La crisis de ERC suma un nuevo capítulo: Junqueras quiere avanzar el congreso para evitar una candidatura alternativa

La crisis interna de Esquerra Republicana suma un nuevo capítulo. Varios miembros afines al líder moral del partido, Oriol Junqueras, reclaman adelantar el congreso que debe renovar la dirección. Se agarran a los estatutos de la formación, que fijan que, cuando el presidente dimite, se debe convocar en los tres meses siguientes. De este modo, se tendría que haber celebrado el 10 de septiembre. Esa fecha es inviable, ya que se requiere un mínimo de semanas para organizarlo.

La dirección de ERC había decidido realizar la votación el 30 de noviembre para evitar que coincidiese con una repetición electoral. Sin embargo, ahora que el nuevo Govern se ha constituido y ese escenario ha sido descartado, los seguidores de Junqueras recogen firmas para convocar un Consell Nacional extraordinario que modifique el calendario.

Según TV3, el político de Sant Vicenç dels Horts cuenta con los apoyos necesarios. Es decir, con un tercio de los consejeros nacionales.

La candidatura alternativa a Junqueras

Este movimiento ha cogido por sorpresa al sector que apuesta por renovar los liderazgos y del que forman parte la exvicepresidenta del Govern, Laura Vilagrà; la portavoz de los republicanos, Raquel Sans; y varios líderes territoriales. Si se adelanta el congreso, podrían truncarse sus planes de presentar una candidatura alternativa a la de Junqueras. Por ahora, no han trascendido los nombres.

Algunos cuadros del partido han acusado al expresidente de querer bloquear el debate interno que "permitiría confrontar las distintas candidaturas". Entre ellos, el exalcalde de Tarragona, Pau Ricomà: "Los valores republicanos y el cesarismo no son compatibles".

¿A qué se deben las prisas de Junqueras?

También ha cuestionado la premura de esta maniobra el exconseller de Comercio, Turismo y Consumo, Josep Huguet, quien considera que Junqueras se está "empequeñeciendo" como líder al no haber pactado una transición tranquila con Marta Rovira y al anunciar unilateralmente su candidatura en una carta dirigida a la población, en lugar de hacerlo primero ante los militantes y la dirección.

Los críticos también subrayan que la fecha de la votación fue aprobada cuando Junqueras aún no había dimitido como presidente de ERC, lo que, según ellos, resta legitimidad al uso de la "excepcionalidad" de los estatutos que ahora se invoca para justificar el adelanto.

Este conflicto interno amenaza con intensificar la división y podría tener consecuencias significativas para el futuro de Esquerra.