La consellera de Interior y Seguridad Pública de la Generalitat, Núria Parlon, y el secretario general del departamento, Tomàs Carrión, se han reunido este miércoles con los mandos de Mossos d'Esquadra, a quienes se les ha instado a centrarse en la "pequeña delincuencia", prestando especial atención a los delitos con armas blancas, la okupación ilegal, así como en las agresiones sexuales.

A la reunión, que se ha celebrado en las instalaciones del Complejo Central de Egara, en Sabadell (Barcelona), han asistido, entre otros, el nuevo director general de la policía, Josep Lluís Trapero, el actual comisario jefe, Miquel Esquiusla número dos del cuerpo, Alicia Moriana, y los máximos responsables de todas las regiones policiales y las comisarías superiores y generales.

Durante la reunión se ha analizado la situación actual de los respectivos servicios de la policía catalana y se han repasado diferentes temas de actualidad: "Es fundamental identificar aquellos aspectos que funcionan bien y, sobre todo, aquellos que no, para poder hacer los cambios necesarios", ha expresado Parlon.

Barrios más seguros

En su intervención, la consellera ha afirmado que es "importante" que la policía se centre "en problemas como las armas blancas, las agresiones sexuales y la pequeña delincuencia que afecta al sentimiento de seguridad en los barrios". Asimismo, ha pedido "contundencia" en la lucha contra las okupaciones ilegales, "que generan conflictos en los barrios más vulnerables".



"No podemos permitir que otras okupaciones incrementen la conflictividad. Nuestra respuesta tiene que ser efectiva y ajustada a la realidad del territorio", ha indicado la exalcaldesa de Santa Coloma de Gramenet, según un comunicado de Interior. "No debemos tener miedo de decir lo que pensamos, porque solo así podremos avanzar hacia una sociedad más segura y justa", ha sentenciado la consellera.

"Graves problemas delincuenciales"

En la misma línea, el director general, Josep Lluís Trapero, ha insistido en que Cataluña es un "país seguro", pero ha reconocido "graves problemas" como la multirreincidencia, el crimen organizado, los delitos sexuales y las okupaciones, entre otros. "Nos debemos a los problemas que tiene la sociedad", ha indicado.

Trapero, que como uniformado comandó a los Mossos en dos etapas distintas y que ahora ejerce un cargo político, ha resaltado la importancia de que haya un "liderazgo firme" en los mandos de la policía catalana "alineado" con el encargo del nuevo Govern de "mejorar la seguridad y su percepción".

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