El presidente de la Generalitat de Cataluña, Salvador Illa (c), posa a su llegada a la III Trobada del Govern, en Arnes, Tarragona
Gestión "al detalle", prevención de incendios y combate de la "radicalidad": las bases del segundo año del Govern
El 'president' Illa encarga a sus 'consellers' una ejecución pormenorizada de los planes dibujados durante los primeros 12 meses de legislatura
El socialista también receta moderación, gestión de masa forestal y lealtad institucional en el arranque del nuevo curso político
Más información: El Govern socialista comienza su segundo año con unas nuevas jornadas en Tarragona
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El president de la Generalitat, Salvador Illa, ha dibujado este viernes las líneas maestras que guiarán la acción de los consellers del Govern, en el pistoletazo de salida del segundo año de la legislatura. Entre estas, destacan la gestión "al detalle" de los distintos departamentos, un "cambio de paradigma" en la prevención de los incendios y la "moderación" para combatir la "radicalidad".
El Ejecutivo catalán ha arrancado su tercera jornada de trabajo fuera del Palau de la Generalitat, esta vez en Arnes, en el interior de Tarragona. Durante su intervención al inicio de la primera de las reuniones, el dirigente socialista ha hecho un alegato de la "buena política" y ha situado los próximos 12 meses en la "ejecución" de los planes confeccionados durante el primer año.
Gestión "al detalle"
"Hay que estar al detalle de cómo están las cosas para ejecutar los planes de cada departamento, porque elaborar un plan siempre es más sencillo que ejecutarlo", en palabras del president, que ha incidido en los esfuerzos de su equipo en materia de energía, infraestructuras, vivienda, movilidad, agua, derechos sociales y seguridad, entre otros, ha enumerado.
Ello, junto a la asunción de responsabilidades de las distintas administraciones en sus ámbitos de actuación, asimismo, permitirá combatir la "impotencia" que siente una parte de la población catalana frente a las administraciones, comprometiéndose también a seguir simplificando una "burocracia demasiado farragosa".
Los 'consellers' y el 'president' del Govern, en su jornada de trabajo en Arnes (Tarragona)
Apuesta por la moderación
Illa se ha dirigido a Albert Dalmau, Sílvia Paneque, Òscar Ordeig, Miquel Sàmper y el resto de la comitiva política para pedirles también que mantengan la "moderación" y "lealtad institucional" en un "clima muy tenso en lo político, con mucha radicalidad en las formas y en el lenguaje". "Estoy de acuerdo con ser radical en los valores, pero no en lo que no se puede ser, como las maneras, con incluso expresiones de insulto", en palabras de Illa.
"La moderación y el respeto demuestran valentía y el que está convencido de lo que defiende no tiene por qué gritar", ha rematado, en un contexto marcado por los ataques a Cataluña en su camino hacia la financiación singular y especialmente los discursos de odio de partidos y plataformas de extrema derecha en España; también la "vulneración de derechos religiosos y lingüísticos", acerca de la que ha expresado su preocupación.
Sobre ello, véase la caza del magrebí en Torre Pacheco o la prohibición de actos de tipo religioso en Jumilla, que han afectado a la comunidad islámica en Murcia este verano. "Todos tenemos deberes y derechos, vengamos de donde vengamos, tengamos el pensamiento político uno u otro o recemos lo que recemos", ha dicho el socialista.
Los 'consellers' Òscar Ordeig (Agricultura) y Jaume Duch (Acción Exterior) en los extremos, y el presidente Salvador Illa en el centro, en Arnes (Tarragona)
En otro orden de cosas, pero en una muestra más de su rechazo del ruido y en favor de la normalidad política, ha vuelto a reclamar al Tribunal Supremo la "aplicación efectiva" de la ley de amnistía, que sigue sin permitir a los líderes de Junts y ERC, Carles Puigdemont y Oriol Junqueras, su vuelta plena a la política.
Pacto de Estado contra los incendios
Los incendios han vuelto a marcar este verano, especialmente en el sur de Francia --con 16.000 hectáreas quemadas-- y en Galicia --96.000--, entre otras regiones al este de España.
Illa ha hecho referencia a ello para anunciar que trabajará por un "cambio de paradigma" para reforzar la cultura de la protección y de la prevención frente a los fuegos forestales, y por la gestión de los bosques, tal y como destaca de manera reiterada la comunidad científica.
El presidente de la Generalitat de Cataluña, Salvador Illa (c), llega a la III Trobada del Govern, en Arnes (Tarragona)
El president ha manifestado su apoyo al pacto de Estado contra el cambio climático que impulsa el Gobierno de Pedro Sánchez "con acierto", y se ha comprometido a acudir a la próxima Conferencia de Presidentes Autonómicos con "propuestas concretas y trabajadas".
Según el socialista, aunque desde las grandes ciudades se pueda pensar lo contrario, "el 65% de Cataluña es masa forestal, que no deja de crecer y se debe conseguir que decrezca". En este punto, ha asegurado que "la actividad económica no es un adversario, sino un aliado" para el territorio, ya que su atracción comporta una gestión necesaria del territorio.
Apoyo a la flotilla rumbo a Gaza
Illa ha incidido en el papel de las "estructuras de gobernanza europeas" y los "rápidos y profundos cambios" que se suceden a nivel internacional, especialmente tras la irrupción del nuevo orden económico a raíz de los aranceles del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. De ello se desprende que el Govern tampoco cesará este segundo año en sus esfuerzos por ayudar a la región a adaptarse al nuevo escenario, siempre de la mano de Europa.
También ha tenido palabras para el genocidio en Gaza, aplaudiendo el "gesto de solidaridad" de los participantes en la Global Sumud Flotilla, la expedición que zarpará del Puerto de Barcelona con la exalcaldesa Ada Colau y la activista Greta Thunberg este domingo para denunciar los ataques indiscriminados a civiles y a infraestructuras básicas, y echarle un pulso al presidente de Israel, Benjamin Netanyahu.
