Ada Colau (i), alcaldesa de Barcelona, en un autobús público, medio de transporte que dejó de usar para ir al trabajo a los pocos meses de tomar el cargo / EFE

Ada Colau (i), alcaldesa de Barcelona, en un autobús público, medio de transporte que dejó de usar para ir al trabajo a los pocos meses de tomar el cargo / EFE

Política

El coche oficial de Colau irrumpe en el debate sobre contaminación

El monovolumen de la alcaldesa de Barcelona emite un 70% más de CO2 que la nueva regulación europea sobre emisiones, en vigor desde el 1 de enero

4 enero, 2020 00:01

El coche oficial de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, le resta argumentos en el debate sobre contaminación que mantiene con su homólogo en Madrid, José Luis Martínez-Almeida. El monovolumen que transporta a la primera edil emite un 70% más de CO2 que el límite establecido en la nueva regulación europea sobre emisiones, que ha entrado en vigor esta semana, concretamente el 1 de enero de 2020.

La munícipe de la capital catalana se mueve en un Seat Alhambra de siete plazas con una configuración muy superior a la de serie. El automóvil de gasolina, según figuran en los pliegos del concurso que avanzó El Nacional, presenta una potencia mínima de 210 cv y un consumo en trama urbana de 9,6 litros. "Es un auténtico tanque", describen fuentes conocedoras del modelo. Cualquiera que fueren las valoraciones objetivas, lo cierto es que el coche oficial de la alcaldesa contamina, y mucho. Excede la normativa más avanzada de emisiones de CO2 en vigor en al Unión Europea, la 631/2019 [consultar aquí]. Este texto obliga a los fabricantes a producir vehículo que emitan un máximo de 95 gramos de dióxido de carbono por kilómetro.

Circula por encima del límite UE

¿Cuánto contamina el coche oficial de Ada Colau? Fuentes municipales no han contestado a este medio sobre la potencia exacta y gramaje del monovolumen. No obstante, una comparación con los modelos en el mercado no deja a la alcaldesa en un buen lugar. El modelo más rocoso de gasolina de la gama Alhambra de Seat presenta una potencia máxima de 150 cv. El 1.4 TSI 110kW DSG SS Excellen Travel emite 161 gramos de dióxido de carbono por kilómetro, un 70% más que el límite europeo. Cabe recordar que el equipo de Colau pidió un vehículo aún más potente: uno con al menos 210 cv.

Imagen de un monovolumen similar al de la alcaldesa Ada Colau, que incumple los nuevos límites de emisiones de la UE / CG

Imagen de un monovolumen similar al de la alcaldesa Ada Colau, que incumple los nuevos límites de emisiones de la UE / CG

Con lo que respecta al consumo de gasolina, la también líder de Catalunya en Comú (CeC), marca autonómica de Barcelona en Comú (BComú) también incumple. En el pliego de condiciones de contratación del vehículo, concurso que ganó BBVA Renting, el gabinete de Colau pedía un consumo en ciudad de 9,6 litros, de 6,5 litros fuera del trazado urbano y un consumo mixto de 7,5 litros. ¿Qué dice la normativa comunitaria? Según Bruselas, el objetivo de emisiones de 95 gramos de CO2 por kilómetro es equivalente a 4,1 litros de gasolina por cada 100 kilómetros. Esta cifra significa que el coche oficial de Ada Colau dobla el consumo máximo de combustible que fija la Unión Europea (UE) para los nuevos modelos de automóvil.

Colau presumió de "reducir la contaminación"

El uso de un pesado monovolumen como coche oficial por parte de la alcaldesa Colau --sin contar los vehículos de sus dos escoltas, otros dos turismos-- no es óbice para que la munícipe desafiara esta semana al primer edil de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, a una sueret de competición para ver qué ciudad reduce más la polución. En un mensaje en su cuenta oficial de Twitter, la también exportavoz de la PAH indicó que "¿dice el alcalde de Madrid que quiere impulsar una Zona de Bajas Emisiones (ZBE) más ambiciosa que la de Barcelona? Esta es una competición que vale la pena: ¡a ver quén reduce más la contaminación". El post de la política catalana respondía así a Martínez-Almeida, que tildó la ZBE, el área anticontaminación de Barcelona, de "engañifa".

El intercambio entre ambos políticos se produjo pocas horas después de que entrara en vigor el veto a los vehículos contaminantes en la ciudad condal. La restricción afecta a los turismo de gasolina matriculados antes del año 2000 y a los diésel que tocaron la calle antes de 2000. El Ayuntamiento de Barcelona prevé con ello que hasta 50.000 coches viejos --el 20% de los que circulan diariamente por la zona-- dejen de circular por las calles de la capital catalana. Según las estimaciones municipales, ello redundará en menores índices de polución y en un recorte de las muertes anuales por esta causa.