La presentación del nuevo presidente del Puerto de Barcelona, José Alberto Carbonell, ha quedado empañada por la ejecución a tiros de un histórico estibador en Montgat hoy. La puesta de largo del máximo directivo de la Autoridad Portuaria ha quedado enturbiada por el asesinato premeditado del portuario. Tenga relación o no, Carbonell no ha aceptado preguntas en su comparecencia.
Ha ocurrido hoy en el World Trade Center (WTC) de Barcelona, donde el directivo ha recogido el testigo de Lluís Salvadó, presidente saliente. A la transición ha acudido Salvador Illa, presidente del Govern.
Precisamente, sobre la marcha del estrecho colaborador de Oriol Junqueras, Illa ha expresado que nunca es partidario de “tocar lo que funciona” y dentro de este planteamiento, el presidente ha justificado el cambio por “voluntad propia” de Salvadó.
La herencia de Lluís Salvadó
Más allá de la actividad económica, Salvador Illa ha resumido el mandato del presidente del Puerto saliente “en su tarea para abrir el equipamiento a la ciudad de Barcelona, con proyectos como la reordenación del Moll de Drassanes” y la celebración de la Copa América de vela.
Además de Illa, la representación del Govern ha ido a cargo de la portavoz y consellera de Territorio, Sílvia Paneque; así como el secretario de Movilidad e Infraestructuras, Manel Nadal. El acto también ha contado con la presencia del presidente de Puertos del Estado, Álvaro Rodríguez-Dapena, y representantes del ecosistema portuario de Barcelona.
Sobre el futuro del Puerto y el mandato que inicia José Alberto Carbonell, Illa cree que la prioridad pasa por impulsar “la prosperidad económica compartida y un crecimiento que no se concentre en un solo lugar”. Aterrizando en la agenda de temas que aparecerán en la mesa del nuevo presidente, la Generalitat celebra la próxima firma del convenio para desencallar el proyecto de los nuevos accesos viarios.
El eje Puerto, Zona Franca y aeropuerto de El Prat
Como conclusión y sin moverse del ámbito geográfico de la instalación, Salvador Illa plantea reforzar las sinergias y estrategias conjuntas para el eje Puerto de Barcelona, Zona Franca y el aeropuerto de El Prat.
En primer lugar, durante su turno de palabra, José Alberto Carbonell ha querido tener un recuerdo para todos los presidentes con los que ha trabajado desde su condición de director general del Puerto: Jordi Valls, Sixte Cambra, Mercè Conesa y Damià Calvet.
“Es momento de afrontar la transformación necesaria y significativa del Puerto de Barcelona”, ha expresado Carbonell. El nuevo dirigente, tras “agradecer” su designación a Illa y el resto del Govern, se ha propuesto dibujar una instalación “útil para el país y sus empresas”.
Trasfondo amargo: ejecución de un estibador
El acto, no obstante, se ha visto empañado por la ejecución a sangre fría de David Caballero, un histórico estibador del Puerto que abandonó la dársena una década atrás. Caballero ha sido asesinado en un bar de Montgat de disparos en la cabeza que le ha propinado una persona en motocicleta.
La División de Investigación Criminal (DIC) de los Mossos d'Esquadra ha asumido la investigación del caso, con un ajuste de cuentas como una de las primeras hipótesis de la muerte violenta.