La política catalana vuelve a estar en el centro del albero hispano. Aragonès, el 132 presidente de la Generalitat según la creativa contabilidad de la escuela historiográfica Som collonuts, parece encarnar la posibilidad de un carpetazo al procesismo y no tanto por lo que dice (amnistía, autodeterminación y felicidad) sino por las formas templadas, corteses y suaves en su desempeño público. Hay expectación. El republicano es nuevo en la plaza, de otra generación. En Madrid le esperan con el colmillo afilado. La Villa y Corte política es como el tendido 7 de Las Ventas. Bien lo sabe el maletilla Rufián, tan lejos en las formas de Aragonès. Si ERC tiene alma, son dos, la de Santako y la del pijerío del Maresme.
En Madrid se debate sobre los indultos a los presos del procés. Ayer se abrió la espita de esa conversación pública. Moncloa lanza globos sonda a la espera de que le llegue el informe del Tribunal Supremo, con toda seguridad desfavorable tras los desplantes de Cuixart y el seguidismo de los demás presos. "El Gobierno sopesa condicionar el indulto de los presos del procés a que cumplan la ley" titula El Confidencial de apertura. Pues no sabe el Gobierno con quien ha topado. Cuixart, siempre adelante, tozudamente alzado, ni un paso atrás aunque sea para tomar impulso, ho tornarem a fer, las luchas compartidas y tal. Dicho con todos los respetos, un "malalt" de los eslóganes. El sumario de El Confidencial abunda en que "el Tribunal Supremo prevé cerrar esta semana sus informes, previsiblemente negativos, y la medida de gracia podría estar supeditada a que no se cometan delitos en los próximos años". El texto es de Fernando Garea y Beatriz Parera e incide también en la cuestión del momento procesal/político oportuno: "Pedro Sánchez tiene decidido desde hace meses que indultará a los presos independentistas, y así se lo ha transmitido a los dirigentes de ERC en varias ocasiones, por ejemplo, mientras negociaban los Presupuestos Generales del Estado para este año. El presidente del Gobierno no ha cambiado de idea. Deberá esperar a recibir todos los informes, lo que sucederá, probablemente, esta misma semana. Fuentes del Ejecutivo explican que lo más probable es que sean aprobados en el mes de julio para completar el trámite, y así, esperar a que se celebren las primarias del PSOE de Andalucía, donde se enfrentan Susana Díaz y Juan Espadas, el candidato apoyado por el mandatario socialista, y que quedarán zanjadas a finales de junio".
En El País apuntan que "El PP amenaza al Gobierno con recurrir los indultos del ‘procés’". La formación conservadora atisba en la medida de gracia un nuevo episodio de desgaste de Pedro Sánchez y ya se lanza sobre la presa. Escribe Elsa García de Blas: "El Gobierno de Pedro Sánchez recibirá en los próximos días el expediente completo del Supremo sobre la petición de indulto a favor de los 12 condenados, 9 de ellos en prisión, por el proceso independentista catalán. El PP amenazó ayer al Ejecutivo con desatar una batalla judicial en el Supremo si se conceden los perdones. Esta posibilidad, según el PP, implicaría el fin de la legislatura, pero los conservadores carecen de los votos suficientes para forzar un adelanto electoral. Mientras, el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, recordó ayer: “Los indultos son instrumentos que están previstos en la ley y, por tanto, hay que verlos con naturalidad, sean favorables o desfavorables”. El presidente catalán, Pere Aragonès, aseguró que “los indultos no son la solución”. Pero añadió: “No nos opondremos a cualquier propuesta que alivie el dolor de los presos y las presas. No me opondré a cualquier paso que se dé a favor de la libertad de los presos”".
El caso es que si el PP recurre al Supremo, el asunto se podría envenenar no poco. De la misma crónica: "El alto tribunal abrió hace años la vía en varias sentencias para anular indultos si no están debidamente justificados. La dirección del PP descarta protestas en la calle para no dar alas a Vox".
En El Mundo van directos al grano y ya dan por superada la discusión interna en el seno del Gobierno. El meollo de los indultos no es el cómo sino el cuando, tal como señalan Raúl Piña y Manuel Marraco: "La sensación y los inputs en el Ejecutivo son que Pedro Sánchez podría estar dispuesto a asumir el coste de conceder esta medida de gracia, aunque la respuesta oficial es que la decisión «no está tomada» y, en todo caso, la última palabra es del presidente. Según las fuentes consultadas, la opción pasaría por verano, finales de junio o en julio. Se perseguiría una fecha más aliviada políticamente para limitar el coste de la decisión, sea o no favorable a los independentistas".
O sea que se está preparando una operación Viernes Santo (legalización del PCE). Sigue la nota: "En Moncloa saben que tomar esta decisión tiene un precio, sobre todo porque puede hacerse en contra de los informes del Supremo y la Fiscalía: un coste, eso sí, más alto en el seno del PSOE -donde parte de su electorado y de sus barones podría mostrarse en contra- que en Unidas Podemos. De ahí que haya quien manifiesta más dudas y reticencias en el seno del PSOE, con sectores reacios a la medida, alegando, por ejemplo, que los políticos presos no han mostrado arrepentimiento o que, incluso, han expuesto su voluntad de repetir lo que hicieron en 2017 y por lo que se les condenó".
Y: "La otra medida que también está sobre la mesa, y avanzada, es la reforma del delito de sedición en el Código Penal, que también implicaría la libertad de los políticos catalanes. Con todo, en el caso de que el Consejo de Ministros decida conceder los indultos --una opción posible a día de hoy-- se busca un escenario propicio. Superadas las elecciones en Cataluña y Madrid, no se advierte una cita con las urnas que pueda penalizar a los socialistas. Que pudieran sufrir desgaste al tiempo que dar munición electoral a sus rivales".
Los indultos planearon ayer sobre el Pati dels Tarongers. En El Nacional, Marta Lasalas describe los contactos de Iceta con unos y otros: "Algunos de los momentos más esperados por los fotógrafos han sido los de los saludos y las despedidas. Entre estos la conversación de Iceta con Aragonès, y el "tenemos que hablar" con el que se ha despedido el ministro, pero sobre todo, el encuentro del dirigente del PSC con los presos políticos de Lledoners. Todos los ojos se han concentrado en el frío saludo del ministro socialista con Junqueras y el encuentro con el resto de los presos políticos. Testigos de la conversación entre Iceta y el líder republicano aseguran que se ha limitado a un intercambio de saludos y un tópico "cómo va?" al cual Junqueras habría respondido gélido: "tú seguro que mucho mejor que yo"".
Continúa Lasalas: "Ha habido también una breve conversación del dirigente socialista con Sànchez y una con Cuixart que, como a buena parte de los presentes, le ha dedicado un cálido abrazo. Iceta ha intercambiado también un abrazo con el presidente del consell nacional de ERC, Josep Maria Jové, pendiente de juicio por su participación en el 1-O".
Son señales de distensión que hubieran sido imposibles con Quim Torra, cuyo legado fue sembrar discordia y aumentar la fractura social. Si por algo será recordado el 131 (no el Seat, sino Torra) será por su incapacidad para suavizar aristas.
En cuanto al nuevo Govern, hay una cierta confusión en torno a la figura del nuevo consejero de Economía y Finanzas, el exdirectivo de la Caixa Jaume Giró. Para aclarar extremos y comprender cabalmente al personaje viene al pelo el artículo publicado ayer en Crónica Global por Xavier Salvador titulado "Giró, el hijo desheredado de Fainé". Más de Crónica. "Tras la investidura, comienza la inconfesable guerra por el control de TV3" es el titular de la apertura. Momentos intensos en el panorama mediático, agitadas las aguas por el despido de Pilar Rahola. De la nota de María Jesús Cañizares: "La guerra mediática no ha hecho más que empezar, como lo demuestra la decisión de La Vanguardia de prescindir de la escritora y tertuliana Pilar Rahola, cuyo activismo a favor de Carles Puigdemont no encaja con un nuevo Govern que pone sordina a las posiciones independentistas más radicales. Está por ver cómo queda su sobredimensionada presencia --así lo demuestran los informes del Consejo Audiovisual de Cataluña (CAC), ente regulador también pendiente de renovación-- en la televisión catalana. Dicho de otra manera, Esquerra pide paso en una CCMA inmune a los recortes pues, no en vano, TV3 y Catalunya Ràdio están concebidas como una estructura de Estado. En efecto, el nuevo Govern gestionará una televisión catalana deficitaria donde solo el 16% de la audiencia se declara contraria a la independencia de Cataluña, según el barómetro publicado por el Centro de Estudios de Opinión (CEO) dependiente de la Generalitat a finales de 2020".
Que el 16% de la audiencia de TV3 no sea independentista es uno de esos insondables misterios de la especie humana. Imaginen un consumidor de canales temáticos deportivos al que no le guste el deporte. Pues eso es lo que son ese 16%.
El Abc subraya en su portada que "El PSC domina las empresas estratégicas del Estado". Viene al hilo de las opciones de Marc Murtra, definido como un hombre de Salvador Illa, para hacerse con las riendas de Indra. Otros socialistas catalanes con mando en plaza económica son Isaías Táboas, en Renfe, Maurici Lucena, de Aena y Jordi Hereu, de Hispasat. La pieza es de Guillermo Ginés y Àlex Gubern y arranca así: "Pedro Sánchez ha profesionalizado la tradicional ‘cuota’ política del PSC. El presidente del Gobierno no solo ha mimado a la formación en el Consejo de Ministros, sino que también ha trufado las compañías públicas de empresarios ligados a los socialistas catalanes. Un guiño a un partido político que fue determinante en la llegada al poder de Sánchez y que ha provocado que hoy antiguos dirigentes del PSC controlen empresas clave para las infraestructuras que facturan más de 8.200 millones de euros el año de la pandemia y controlan unos 72.000 empleos".
Cambio de tercio. Vozpópuli anuncia una visita relámpago del emérito por antonomasia. "Juan Carlos I viajará a España en junio antes de su retiro definitivo en Abu Dhabi" y "El rey emérito pasará solo unos días en el Palacio de La Zarzuela antes de volver a la capital de Emiratos, donde se está construyendo una vivienda para fijar su residencia de manera permanente" son los titulares de la pieza de Antonio Rodríguez que dice así: "Juan Carlos I tiene previsto regresar a España a finales de junio y pasar varios días alojado en el Palacio de La Zarzuela, la que fuera su residencia oficial durante casi 60 años, según desvelaron a Vozpópuli fuentes próximas al Rey emérito. La estancia del padre de Felipe VI en territorio español no se prolongará, por tanto, mucho tiempo ya que tiene previsto regresar al cabo de unos días a la capital de Emiratos Árabes Unidos, donde el rey emérito se está construyendo una vivienda para fijar su residencia permanente en el país árabe. Así se lo ha transmitido a los familiares más allegados que le han visitado en las últimas semanas. Don Juan Carlos quiere acabar con la idea de que se encuentra en una especie de autoexilio y cree que ha llegado el momento de volver a España, aunque sea brevemente, una vez que ha procedido a las dos regularizaciones fiscales ante la Agencia Tributaria".
25 de mayo, santoral: María Magdalena de Pazzi, Gregorio VII papa, Beda el Venerable, Aldelmo, Zenobio de Florencia y León de Troyes.