Ya es una realidad. Cataluña ha activado este miércoles la cuenta atrás hacia una repetición electoral en octubre. Solo se podrá evitar si PSC, ERC y Comuns encuentran la manera de pactar una mayoría progresista que permita la investidura de Salvador Illa. Al socialista le dan los números, pero está en manos de unos republicanos inmersos en una batalla interna por la estrategia a seguir en los próximos tiempos tras hundirse en los 20 escaños en las elecciones del pasado 12 de mayo.
El presidente del grupo parlamentario de Junts Albert Batet
El presidente del Parlament, Josep Rull, ha firmado un acto equivalente, un mecanismo similar a una investidura fallida que permite poner en marcha el reloj con el plazo dos meses que establece la normativa. Con la particularidad de que ningún candidato ha tenido que pronunciar su primer discurso a sabiendas que no tiene los apoyos para hacerse con la presidencia.
Si el 26 de agosto no hay president de la Generalitat, los catalanes volverán a ser citados a las urnas automáticamente el 13 de octubre.
Un paripé en el Parlament
Si en algo coinciden todos los diputados consultados por este medio es que lo vivido este miércoles en el Parlament ha sido un "paripé". Un pleno que solo ha servido para constatar varias cosas. En primer lugar, que el único que tiene posibilidades de ser elegido es el primer secretario del PSC con los votos de ERC y Comunes.
Intervención del candidato del PSC Salvador Illa
En segundo lugar, que Junts mantiene su ilusión de investir a Carles Puigdemont con la abstención de los socialistas, que ya lo han rechazado por activa y por pasiva. Y, no menos importante, que el único partido capaz de desbloquear la situación es Esquerra Republicana.
Sin prisa, pero sin pausa
Salvador Illa podría convertirse, en los próximos meses, en president de la Generalitat, pero necesita más tiempo. Así lo ha asegurado él mismo desde el atril del hemiciclo, en el que se ha comprometido una vez más a intentar su investidura para que haya un "gobierno estable" tras años de procés. La única forma posible es a través de un acuerdo "progresista", por lo que ha apelado al diálogo con Comuns Sumar y, especialmente, con Esquerra Republicana.
Todavía no cuenta con sus votos, pero ha asegurado que dedicará su tiempo a negociar: "Con convencimiento, sin prisas y sin pausas, dialogando", ha sentenciado, tras recordar que los ciudadanos no quieren volver a votar en octubre.
El discurso 'vendemotos' de Junts
Junts ha mantenido su discurso vendemotos. El presidente del grupo parlamentario, Albert Batet, ha insistido en que Carles Puigdemont tiene opciones de ser elegido, pese a que no cuenta con el necesario apoyo del PSC. En estos momentos, ni siquiera cuenta con los síes de sus exsocios republicanos. No es para menos: los neoconvergentes han luchado por apearles de la hegemonía independentista hasta hundirles en los 20 escaños.
Pese a que las posibilidades del fugado son nulas, Batet --conocido por ser uno de sus hombres fuertes--, se ha comprometido a "hacer todo lo posible" para no abocar a Cataluña a una repetición electoral. Y ha instado a los socialistas a repetir "el acuerdo de Bruselas", cuando PSOE y Junts llegaron a un entendimiento para investir a Pedro Sánchez a cambio de la ley de amnistía. Una norma de la que, por cierto, ya se está beneficiando una veintena de personas relacionadas con el proceso independentista.
El presidente del Parlament, Josep Rull
ERC habla de "falta de respeto"
Quien tiene en su mano evitar una repetición electoral es Esquerra Republicana. El presidente del grupo parlamentario, Josep Maria Jové, ha lamentado que este miércoles ninguna de las dos formaciones que se postulan a la presidencia de la Generalitat hayan llegado a ningún pacto para poder celebrar un pleno de investidura.
En este sentido, Jové ha descrito el escenario actual como “una falta de respeto” y una “irresponsabilidad” por parte del PSC y Junts, que “no han sido capaces” de llegar al pleno con los deberes hechos.
El presidente del grupo parlamentario de ERC Josep María Jové
Así, aunque desde ERC son conscientes de que ellos van a tener la llave de la gobernabilidad, Jové ha tirado balones fuera y ha exigido tanto al PSC como a Junts “la responsabilidad de postularse tantas veces como haga falta”. Y es que, para los de Marta Rovira, “abocarnos al 13 de octubre está solo en sus manos”.
El PP rechaza investir a Illa
Durante el turno del líder del PP, Alejandro Fernández ha negado de forma taxativa que su formación vaya a investir a Salvador Illa. Considera que los socialistas han "engañado" a los catalanes al prometer que querían abrir una nueva etapa y cerrar la del procés. "Pero eso solo le sirve para la campaña, al día siguiente se olvidan y siguen alimentando el procés".
El líder del PP, Alejandro Fernández, en el Parlament
El popular --que se ha estrenado en su discurso desde fuera del grupo mixto al haber logrado un gran resultado de 15 escaños el 12M-- ha sentenciado que “solo apoyarán al PSC si le quitan el apoyo al independentismo”. Haciendo referencia no solo a los posibles pactos y alianzas en el Parlament, sino también en el Congreso de los Diputados.
Los Comunes piden apartar las diferencias
En cambio, sí ha dado su visto bueno a Illa la líder de Comuns Sumar, Jéssica Albiach. Ha asegurado que solo hay dos opciones, "aunque algunos estén intentando marear o no les guste la realidad" --en referencia a Junts--. Esas son, la de un acuerdo entre ERC, PSC y Comunes o la de repetición electoral. A ellos les ha instado a negociar pese a las diferencias.
La líder de Comuns Sumar Jessica Albiach en el Parlament
Con todo, que haya o no elecciones en octubre dependerá de que Oriol Junqueras y Marta Rovira zanjen también su guerra abierta y decidan si prefieren un Govern de la mano de Salvador Illa o una repetición electoral en la que el fugado volverá a poner toda la carne en el asador para fagocitarles hasta el límite de que puedan verse superados por el PP.