de Carles Puigdemont y criticó los “malabarismos” hechos por Illa para no ser tajante en ese punto. “Junts es la refundación de Convergència, son incapaces de decir que lo que ocurre en Palestina es un genocidio”, criticó la representante de los comunes para intentar chinchar al socialista por el flanco más a la izquierda. El órdago de la continuidad del presidente Pedro Sánchez estuvo ausente en todo el debate. Sólo lo sacó a colación el representante del PP y en el bloque dedicado a las infraestructuras: “mientras yo hablo de la sequía, Sánchez habla de que está enamorado”".
Cambio de tercio. Sequía. "La Generalitat estudiará la próxima semana si levanta la emergencia por sequía", destaca La Vanguardia. Se trata de una información de Antonio Cerrillo que dice así: "El gobierno catalán valorará la próxima semana si levanta la fase de emergencia por la sequía, lo que, en caso de confirmarse, supondría una flexibilización de las restricciones en los usos del agua. Ésta es la evaluación que se hará tras las importantes aportaciones de lluvias registradas la última semana. Gracias a ellas, las reservas en la región de Barcelona y Girona, servida por el Ter y Llobregat, se ha incrementado hasta el 23%, lo que se aproxima al nivel del 25/27%%, establecido como el umbral que permitiría superar la fase más aguda de la sequía".
Sigue Cerrillo: "El Govern ha abierto la puerta a que se levante la emergencia por sequía en la región central de Catalunya y la Costa Brava, una fase en la que se entró hace tres meses, cuando las reservas cayeron por debajo de los 100 hm3. Según el último balance de la Agencia Catalana del Agua, con datos de este jueves, los embalses del Ter-Llobregat se sitúan en el 23% de su capacidad y han alcanzado un volumen de 140 hm3, con lo que se ha ganado más de un 40% desde que alcanzaron los valores mínimos a principios de marzo. El conseller de Acció Climática, David Mascort, ha destacado que está entrando “mucha agua” en los embalses y ha puesto como ejemplo las ganancias en el embalse de Sau (Barcelona). También indicó que, aunque la lluvia ya está remitiendo, en los próximos días se espera que sigan entrando caudales en los embalses, ya que tardan un tiempo en descender desde las cabeceras; y, además, se espera que se produzcan nuevos deshielos en los Pirineos. “Por lo tanto, la semana que viene podremos ver en qué punto están los embalses y comprobar si estamos en una situación para levantar la emergencia o no; hay que irlo evaluando día a día”, ha señalado el conseller".
3 de mayo, santoral: Felipe apóstol, Santiago el menor apóstol, Alejandro I papa, Ansfrido, Conleto, Juvenal de Narni, Maura de Antinoe, Pedro de Argo, Teodosio de Kiev, Timoteo de Antinoe y Violeta virgen y mártir.