Primer año de pandemia y batalla en el centroderecha
Una atención primaria al borde del colapso lidera la lucha contra el virus. Peligran las nóminas de parados y de los ERTE por el ataque informático. Hervías, exmano derecha de Rivera, se pasa al PP
14 marzo, 2021 09:13La fiel infantería es el personal de los Centros de Asistencia Primaria. Médicos, enfermeras, auxiliares, el personal sanitario de la primera línea, quienes primero encajan el golpe. Un año después de la declaración del estado de alarma siguen igual, infradotados, solos en las trincheras, con la sensación de que la mejor sanidad del mundo según la bienintencionada propaganda política depende de sus escasos recursos y de sus cada vez más menguadas fuerzas.
Esa es la conclusión de la apertura de Crónica Global, cuyo titular apunta que "una atención primaria 'en mínimos' lidera la fase decisiva" para salir de la pandemia y dejar atrás la peor pesadilla de nuestra historia reciente. El sumario amplía el primer enunciado con este apunte: "Los ambulatorios de Cataluña asumen la operativa de la vacunación masiva con el 'personal agotado' y un déficit crónico de plantilla y recursos".
El texto es de Ignasi Jorro, que escribe que "doce meses después de la declaración del estado de alarma en España, el sistema sanitario vuelve a la casilla de salida. El primer año de combate contra el Covid-19, la infección que causa el virus SARS-CoV-2, lo lideraron los hospitales. Pero la salida de la pandemia, la luz al final del túnel, la vacunación, la coordinará y asumirá la atención primaria, como explicó este medio. Lo hará con los trabajadores "agotados" y un déficit crónico de personal y recursos en Cataluña, carencia de la que ha avisado recientemente Amnistía Internacional".
Continúa Jorro: "Así las cosas, 365 días después de que el Gobierno declarara la alarma en España y comenzara la lucha nacional contra una epidemia global, los sanitarios avisan. Si el primer nivel asistencial debe empujar al país fuera de la enfermedad, hay que dotarlo de recursos. "Estos 12 meses hemos hecho un esfuerzo físico y emocional titánico. Todo el mundo ha puesto horas extra, sin material, nos hemos infectado más que nadie sin, a veces, ver las justas compensaciones que tocaban. Y ahora la gente no para de preguntar en su ambulatorio cuándo le tocará vacunarse", avisa David Arribas, secretario de acción sindical de Metges de Catalunya (MC)".
En relación a los sanitarios resulta especialmente significativa una pieza de El Confidencial que viene con la firma de Agustín Rivera. "¿Aplausos a los sanitarios? La atención primaria concentra la mitad de las agresiones" es el titular de una información centrada en Andalucía pero extrapolable al resto de España. El texto arranca así: "Y los aplausos de las ocho de la tarde se convirtieron en críticas y agresiones. "¿La razón? Porque el ser humano es así", se lamenta Rafael Carrasco, presidente del Sindicato de Médicos de Andalucía en conversación telefónica el Día Europeo Contra las Agresiones a Médicos y Profesionales Sanitarios. Andalucía es la comunidad con mayor número de agresiones, según datos del Observatorio Médico Colegial. "La gente agrede porque puede… y me explico: ¿a qué no se atenta a un funcionario de Hacienda o de la Seguridad Social? Pues no lo hacen porque para entrar en las oficinas hace falta pasar por un arco metálico y hay medidas disuasorias como guardias de seguridad permanentes. En los centros de salud entra el que quiere"".
Sigue el texto: "En datos nacionales, aunque el número total de agresiones comunicadas a los colegios de médicos en el año 2020 en toda España asciende a 441 casos, un 35% menos que el año anterior (efecto del confinamiento y del miedo al contagio al desplazarse a un centro de salud), la atención primaria acumula más de la mitad de las agresiones en 2020 (52%). El 90% de las agresiones en 2020 fueron en forma de amenazas e insultos, siendo esta última la que más crece. En los años 2019 y 2020, seis de cada diez agresiones han sido sufridas por mujeres. Los datos han ido a peor: 2019 generó la cifra más alta de la última década, con un total de 677 agresiones".
En El País también dedican la portada al aniversario del confinamiento domiciliario y resumen así la situación en el ámbito de la salud: "En el plano sanitario, destacan problemas especialmente acusados en España: el elevadísimo número de muertes en las residencias de ancianos; el alto porcentaje de sanitarios contagiados por falta de equipos de protección; la desescalada precipitada tras la primera ola y el tropiezo en la misma piedra en Navidades. El sistema sanitario ha resistido el test de estrés de las sucesivas oleadas gracias a la abnegación de sus profesionales, pero la pandemia ha puesto de manifiesto la debilidad en la que se encuentra a causa de los recortes de la década anterior. También ha quedado en evidencia la fragilidad de las estructuras de salud pública —con una ley de 2011 que aún no ha sido desarrollada del todo— y de los mecanismos de decisión en un Estado descentralizado. El Consejo Interterritorial de Salud, como órgano de cogobernanza, se ha demostrado un instrumento poco ágil (y todo lo ha empeorado la mala disposición política de algunos). Es urgente reforzar los servicios centrales del Ministerio de Sanidad, desarrollar una mucho mejor gestión de los datos y reorientar el mecanismo conjunto de toma de decisiones".
Como es obvio, la situación en el sistema de salud pública está en el foco de los medios, pero no en el de la política de momento.
La portada del diario de Prisa también alude a los efectos económicos de la catástrofe. Dice así: "En el plano económico, la posición de España en el furgón de cola de Europa en cuanto a retroceso de PIB se explica por su elevadísima dependencia del sector turístico, epicentro del terremoto. La explicación, sin embargo, no es consuelo. Ante el descalabro, el Gobierno ha dado respuestas de protección por lo general correctas en su orientación —ERTE, créditos avalados por el ICO, refuerzo del paraguas social con el ingreso mínimo vital y, esta misma semana, ayudas directas a empresas y autónomos—, pero casi siempre con cierto retraso con respecto a la acción de socios europeos y con dificultades de implementación. La pandemia vuelve a subrayar problemas endémicos españoles —mercado laboral disfuncional, baja productividad, exceso de pequeña empresa, dudosa sostenibilidad del sistema de pensiones con frágil base cotizante—. Todo ello tendrá que ser objeto de atención y reformas. Será esencial gestionar de forma eficaz los fondos europeos, que los estímulos no se retiren prematuramente y diseñar un plan fiscal a medio plazo que genere confianza. En lo positivo, la pandemia ha puesto en evidencia una notable disposición al diálogo de sindicatos y patronales".
Año dos de la pandemia. El próximo mes puede ser especialmente duro, aún más, para los desempleados y el personal que sufre expedientes de regulación temporal. Así avisa Vozpópuli: "El ciberataque y una huelga en el SEPE amenazan el pago del paro y los ERTE en abril". Según este medio, "loss trabajadores del organismo temen no poder tramitar las nóminas de 2,5 millones de parados y los 900.000 ERTEs activos si no se arregla la situación antes del 30 de marzo". Escribe Alberto Sierra: ""Estamos trabajando como en la época de Cristo, con papel y boli, recibiendo las solicitudes de información rellenas a mano y recogiendo papeles, pero sin poder tramitar ni mecanizar nada, haciendo lo que buenamente podemos sin ordenadores ni líneas de teléfono operativas. Tenemos luz en las oficinas, y de milagro". Así resume la directora de una oficina del Servicio de Empleo Público Estatal (SEPE) la caótica situación que se vive desde que el pasado martes el organismo fuese víctima de un ciberataque cometido a través de un virus de la familia 'ransomware', denominado Ryuk, que mantenía aún este viernes secuestrados los ordenadores de los casi 8.000 empleados del SEPE".
Continúa la información: "Desde el mismo día del ciberataque, cuando el Centro Criptológico Nacional (dependiente del CNI) intervino para hacer frente a la intrusión informática que dejó sin servicio a las más de 700 oficinas del organismo en todo el país, el director general del SEPE, Gerardo Gutiérrez, y la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, aseguran en público que las bases de datos y el pago de las prestaciones no se han visto comprometidas por el ciberataque y que el servicio "se restablecerá paulatinamente en los próximos días". Sin embargo, en comunicados internos distintas oficinas provinciales aseguraban el martes a sus empleados que recomponer el servicio llevaría "tirando corto" al menos una semana. Tras cuatro días sin ordenadores, sin teléfono, sin acceso a las aplicaciones que se utilizan para mecanizar, tramitar y pagar las prestaciones, y sin tener conocimiento de que exista ningún 'plan B' para enfrentar el peor escenario posible, entre los empleados del SEPE empieza a cundir el pánico".
Si el sistema no se arregla antes del 30 de marzo, Vozpópuli apunta que corren peligro las nóminas de los 2.5 millones de trabajadores en paro y de los 900.000 que están en ERTE.
Política. La batalla en el centroderecha sigue en lo alto de las cabeceras de los medios. Fran Hervías, el que fuera secretario de Organización de Ciudadanos y mano derecha de Albert Rivera, se ha pasado al PP. Otro clavo en el ataúd de Inés Arrimadas, cuya operación Murcia está siendo letal para ella y su partido. A Hervías le entrevista en El Mundo Juanma Lamet. Ahí van un par de preguntas con las respuestas más mollares:
Pregunta: ¿Por qué se va de Ciudadanos?
Respuesta: Llevo casi 15 años en Cs, desde su fundación. Pero ahora se ha convertido en una muleta más del sanchismo. Ya no es parte de la solución de España, sino un problema. En estos meses he venido trasladando que no compartía la estrategia de acercamiento a Pedro Sánchez y a Pablo Iglesias, y que era totalmente errónea. Ciudadanos no nació para eso, sino para hacer frente a quienes quieren romper nuestro marco constitucional. Me resulta imposible seguir en un partido que ha abandonando los valores y principios liberales. Por eso dejo mi acta de senador y mi militancia.
Pregunta: ¿El detonante ha sido la moción de censura en Murcia?
Respuesta: No, la decisión la tomé hace varias semanas.
Pregunta: ¿Cuándo dijo «me voy»?
Respuesta: En la campaña de las elecciones catalanas, donde Cs renunció a plantar cara al separatismo y dijo que iba a apoyar al PSC, que es el mayor cómplice de aquello que combatía el partido en Cataluña. Además, recibí determinadas directrices para ser comedido con el Gobierno. Por ejemplo, hace unos meses, Lorena Roldán, cuando aún era portavoz en el Senado [antes de irse al PP], me trasladó que le habían pedido retirar el veto de la Ley Celaá. ¡Una ley que excluía la enseñanza del castellano como lengua vehicular en Cataluña, que es uno de los principios fundamentales de Cs!
En El Español, Daniel Ramírez traza las últimas horas de la formación naranja en una colorida crónica de la que destacan estos párrafos: ""¡Son unos mafiosos! ¡Unos mafiosos!". Es la voz de Carlos Cuadrado en el manos libres mientras conduce. El urdidor de la moción de censura acaba de enterarse de que el PP le ha robado la cartera. Murcia seguirá en poder de Pablo Casado. Y Ciudadanos, fundado por escritores y poetas, ya es el verso de Idea Vilariño: "Les faltan tantas cosas que les duelen las manos". Les falta Madrid, les falta Murcia. Languidecen en Cataluña. Y al ritmo de la palpitación del partido desangrado resuena el lamento de la gran mayoría de sus altos cargos: "¿Es posible que nos estemos suicidando así? Ciudadanos no merece este final"".
Sigue Ramírez líneas después comentando el caso de la tránsfuga Isabel Franco, la mujer que destrozó la moción de Ciudadanos: "Ella es uno de los personajes clave de esta historia. Isabel Franco, periodista de profesión, fue cabeza de lista naranja en las últimas autonómicas. El pacto con el PP -y Vox- la situó en la vicepresidencia. Poco tardó en agriarse su relación con el núcleo duro de Arrimadas. Con Cuadrado y Espejo, principalmente. "La arrinconaron. La trataron fatal. La expulsaron en la práctica de la vida orgánica del partido. Montaron una gestora. Fue tremendo. ¿Qué esperaban?", relata un miembro de la Ejecutiva a este periódico. Dicho de otro modo: para quienes conocían el funcionamiento interno de la organización, la puñalada de Franco "no fue una sorpresa", sino una traición para responder a otra traición".
Cataluña. Aprovechando el aniversario de la pandemia asoma Torra en Vilaweb con una avance de sus memorias, escritas durante el confinamiento en la Casa dels Canonges. Estos son sus primeros momentos de reclusión monacal: "He travessat el pont neogòtic i en Gaietà, l’encarregat de la casa, ja m’esperava a la porta. Primer, he pujat a l’habitació, al primer pis, a deixar la roba. Després he baixat a esmorzar. Sense temps, he entrat al despatx Macià per preparar els punts de la reunió de presidents autonòmics. Després han arribat en Pere i l’Anna i hem anat a la Sala dels Diputats –abans es deia Sala Verge de Montserrat, però vaig impulsar-ne el canvi de nom. No tinc res contra la Moreneta, però li van posar el seu nom durant la dictadura de Primo de Rivera. Tot estava a punt. La pantalla amb divuit finestretes, una per al president Sánchez i la resta per als presidents autonòmics. No es podria trobar una imatge més gràfica del que és l’estat de les autonomies. Disset pantalletes més una".
Sigue: "La reunió ha estat esperpèntica. Abans-d’ahir, solemnement i clara, sense previ avís de res, el president Sánchez declarava l’estat d’alarma i, de passada, la centralització de les competències en Salut, Interior i altres. És, de facto, un 155 sanitari. Res de nou, l’Espanya de sempre. Mentre la reunió estava en marxa, em tocava prendre’m la temperatura, d’acord amb el protocol de prevenció que hem establert. Ha d’entrar a fer-ho Joana Nieto, la meva cap de Secretaria, amb un termòmetre d’aquells de pistola. Ara ja no recordo qui parlava en aquell moment, però el cas és que alguns presidents autonòmics han quedat literalment bocabadats quan han vist l’acció. Em sembla que no hi ha gaire consciència del monstre que tenim al davant".
14 de marzo, santoral: Alejandro de Pidna, Lázaro de Milán, Leobino de Chartres, Matilde y Paulina de Fulda.