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Los socios de investidura mueven al Govern a que explique su propuesta para regular la compra especulativa de viviendas. En el pleno del Parlament de este jueves, dos mociones de Esquerra y la CUP han sido aprobadas con el visto bueno de los Comuns y del propio PSC --partido en el Ejecutivo-- que fija para inicios de 2026 el pretendido anuncio.

Ambos textos contenían un único punto que insta a aclarar medidas "estratégicas, normativas y programáticas" para frenar la especulación inmobiliaria. Y el hecho de que los socialistas hayan votado a favor da razones para pensar que el equipo del president Salvador Illa hace suyo el encargo y que desvelará su receta en los próximos meses.

Fuentes próximas, no obstante, llaman a la cautela: "Paso a paso".

Que Illa 'se moje'

El dirigente catalán, precisamente, anunció hace un mes en la Cámara que su equipo estudiaba un informe que avalaba jurídicamente algunas fórmulas para restringir el enriquecimiento con la vivienda y así frenar el aumento de precios; también que había encomendado a la consellera de la materia, Sílvia Paneque, que encargara sus propios estudios.

Entre tanto, la formación morada ha entrado en el Parlament una proposición de ley que pretende prohibir la adquisición de un segundo inmueble en un mismo municipio si este recibe la consideración de zona tensionada, al tiempo que el Govern ha cedido a crear un equipo de trabajo con los de Jéssica Albiach para estudiar cómo prohibir la compra especulativa.

El president de la Generalitat, Salvador Illa, durante una sesión de control al Govern, en el Parlament, a 19 de noviembre de 2025 David Zorrakino / Europa Press

Y si bien este trabaja para emitir un informe en enero, los socios llamados a aprobar los primeros presupuestos de Illa quieren que este se moje y mueva ficha con un anuncio en firme, pero que pueda ser negociado. De hecho, los Comuns han elevado la prohibición de la especulación a "cuestión nuclear" para dar su apoyo a las cuentas, que siguen siquiera sin abordarse.

Rentabilidad y prohibición

El president, no obstante, rehúsa el verbo "prohibir" y prefiere hablar de intervenir el mercado para priorizar el uso residencial al económico, así como restringir la rentabilidad de los propietarios en las compraventas. Lo hizo este mismo miércoles, en la última sesión de control, al llamar a los especuladores a "hacer negocios en vivienda en otro sitio".

"¿Usted quiere ganar mucho dinero? ¿No tiene suficiente con una rentabilidad del 10%? ¿Quiere una del 15% o del 20? Vaya a otro lugar, la bolsa está subiendo mucho. No lo haga con la vivienda. Haga contribuciones y acepte una rentabilidad normal, pero no haga el agosto con ella", dijo Illa en una respuesta preparada para la pregunta del presidente parlamentario de su mismo espacio, Ferran Pedret.

"Estamos abiertos a todas las propuestas en este sentido", zanjó.

La consejera de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica, y portavoz del Govern, Sílvia Paneque, a su llegada a una rueda de prensa tras el Consell Executiu, en el Palau de la Generalitat, a 3 de junio de 2025 David Zorrakino / Europa Press

Los presupuestos, en stand-by

Los tiempos los están marcando, principalmente, los republicanos, quienes obligan a que el Ejecutivo catalán acuerde con la vicepresidenta primera del Gobierno, María Jesús Montero, el nuevo modelo de financiación singular, que la también ministra de Hacienda ha dicho que anunciará entre febrero y enero.

Tanto por la cuestión impositiva como por la habitacional, las negociaciones para los presupuestos catalanes no arrancarán formalmente hasta entrado el 2026.

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