El alcalde de Girona, Lluc Salellas, se niega a poner una pantalla gigante para que sus vecinos vean el final de la Eurocopa, pese a que hay cuatro jugadores catalanes en la selección española. En respuesta a una petición de los socialistas, el antisistema se escuda en que, desde el Servei Municipal d'Esports, “no hay prevista” ninguna actividad como la que plantean.
“Al no haber implicada ninguna entidad de la ciudad, ni ninguna entidad de nuestro país, debido a que la selección nacional catalana está prohibida de manera expresa por el reino de España, gobernado por su propio partido”, expresan en el documento, al que ha tenido acceso Crónica Global.
Cuatro jugadores catalanes
De este modo, Salellas ha justificado su rechazo a que los gironins disfruten juntos de la final de la Eurocopa que tendrá lugar el domingo a partir de las 21 horas, tal y como pedía el concejal del PSC, Àngel Martínez. Fuentes del partido lamentan que el alcalde gobierne solo para sus votantes y se olvide de que, en Girona, hay también vecinos que quieren disfrutar de este tipo de eventos.
Más aún teniendo en cuenta que participan cuatro jugadores catalanes: David Raya, Dani Olmo, Lamine Yamal y Marc Cucurella.
Un protocolo
Martínez reclamó que, “ante eventos de esta magnitud, desarrolle un protocolo para ofrecer la posibilidad de disfrutar del deporte y de sus valores en pantallas en la ciudad”. “Este evento promete unir a la ciudad en un espíritu de comunidad y pasión por el futbol, ofreciendo a los ciudadanos la oportunidad de vivir la final en un ambiente festivo e inclusivo”, expresó.
Pero finalmente no será posible. Girona no contará con una pantalla para ver el futbol, como sí tendrán otras ciudades como Barcelona, Badalona, Castelldefels, Gavà o Terrassa, entre otras.