Pedro Sánchez, presidente del Gobierno / EP

Pedro Sánchez, presidente del Gobierno / EP

Política

Sánchez remolonea con la mesa de diálogo: “veo un contexto difícil en Cataluña”

El presidente del Gobierno insiste en la necesidad de acuerdos entre las partes que sean refrendados por la sociedad catalana en una votación

28 junio, 2020 11:11

Pedro Sánchez ha remarcado su intención de convocar la llamada mesa de diálogo con el Gobierno de la Generalitat para el mes de julio que está a punto comenzar aunque, por otro lado, también ha dejado entrever que quizá no sea éste el momento más adecuado debido al “contexto difícil” que genera el clima preelectoral que percibe en Cataluña.

Además, el presidente del Gobierno asegura en una entrevista publicada este domingo por La Vanguardia, la primera tras el fin del estado de alarma, que en estos momentos el primer plano debe estar ocupado por la crisis del coronavirus por encima de cualquier otra cuestión.

La crisis, asunto prioritario

“La prioridad ahora mismo del conjunto de la sociedad española, y también de la sociedad catalana, es la crisis económica”, recalca Sánchez, que también ha aprovechado para enviar un mensaje de unidad.

“Si alguna lección hemos podido extraer de la situación vivida estos meses es que si no nos unimos y compartimos difícilmente vamos a ser lo suficientemente resistentes y resilientes para afrontar los cambios que se han acelerado con la Covid-19”.

Futura votación

No sólo se trata de la pandemia del coronavirus y sus funestas consecuencias tanto para la vida de las personas como para la economía. Para Sánchez, el escenario tampoco termina de ser del todo propicio para abordar la cuestión sobre Cataluña “puesto que se está generando una situación claramente preelectoral”.

En cualquier caso, Sánchez ha insistido en que el deseo de Moncloa es convocar la mesa en las próximas semanas y, además, también ha reiterado su particular receta para resolver la situación. “El camino es el diálogo y la meta es el reencuentro”. Una fórmula que, a su juicio, “se tiene que materializar en un acuerdo político que tendrá que ser, lógicamente, refrendado por la sociedad catalana en una votación”.

Balones fuera con los indultos

Aunque no especifica de qué tipo de votación se trata, el inquilino de la Moncloa da alguna pista al indicar que el único marco en el que se puede dar este proceso “es el de la legalidad”.

Hablando precisamente de asuntos legales, Sánchez ha evitado pronunciarse explícitamente sobre unos hipotéticos indultos a los condenados por la sentencia del Procés, que podrían allanar la negociación con la Generalitat. Preguntado por este asunto, el jefe del Ejecutivo se ha limitado a recordar que “en la política penitenciaria las medidas de gracia están claramente definidas en nuestra jurisdicción y también en los actores jurisdiccionales”.

Gestión de la crisis

No obstante, también ha hecho un guiño hacia las decisiones tomadas a partir de la publicación del fallo del Tribunal Supremo al asegurar que “he percibido en algunos actores y sectores más una sed de venganza que un ánimo de justicia. Y eso va en contra del espíritu de la Constitución y también del espíritu de la propia legislación española”.

En relación con la gestión de la crisis del coronavirus, Sánchez ha admitido que el estado de alarma debió ser aprobado aunque “la sociedad española y muchas fuerzas políticas no lo hubieran entendido con un número de fallecidos inferior al que teníamos en la segunda semana de marzo”.

El PP "ha utilizado a los muertos"

Sobre esta cuestión, ha cargado duramente contra la derecha, en general, y el Partido Popular, en particular, a los que acusa de utilizar la epidemia y a los fallecidos en ella para “intentar derrocar al Gobierno”.

“Han utilizado los muertos en la contienda política y con ello han atacado a sus propios gobiernos autonómicos. Están dañando la imagen del país cuando remiten informes a la Comisión Europea cuestionando la calidad de nuestra democracia”, ha apuntado Sánchez, que también ha querido dar una imagen de unidad de su Gobierno pese a las abiertas discrepancias que han mostrado en varias ocasiones algunos de sus ministros.

Lealtad ministerial

“Yo percibo, en este momento tan crítico, una lealtad absoluta entre todos y cada uno de los miembros del Gobierno. Y también una alineación en cuanto a los objetivos”.

En ese sentido, y sobre las críticas del expresidente del Gobierno y exlíder socialista Felipe González, que llegó a decir que el Ejecutivo recuerda al camarote de los hermanos Marx, Sánchez sentencia: “las condiciones políticas y sociales de nuestro país son hoy muy distintas a las de hace cuarenta años”.