El exconcejal de Barcelona Ernest Maragall ha supeditado el apoyo de Esquerra Republicana (ERC) a una eventual investidura de Salvador Illa, del Partit dels Socialistes (PSC), al debate sobre la entrada del partido en el Gobierno de Barcelona. Y le ha puesto precio: "Hablemos de democracia, de referéndum"
Mientras el también exconseller mezcla ambas carpetas, los republicanos, dirigidos por la secretaria general Marta Rovira desde Suiza, priorizan para la Generalitat la opción independentista que ofrece Carles Puigdemont (Junts), a pesar del evidente riesgo de repetición electoral que supone porque los números no dan.
La investidura de Illa se juega en Barcelona
El apoyo de ERC a Salvador Illa se juega en Barcelona, después de que el grupo municipal haya llamado a la militancia a validar su acuerdo con el PSC para entrar al Gobierno del alcalde Jaume Collboni. No obstante, la votación ha generado tal interés que el partido la ha aplazado por la asistencia masiva de militantes, superior a la capacidad del espacio.
Maragall interpreta el mensaje de las bases como un "este no es el momento" y llama a determinar "la contraprestación básica" que haría al partido "tomar una decisión hacia un lado o hacia otro", ha dicho en La2 de RTVE este viernes. Es en este contexto que ha abogado por "hablar de democracia, de referéndum". "Illa lleva ocho años hablando de diálogo, pero ¿cuál es su aportación?", ha señalado el exconcejal, acusando al primer secretario de los socialistas catalanes de "abusar del concepto sin darle contenido".
Asimismo, ha defendido negociar directamente con el primer secretario del PSOE, Pedro Sánchez, la investidura de Illa por ser el "interlocutor válido", queriendo apartar así al líder de los socialistas catalanes.
Maragall hubiese votado 'no' en Barcelona
Maragall ha asegurado que hubiese votado en contra del pacto, elaborado en febrero e interrumpido por la convocatoria de elecciones anticipadas al Parlament, según ha dicho. "Espero que sometamos la cuestión a un debate abierto", ha agregado, aseverando que podría cambiar su posición en función de lo que los socialistas ofrezcan a cambio.
"¿Qué precio debería fijar ERC para compensar el hecho de dar apoyo y estabilidad a los que nos confiscaron la gobernación de Barcelona tanto en 2019 como en 2023?", se ha preguntado, recordando que el apoyo a la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno "ha tenido una contraprestación, la amnistía y la perspectiva de seguir negociando". Para acabar, el también exconseller ha defendido "dejar madurar" un debate que "aún no está agotado" y ha evitado poner fechas a la votación en su segundo intento.