Cuenta atrás para el fin de año. La actualidad posa el foco en Pamplona, donde Bildu arrebata la alcaldía a Unión del Pueblo Navarro en una moción de censura con los votos a favor de los socialistas de la comunidad foral. Gran escándalo. En Cataluña mientras tanto el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, avisa a Pedro Sánchez que la mesa A es para negociar la autodeterminación, no un nuevo Estatut ni ninguna otra salida al "conflicto de soberanía". Aragonès es insaciable. La amnistía ya es una pantalla superada cuando ni siquiera ha sido aprobada en el Congreso.
La amnistía ha sido el gran asunto de la segunda parte del año. Los redactores de La Vanguardia han elegido tal término como la palabra del año. Lo cuenta en el citado rotativo Magí Camps: "Como cada año al llegar diciembre, la redacción de La Vanguardia escoge la que considera la palabra que resume de un modo más significativo el año que se acaba. Se trata de una palabra informativamente relevante, no una palabra nueva, un neologismo. En esta iniciativa de la sección de Edición que empezó en el 2013, este año, por primera vez en las once convocatorias, ha ganado la misma palabra en castellano y catalán: amnistía. Si las elecciones de julio no hubieran trastornado la política española de la manera que lo ha hecho Pedro Sánchez con su propuesta de amnistía, quizá la ganadora habría sido la locución inteligencia artificial, que en la forma de sigla en inglés, AI, ha sido la escogida por los diccionarios Collins. Pero el terremoto político español ha marcado buena parte de este 2023 que tiene las horas contadas".
Sigue la pieza: "En anteriores convocatorias, sí coincidieron palabras del mismo ámbito informativo, como pasó en el 2018 con feminismo (mujeres), o en el 2020 con covid y confinament. Pero la unanimidad de este año es abrumadora y demuestra hasta qué punto la amnistía ha sido una bomba informativa de largo alcance. En la lista de las más votadas se han colado otras palabras relacionadas, como lawfare, la guerra judicial, y putodefender, una palabra soez y anecdótica, que resume las movilizaciones de la derecha y la ultraderecha ante la sede del PSOE en Madrid. Y un poco más abajo de la lista catalana, aparece mediador".
Y: "También hay otros ámbitos informativos que han merecido la atención sintetizadora de la redacción de La Vanguardia en la convocatoria del 2023, como la palabra sequía, que ha obtenido bastantes votos en las dos lenguas. La grave amenaza de restricciones a causa de la falta de lluvia se hace patente en el estado de los embalses, y enlaza con una de las ganadoras del año 2019: emergencia climática".
Hablando de sequía destaca una información de El Mundo con el siguiente titular: "La 'década perdida' por el proceso independentista agrava la sequía extrema que sufre Cataluña". El texto es de Iñaki Ellakuría y arranca así: "Los altos índices de fracaso escolar y bajo conocimiento del alumnado, el aumento de la pobreza infantil, la decadencia económica y la situación extrema por la sequía, con severas restricciones en la agenda y una lluvia de propuestas para revertirla, que van desde traer el agua en barcos de otras regiones de España a recuperar el polémico trasvase del Ebro, forman un combinado de difícil digestión que está contribuyendo a ahondar en la sensación general de declive en Cataluña tras el procés. Un contexto depresivo por el que muchos ciudadanos ya han empezado a exigir al Gobierno de Pere Aragonès responsabilidades ante la falta de respuestas y una gestión más que discutible, mientras los partidos de la oposición no descartan ya un final anticipado de la legislatura".
Sigue la nota: "Respecto a esta larga lista de problemas, el de la sequía, una de las peores registradas desde hace décadas por su duración e intensidad, que afecta especialmente a la zona metropolitana de Barcelona -en la que viven 5 millones de personas-, y las provincias de Gerona -donde se han perdido ya el 80% de las cosechas- y Lérida, ejemplifica la inacción y mala planificación de los respectivos gobiernos nacionalistas. Solamente en las últimas semanas el Govern parece haber reaccionado con cierta desesperación y convocando una cumbre de partidos para analizar medidas de consenso -las más eficaces tardarán entre dos y cuatro años en dar resultados- y declarando el estado de pre emergencia. Medidas que para la oposición y muchos expertos llegan tarde, mal y son insuficientes. «La situación de sequía que tenemos forma parte de un cuadro más general, que es el balance de estos últimos 10 años, donde hemos centrado las energías de las instituciones de autogobierno en cuestiones que han hecho mucho ruido», fue el reproche a modo de resumen de la situación que el líder del PSC, Salvador Illa, dedicó a Aragonès en un reciente cara a cara parlamentario".
Y: "El socialista subrayó, así, esa larga década de parálisis relacionada con el proceso independentista, con la Generalitat destinando la mayoría de sus recursos a alimentar la maquinaria de la confrontación con el Estado y el intento de secesión de 2017. Los datos de ejecución del actual Ejecutivo catalán en inversiones para el ciclo del agua muestran claramente esa inacción nacionalista: si en el año 2022 fue el 34% de lo previsto, es decir, uno de cada tres euros, en el 2023, hasta el mes de mayo, la ejecución apenas alcanzó 15%, uno de cada siete euros".
Pues no parece que la situación vaya a cambiar a corto y medio plazo. Las lluvias que riegan la península describen una curva que evita el territorio catalán, como si en la zona se hubiera apalancado un anticiclón.
En el plano municipal de Barcelona, El País destaca que "Xavier Trias retrasa su marcha del Ayuntamiento de Barcelona y su sucesión se enreda". Escribe Marc Rovira: "Xavier Trias no da muestras de tener prisa por abandonar el Ayuntamiento de Barcelona. El veterano político, de 77 años, afirmó repetidamente durante la campaña por las municipales del pasado mes de mayo que si no lograba la Alcaldía se marcharía a su casa, pero va retrasando su despedida del Consistorio de la capital catalana. El “¡que os zurzan!” que espetó el día de la toma de posesión como alcalde del socialista Jaume Collboni se interpretó como el portazo definitivo a su larga carrera política; sin embargo, medio año después de aquella bravata, el cabeza de lista sigue comandando el grupo de Junts en Barcelona, sin fecha prevista para su adiós. “Había un plan, pero las circunstancias han hecho prorrogar su estancia en el ayuntamiento más de lo previsto”, manifiestan desde el equipo de Junts, al tiempo que se indica: “Es evidente que esto no se puede alargar mucho más”. Retrasando la marcha, se alimenta la incertidumbre sobre quién tomará las riendas del grupo municipal. Jordi Martí Galbis es el preferido de Trias, pero en Junts hay varias voces que sostienen la conveniencia de apostar por otros nombres con más cartel, caso de las exconsejeras de la Generalitat Victòria Alsina o Neus Munté, o el portavoz del partido Josep Rius, para reforzar las posibilidades de conquistar la alcaldía en 2027".
Sigue el texto: "Desde el grupo municipal de Junts se pone de relieve que Trias se irá “cuando la situación en el Ayuntamiento esté ordenada”. El orden, en este caso, se asocia a que el PSC, que gobierna con una minoría de 10 concejales sobre 41, cierre un pacto estable para afrontar el resto del mandato. Collboni lleva semanas sondeando a posibles socios, tanto a los comunes como a Junts. “Se hace difícil saber de quien está más cerca el PSC, porque sabemos las conversaciones que tienen con nosotros, pero ni idea de lo que puedan hablar con los comunes y con Esquerra”, manifiestan desde el grupo de Junts. Jordi Martí Galbis es algo más explícito: “Desde el ámbito empresarial, asociativo y social, es decir, la gente que hace funcionar la ciudad, la opinión que nos llega es que hay una necesidad y una conveniencia para Barcelona de que la gente del equipo de Trias forme parte del gobierno de la ciudad”. Una afirmación que choca con lo que ha sucedido hasta ahora, ya que Junts ha dado a entender no tener interés por participar en una alianza con Collboni. El propio líder del grupo confesó haber descartado una propuesta del PSC para compartir la alcaldía, dos años para cada uno: “Le dije que de ninguna de las maneras”, reveló Trias".
De vuelta al gran asunto del año, la amnistía, el ministro de Presidencia y Justicia, Félix Bolaños, trata de aplacar el cabreo que existe en Junts ante la posibilidad de que una cuestión prejudicial pueda congelar los efectos de la medida. Lo cuenta Martí Odriozola i Marcé en El Nacional: ""Hubo un malentendido". Ha sido la respuesta de Félix Bolaños, ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, al ser preguntado por el tuit que publicó ayer a la portavoz de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras, afirmando que el Real Decreto-ley 6/2023 "pondría en riesgo" la amnistía. Bolaños ha querido zanjar la polémica proclamando que, "realmente, no ha habido ningún cambio" en la regulación de las cuestiones prejudiciales, sino que se ha incorporado al derecho español "jurisprudencia absolutamente pacífica" del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) y del Tribunal Supremo".
Continúa la pieza: "La periodista Elisa Beni señaló ayer en ElNacional.cat que el nuevo artículo 43 bis de la Ley de Enjuiciamiento Civil, incluido en el Real Decreto-ley 6/2023, "consagra dejar en suspenso la aplicación de la amnistía" cuando se presente una cuestión prejudicial al TJUE y prevé también que "cualquier otro juzgado o tribunal con asuntos referidos al proceso" pueda hacerlo. Esta reforma es la que alertó Junts per Catalunya, que anunció que votaría en contra de la convalidación del real decreto ley. Sin embargo, el ministro Félix Bolaños ha relatado que esta previsión sobre las cuestiones prejudiciales ya está incluida en el Estatuto del TJUE y forma parte "de las recomendaciones que el TJUE hace a todos los órganos jurisdiccionales" y ha argumentado que esta modificación era "un compromiso de España con la Comisión Europea para que se puedan desembolsar los 10.000 millones de euros" del Plan de Recuperación que están comprometidos. "Todas las cuestiones están exactamente igual que antes de que entrara en vigor el real decreto ley", ha concluido Bolaños".
Al margen de la política, Barcelona prepara ya los festejos de Nochevieja. No habrá espectáculo acuático en Montjuïc a causa de la sequía, pero sí una gran fiesta de drones. Barcelona siempre a la última. Lo explica en La Razón Jana Oteo: "Barcelona recibirá al 2024 con su convencional celebración en la avenida de María Cristina. No obstante, en esta ocasión, uno de los elementos más conocidos, la Font Màgica de Montjuïc, permanecerá inactiva debido a las restricciones derivadas del decreto de sequía. La remplazará un impresionante espectáculo de fuegos artificiales y drones, a cargo de la reconocida empresa francesa Groupe F, repitiendo la participación del año anterior en la Nochevieja. Hasta 470 drones iluminados llenarán el cielo de Montjuïc a una altura de 250 metros. El Institut de Cultura de Barcelona (Icub) ha explicado que la celebración de la noche de Fin de Año será un homenaje a Barcelona y su relación con el mar, en un año en el que Barcelona y el mar tendrán protagonismo en todo el planeta. La celebración contará con un pre-show antes de la medianoche, en el que se comenzará a vivir la fiesta de la Nochevieja con una ambientación musical y lumínica a lo largo de toda la Avenida Maria Cristina".
29 de diciembre, santoral: Tomás Becket, Bonifacio, Calixto, Primiano y David, rey y profeta.