Los mandatarios secesionistas tienen prisa en que se imponga la amnistía para los condenados, encausados e investigados por los delitos cometidos en el procés de Cataluña. Así se lo ha hecho saber este viernes el presidente de la Generalitat en funciones, Pere Aragonès, al ministro de Justicia, Félix Bolaños, durante una llamada telefónica, en la cual ambos se han felicitado por la aprobación de la ley de impunidad.
El mandatario de ERC ha instado al dirigente del PSOE a que la amnistía del golpe secesionista se aplique "con la máxima celeridad y objetividad", a pesar del amplio rechazo que genera en la sociedad y en el ámbito político y jurídico.
Lo consideran un "hito"
Fuentes del Govern catalán han explicado que ambos "han coincidido en celebrar este hito y reconocer el buen trabajo hecho por todas las partes, así como la importancia de su aplicación en los términos aprobados".
En la misma conversación, Aragonès ha explicado a Bolaños las actuaciones que el Govern en funciones aprobó el martes para aplicar la nueva ley "de manera urgente" en los procedimientos administrativos y judiciales abiertos.
El pasado martes, la ejecutiva del Govern secesionista decidió dictar una resolución para amnistiar hechos sancionados a través de la Ley de Seguridad ciudadana vinculados únicamente al proceso ultranacionalista catalán.
Aragonès y Bolaños también se han emplazado "a mantener la interlocución constante para hacer el seguimiento de su aplicación", según han añadido fuentes del Govern.
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