La UE cierra la puerta a Ucrania, el PP se la abre a Vox
Fosas comunes para los muertos de Putin en Mariúpol. El club de campo europeo rechaza la adhesión por la vía rápida de Ucrania. Feijóo acepta un Gobierno de coalición con Vox en Castilla y León
11 marzo, 2022 08:29La Unión Europea vuelve por sus fueros. Durante unos cuantos días se generó la impresión de que las atrocidades de Putin habían cohesionado a los países europeos, que había dignidad en las instituciones comunitarias, que la comunidad libre de naciones estaba dispuesta a enfrentarse a Rusia y los designios tiránicos de Vladimir Vladimirovich. Había que ver los cánticos, los panegíricos y las alabanzas de la UE, un factor que irrumpía en la escena internacional como elemento de razón, de moral y de civilidad. Algo inaudito, inédito y esperanzador, el balneario de los eurócratas se convertía en un puntal de la comunidad internacional para detener los atropellos de Putin. Armas para Ucrania, solidaridad con los ucranianos, reconocimientos a Zelenski, que incluso llegó a intervenir de manera telemática ante sus señorías los diputados del Parlamento europeo. Hasta ayer.
La vieja Europa, el selecto club de los países confortables, rechazó el ingreso por la vía rápida de Ucrania. Se ve que le faltan papeles, que no ha completado todos los trámites, que hay plazos que cumplir, que falta un sello en el expediente, que no se atienden todos los requisitos y que la UE no va a hacer una excepción por mucho que Ucrania esté bajo las bombas rusas. Putin sonríe desahogado en su dacha, su búnker, el Kremlin o donde quiera que se esconda. Continúa el plan A. Ni Estados Unidos ni mucho menos Europa van a enseñar los dientes. Se conforman con la guerra económica, las sanciones y las multas, los bloqueos y los avisos retóricos.
"Los líderes europeos cierran la puerta a una adhesión rápida de Ucrania a la UE", titula El Confidencial. Del texto de Nacho Alarcón: "En la noche de este jueves los líderes tenían tres puntos principales en la agenda: la cuestión energética, que es enorme y con muchas variables; la discusión del aumento del gasto en seguridad y defensa a nivel comunitario; y la petición de Ucrania de formar parte de la Unión Europea. El último de los puntos ha sido uno de los que más atención ha recibido por ser considerado por Kiev como una de las mejores pruebas de compromiso con el futuro del país y es, además y según explicaban fuentes diplomáticas, el único punto en el que la declaración conjunta final que emitirán los Veintisiete llegaba sin cerrar. (...) “Todos los países de la parte occidental de Europa con los que hablo dicen que no debería haber un procedimiento de vía rápida o un proceso de adhesión acelerado”, ha explicado por su parte Mark Rutte, primer ministro holandés. “¿Podemos abrir un proceso de adhesión a un país en guerra? No lo creo. ¿Podemos cerrar la puerta y decir “jamás”? Sería injusto”, ha señalado por su parte el líder francés. En la declaración, publicada después de las tres de la mañana, los líderes subrayan que Ucrania pertenece "a nuestra familia europea", sin más promesas ni guiños".
Es lo que hay. La gran "familia" europea no está por la labor de acoger en su seno a Ucrania. De la nota de Alarcón: "Ucrania recibió el jueves un baño de realidad diplomática tras el rechazo de los Veintisiete a su petición de iniciar un proceso de adhesión exprés a la Unión Europea, con el que esperaba un guiño político europeo que atemperara el furor bélico de Vladímir Putin. Tampoco le ha ido bien en la mesa de negociación, donde Moscú dejó claro que no declarará un alto el fuego para establecer corredores humanitarios o para negociar el fin de las hostilidades. Mientras, el país sigue bajo el intenso bombardeo ruso para abatir la resistencia ucraniana, que a dos semanas del arranque de la invasión mantiene todavía el control de las grandes ciudades del país. Aunque nadie sabe cuánto más podrán aguantar".
Y es que los orondos líderes europeos, ese Charles Michel más el amigo Macron y el alemán Scholz, entre otros, esperaban que el ejército ruso fuera mucho más eficaz y la invasión se sustanciara en un fin de semana largo, de jueves a domingo. Cualquier cosa antes que tener que mojarse y mostrar al mundo el estado de franca decadencia.
Nada ha cambiado a mejor en Europa con la invasión de Ucrania, que en la UE se considera, a la vista está, un tema ruso.
En El Mundo entrevistan a Ana Botín, la presidenta del Banco de Santander, que antes de la negativa de la UE al ingreso rápido de Ucrania declaraba a dicho diario que "hemos entrado en un mundo nuevo y Europa muestra que tenemos valores y los defendemos". En el sumario se añade que "la presidenta de la Federación Bancaria Europea y el Banco Santander resalta que la disposición de Occidente a 'aislar a la economía rusa es un enorme cambio en el orden financiero mundial'". Es Carlos Segovia quien firma una pieza de la que mostramos las tres primeras cuestiones:
Pregunta ¿Qué impacto tendrá esta guerra en la economía de la Eurozona?
Respuesta: Antes de hablar de economía lo primero es que es un desastre humanitario. Los efectos a corto plazo en la economía europea serán diferentes en los países que son exportadores y los que son importadores, que los van a sufrir más. Pero incluso varios sectores de países exportadores se van a ver muy afectados. El impacto varía en toda Europa. En el sector financiero los bancos de algunos países europeos se van a ver más afectados que otros. Por ejemplo, exposición directa en la banca española es Rusia es muy cercana a cero, pero lo importante es la economía. Para los bancos que cuidamos de millones de clientes en toda Europa, lo que está ocurriendo no es buena noticia ni para los consumidores, ni para las empresas, especialmente las pymes que tanto han sufrido por el Covid. No hay muchas conclusiones claras de la situación actual, pero una es que tendremos más inflación. La otra certeza es que tendremos más volatilidad. Y la última, es que las implicaciones de la guerra irán mucho más allá de la energía y la inflación. Y creo que uno de los debates del momento es: ¿Qué más podemos hacer más allá de la intervención de los bancos centrales? ¿Qué otras medidas podemos, como gobiernos, y qué Europa en general, puede tomar?
P: ¿Qué se puede hacer?
R: La transición hacia cero emisiones es mucho más difícil y en algunos países no hay otra solución que volver, al menos temporalmente, al carbón o al petróleo. pero tenemos la oportunidad de doblar la apuesta por la transición verde. Como Federación Bancaria Europea y también como Banco Santander estamos comprometidos con las emisiones cero. Está claro que necesitamos reducir nuestra dependencia del petróleo y del gas ruso. Lo que significa que necesitamos más inversión. Así que, ¿por qué no aprobar más inversiones, más rápidas en energías renovables y nuevas tecnologías y más inversiones en innovación? Acaba de publicarse un documento muy importante de la Comisión Europea en el que se va a invertir significativamente más en el 10% de las mejores universidades de Europa. Hay una oportunidad de hacer más. Es una situación única en la vida.
P: ¿Qué transmite a su equipo en el banco?
R: Mi mensaje a mi equipo es el mismo, como creo que debería serlo a la sociedad. Es, en primer lugar, que tenemos que ocuparnos de la emergencia humanitaria, ocuparnos de los refugiados, asegurarnos de que estamos haciendo todo lo posible para ayudar a los ucranianos. Pero, al mismo tiempo, que tenemos que seguir adelante, continuar con nuestra vida cotidiana y actuar. Yo he bajado la calefacción en mi casa a 17 grados. Son pequeñas cosas que los consumidores podemos hacer. Como líderes empresariales, tenemos que seguir con nuestros programas de inversión tanto como podamos tratando de hacer que nuestras empresas sean más competitivas.
Diecisiete grados en casa de Ana Botín. Qué bárbaro, oigan.
Entre tanto prosigue la desinformación rusa. "Rusia dice sin pruebas que las víctimas de la maternidad de Mariúpol son actrices “con maquillaje muy realista”", apunta El Diario. Cuanto más escandalosas son las mentiras, más se propagan. Del texto de Vanessa Rodríguez en el referido digital: "La maquinaria propagandística rusa continúa esparciendo mensajes para tratar de contrastar las informaciones de las masacres de civiles que se están produciendo en Ucrania. Dentro del país, Rusia ejerce la censura hasta tal punto que la mayoría de medios internacionales han tenido que salir por temor a las represalias si no siguen la línea oficial. Fuera, sus seguidores, sus embajadas y sus mandatarios repiten una y otra vez los mismos mantras: no atacan civiles (aunque la ONU ya cifra en al menos 550 civiles los muertos, entre ellos 44 niños), no han invadido Ucrania (aunque sus tropas intentan abrirse camino por todos los frentes), no están atacando el país sino que es "una operación especial" (aunque los bombardeos se suceden desde hace dos semanas) y todo es porque hay que "desnazificar Ucrania" (aunque Ucrania es una democracia con menos ultraderechistas que otros muchos países europeos)".
Sigue la nota: "Este miércoles, el ataque a un hospital infantil y maternidad en la sitiada Mariúpol conmocionaba al mundo. En el ataque, al menos fallecieron tres personas y otras 17 resultaron heridas, entre ellas varios niños, según los datos difundidos por las autoridades locales. Sin embargo, el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, ha negado este jueves ante los medios internacionales presentes en Turquía que en el hospital hubiera pacientes y acusó "a los medios occidentales" de estar presentando únicamente "el punto de vista ucraniano" y de ser partícipes de una "rusofobia dirigida desde EEUU". Sin negar que se produjera el bombardeo, Lavrov ha asegurado sin pruebas que este centro hospitalario estaba en manos de un grupo nacionalista extremo llamado Azov y otras organizaciones radicales. "Era una base del batallón ultrarradical", ha añadido".
Frente a esas "tesis", imágenes de muertos y destrucción en Mariúpol, donde más de doscientas mil personas han quedado atrapadas sin agua, alimentos ni electricidad. En la portada del Abc hay unos civiles arrojando cadáveres a una fosa común. Esto es lo que cuentan Gabriela Ponte y J. Nadales en dicho diario: "Las imágenes de los ciudadanos de Mariúpol depositando cadáveres en fosas comunes se han convertido en el testimonio gráfico más escalofriante del conflicto entre Rusia y Ucrania. Envueltos en plásticos o en mantas, los cuerpos se arrojan a una zanja -como una enorme herida excavada en la tierra endurecida por las bajas temperaturas- situada a las afueras de la ciudad ante la imposibilidad de otro tipo de enterramiento. La ciudad portuaria situada junto al estratégico mar de Azov, en el óblast de Donetsk, al sureste del país, es -cuando se cumplen dos semanas del inicio- el símbolo del horror. Su conquista es clave para las aspiraciones de Rusia de unir la península de Crimea con los territorios del Donbass".
Y: "Los planes de evacuación de civiles no avanzan, entre acusaciones cruzadas. Según las autoridades ucranianas, unas 1.300 personas han muerto como consecuencia de los bombardeos rusos, una cifra imposible de verificar. «Lo único que quiero es que esto termine. No sé quién tiene la culpa, ni quién tiene razón. Malditos sean todos. ¿Que qué siento? Que quiero seguir viviendo», decía a Euronews Volodímir Bykovskyi, trabajador de los servicios sociales, ahora convertido en sepulturero".
En España, PP y Vox han alcanzado un acuerdo para gobernar en Castilla y León. "Feijóo avala el primer Gobierno del PP con la extrema derecha", titula El País por arriba. Es la primera vez en quince días que la invasión no es el tema principal de portada. Los medios dan a la noticia un gran valor simbólico. Escriben J. Casqueiro y M. Bassets: "El nuevo PP de Alberto Núñez Feijóo, que promete una senda de moderación, claudica ante Vox. El cordón sanitario para dejar fuera a la ultraderecha de los gobiernos se rompió ayer en Castilla y León. El PP cedió a Vox la presidencia de las Cortes, una vicepresidencia y tres consejerías, además de asumir la ley de violencia “intrafamiliar” que pide el partido de Abascal en su negación de la violencia machista. Feijóo avaló ayer el pacto: “Mañueco acaba de evitar un adelanto electoral”, dijo, y culpó al PSOE por no haber facilitado la investidura. El máximo responsable de los populares europeos, Donald Tusk, tachó de “triste sorpresa” esta “capitulación” ante la extrema derecha".
Todavía no es presidente del PP y Feijóo ya tiene sobre la mesa un marrón más que notable. Sigue la crónica del diario de Prisa líneas después: "El primer Gobierno del PP y Vox en Castilla y León, donde los populares cederán además a la formación ultra la presidencia del Parlamento regional —más otro puesto en la mesa de ese órgano—, la vicepresidencia de la Junta y tres consejerías, retumbó en las direcciones de todos los partidos pese a que era previsible. Por su significado internacional, al navegar contra corriente del aislamiento a la ultraderecha en Europa incluso donde gobiernan partidos conservadores, pero también por lo que pueda significar de precedente ante próximas elecciones nacionales, justo cuando el PP acaba de mudar de líder. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, también desde París, dónde acudió a la cumbre europea de Versalles, etiquetó la noticia como “pésima para la democracia española y para el PP”. Sánchez auguró que esa decisión de “abrir la puerta de los gobiernos a la ultraderecha” la acabarán pagando los populares en términos políticos. Lo repitieron en el Congreso otros dirigentes socialistas y de otros partidos aliados del Ejecutivo, como Unidas Podemos, Más País y ERC. También fue la alerta que emitieron portavoces de partidos de centro o conservadores tradicionales, como el representante del PNV, Aitor Esteban, que lamentó el “gravísimo error” del “nuevo PP de Feijóo” al legitimar con ese pacto “a un partido que es antidemocrático, que es antisistema y, además, le está facilitando áreas de poder para que puedan avanzar en políticas regresivas”".
11 de marzo. Se cumplen 18 años del atentado terrorista en Madrid de 2004, con 192 muertos y casi dos mil heridos. Santoral: Áurea de San Millán, Benito de Milán, Constantino de Escocia, Domingo Cam, Oengo Cúldeo, Pionio, Sofronio de Jerusalén y Vicente abad.