ERC ‘aparca’ al último gran directivo convergente de la sanidad catalana

ERC ha aparcado al gran último directivo convergente de la sanidad catalana. Los republicanos han encontrado un discreto acomodo por petición propia a Miquel Carreras, exgerente de la Consejería de Salud en Girona. Pero, al hacerlo, han convertido el consejo del segundo hospital provincial en un ente dominado por Junts, sus rivales. 

Lo anunció el IAS la pasada semana [ver comunicado aquí] en una nota muy neutra. En la misma, se anunciaba el fichaje de Carreras como miembro del consejo del Instituto de Asistencia Sanitaria (IAS), el segundo hospital de Girona, en sustitución de Magda Casamitjana. 

"Lo pidió él"

Fuentes internas no oficiales del CatSalut han explicado los detalles del movimiento. "Carreras fue gerente de Salud en Girona de 2016 a 2024, hasta que le sustituyó Jaume Heredia --como avanzó este medio--. No quería jubilarse el todo, por lo que se le buscó un acomodo. Y se eligió el IAS, en el que él mismo había pedido ir". 

Es así porque Carreras fue director asistencial del gran hospital (2006 a 2013) y luego, gerente (2013-2016). "Quería volver allí para culminar su carrera. Pues bien, ya lo tiene". 

Un consejo controlado por Junts: 7 de 9

Pero es que, querido o no, la designación tiene una derivada: altos mandos afines a Junts, cuando no directamente expolíticos convergentes, pasan a controlar el órgano de gobierno del hospital. Lo detallan fuentes del sector, que lamentan que "siete de los nueve miembros mandaron como gerentes de confianza cuando gobernó CiU, o tienen vínculos directos o personales". 

Son el propio Carreras; el presidente, Martí Masferrer, también expresidente de la Unió Catalana d'Hospitals --que esta semana se reunió con Carles Puigdemont en Francia-- y exgerente de la Fundació Puigvert; Álex Gimbernat, exdirectivo de Caixa Girona cuando la presidía Arcadi Calzada, exdiputado de CiU; la médico Teresa Lapiedra, que apoyó al expresident Artur Mas con CiU en 2011; Lluís Pla, excandidato de Junts en Girona en las municipales de 2023 y el exconcejal de CiU en Castell-Platja d'Aro Josep Maria Soler. 

Y Carme Vilardell, esposa de Ángel Rodríguez Molar, exalcalde de Cervià de Ter con CiU en los años 2000. 

"No se explica: son rivales de ERC"

Una fuente del sector ha lamentado que "no se entienda la decisión de recolocar a Miquel Carreras en el IAS y reforzar el carácter político del consejo de administración: es que siete de los nueve miembros son cercanos a los neoconvergentes, rivales de ERC". 

Otra voz, una directiva, ha recordado que el penúltimo cambio, el nombramiento de Martí Masferrer en la presidencia, "tiene sentido porque la nueva gerente, Àngels Morales, viene de la Fundació Salud Empordà". 

Quim Casanovas, el gran 'jefe' de Girona, fuera

Eso sí, este último desliz de ERC viene precedido de cambios en los consejos de administración de la sanidad concertada para despolitizarla. Como avanzó Crónica Global, los de más calado fueron los relevos de Quim Casanovas como gerente del IAS; y de Ramon Cunillera como gerente del Consorci Sanitari del Maresme (CSdM). 

"El hombre verdaderamente importante era Casanovas, que era el gran gestor de CiU en la sanidad catalana en Girona. Una vez lo apartas --preside los consejos rectores de los consorcios del Maresme y la Selva, sin poderes ejecutivos--, todo cambia", ha explicado una alto mando del sector. 

Los gerentes: contrapoder

Todos los movimientos al frente de la sanidad concertada se explican por el gran poder que tienen estos gestores. Algunas fuentes se quejan de que "mandan casi tanto como el conseller de Salud", pues son los que, a la postre, reparten los presupuestos. De hecho, se considera que la capa gerencial de los hospitales adscritos a la red Siscat, la concertada, son un "contrapoder" a la Consejería. 

Y, hasta ahora, eran una capa muy impermeable a los partidos de izquierda que han regido el Departamento: PSC y ERC. El último año y medio, los republicanos han podido hacer algunos relevos para despolitizar la sanidad, pero no ha tenido tiempo: las elecciones anticipadas en Cataluña han truncado la transición hacia una gestión más aséptica.