Los Mossos d'Esquadra, ante el Ateneu Llibertari de Sants en el marco de la operación Pandora / EFE

Los Mossos d'Esquadra, ante el Ateneu Llibertari de Sants en el marco de la "operación Pandora" / EFE

Política

‘Casals’ y ‘ateneus’ independentistas, en el punto de mira de los Mossos

La policía analiza con lupa esta red de centros libertarios repartidos por toda Cataluña, sin estructura jerárquica pero vinculados a la CUP y a los jóvenes de ERC

8 enero, 2017 23:52

Han sido objeto de espionaje por parte de los Mossos d’Esquadra y miembros del CNI español han intentando infiltrarse en ellos. Son los casals y ateneus, centros de reunión de jóvenes independentistas y anarquistas que en los últimos años han sido objeto de un pormenorizado seguimiento por parte de los cuerpos policiales.

De la labor de campo que realizan los cuerpos policiales dan fe las últimas detenciones practicadas por los Mossos d’Esquadra por la quema de fotos del Rey. Cinco personas fueron arrestadas tras un minucioso seguimiento de estos centros libertarios, que defienden su labor social en los barrios donde está asentados.

Aquí empezó todo

Para los miembros de estos colectivos todavía está muy reciente la operación Pandora de la Audiencia Nacional contra grupos subversivos, en la que se registraron el Ateneu Llibertari de Sants y la llamada Kasa de la Muntanya, un antiguo cuartel de la Guardia Civil que se ha convertido en uno de los referentes del movimiento okupa. Buena parte de la investigación quedó archivada.

Casals y ateneus, “aquí empezó todo”, aseguraba el exdiputado de la CUP, David Fernández, hace casi dos años durante un encuentro de estas entidades en Berga (Barcelona). En el acto, el antisistema valoraba la labor política, social y económica de estos centros.

¿Cómo funcionan?

Pero, ¿qué son y cómo funcionan esos casals y ateneus? Los casals no forman una red organizada, carecen de una estructura jerarquizada, aunque están muy vinculados a militantes liberados de la CUP y a la militancia joven de ERC.

No obstante, mantienen un estrecho contacto entre ellos que permite una movilización rápida cuando es necesario, apoyados en numerosas ocasiones por el movimiento okupa. Su capilaridad en el territorio es un excelente instrumento para compartir entre los movimientos juveniles valores como la independencia, la revolución o la desobediencia.

Según el portal casalsiateneus.cat, hay más de 150 centros de estas características repartidos por los “países catalanes”, lo que incluye Baleares y Comunidad Valenciana.

Asimismo, en Cataluña hay centenares de casas ocupadas por jóvenes vinculados a la CUP y a movimientos anarquistas, reconvertidas en Centres Sociales Actes. Destaca por su magnitud y por su repercusión mediática Can Vies, en el barrio de Sants de Barcelona. Cuenta con el apoyo de una larga serie de entidades, como la CGT, el Front d’Alliberament Gai de Catalunya, la Coordinadora de Associacions per la Llengua, el Col.lectiu de Joves Comunistes, el Centre Social de Sants i la Associació de Veïns de la Bordeta.

El 'caso Can Vies'

En Can Vies han participado diversos colectivos como La Burxa, Construint, Negres Tempestes, Colla Bastonera de Sants o Acció Llibertària de Sants, entre otros.

Otra Colla Bastonera, la de Gràcia, también fue objeto de investigación de los Mossos en 2013 cuando dos de sus miembros fueron procesados por enseñar fotos de presas acusadas de terrorismo. Ambos fueron absueltos por el Tribunal Supremo.