Tras seis años y cuatro meses, Marta Rovira vuelve a pisar Cataluña sin rendir cuentas por los altercados de Tsunami Democràtic ni la organización del referéndum del 1-O. A las 8:25 de este viernes, 12 de julio, la secretaria general de ERC ha cruzado la frontera española por La Jonquera después de que un error procesal haya derivado en el archivo de la causa por terrorismo.
En el municipio de Cantallops (Girona), la líder independentista ha animado a los decenas de independentistas que la han recibido a ella y al resto de procesados: el diputado de ERC en el Parlament Ruben Wagensberg, el vicepresidente de Òmnium, Oleguer Serra, el periodista de La Directa Jesús Rodríguez y el activista Josep Campmajó.
"Acabar lo empezado"
Entre gritos de "independencia", Rovira ha recurrido al mantra secesionista de rematar la faena. "Estamos aquí para acabar lo que comenzamos y dejamos a medias", ha dicho en referencia al procés, por el que se fugó a Suiza para evitar ser juzgada. Y ha dicho haber ganado en "resiliencia" y volver "más convencida que nunca del derecho a defender la autodeterminación".
También ha criticado haber sido procesada por terrorismo ("¿me ven cara a mí de terrorista?"). De hecho, no solo se ha beneficiado del archivo de Tsunami Democràtic, sino también de la amnistía. El juez instructor del Tribunal Supremo Pablo Llarena le ha aplicado la ley del Gobierno para perdonarle el delito de desobediencia por el 1-O y le ha levantado la orden de detención.
Reencuentro tenso con Junqueras
También ha prometido volver para "unir el movimiento independentista", a pesar de mantener un ferviente pulso con Oriol Junqueras por el control del partido y de pilotar las negociaciones con el PSC por la investidura de Salvador Illa, con Carles Puigdemont relegado a la oposición.
Precisamente, el hasta ahora presidente de ERC se ha abrazado con Rovira a su llegada. Ambos llevan tiempo inmersos en una batalla, especialmente desde que el pasado 12 de mayo, cuando ERC se hundió en las elecciones. Rovira considera que se debe dar paso a nuevos liderazgos, mientras que Junqueras tiene intención de repetir al frente de ERC.
Una batalla que se suma a la de los carteles de burla contra el alzhéimer de Pasqual Maragall para atacar a Ernest. La tensión entre junqueristas y roviristas ha ido in crescendo, hasta el punto de acusarse mutuamente de difundir "acusaciones falsas". Precisamente, este viernes el partido da a conocer las conclusiones de la investigación, en un encuentro en el que podrá estar presente Rovira.
Wagensberg vuelve tras seis meses
El diputado de ERC en el Parlament Ruben Wagensberg, que ha vuelto tras seis meses en Suiza, ha llamado "seguir luchando" para que se aplique la Ley de Amnistía a todos los encausados.
"Hay personas que aún están en el exilio por las que luchar", ha dicho en referencia a manifestantes e inhabilitados. "Hemos descubierto lo que es marcharnos de casa de manera forzada, llegar un país que no conoces y del que no puedes marcharte", ha relatado el republicano, que decidió huir hace medio año, cuando la investigación lo vinculó con Tsunami.
Serra y Campmajó
El vicepresidente de Òmnium Cultural, Oleguer Serra, ha celebrado su vuelta a Cataluña como "una victoria de país" y ha animado textualmente a seguir trabajando para defender el derecho de protesta y para conseguir la independencia.
Por su parte, el empresario y activista Josep Campmajó ha afirmado que "no se ha acabado nada" con su regreso de Suiza. Hay "más de 400 encausados que aún están pendientes" de que se les aplique la Ley de Amnistía o se archiven sus causas, ha dicho.