Ya dimitió en octubre de 2015 como líder de Podemos en Cataluña y se niega a volver a hacerlo ahora que es consejera de Justicia del Govern republicano de ERC. Gemma Ubasart se resiste a dejar el cargo o a ofrecer la cabeza de alguno de sus responsables por la crisis de seguridad en las prisiones, que se cobró la vida de una cocinera en la cárcel de Mas d'Enric, una situación sin precedentes en el conjunto de España.

La consellera de Justicia, Derechos y Memoria de la Generalitat ha advertido a los funcionarios de prisiones de que "no se puede volver a repetir" el bloqueo en cárceles catalanas por las protestas, que está previsto que se retomen a partir del lunes. En rueda de prensa este domingo, Ubasart ha añadido que su departamento trabaja de forma coordinada, especialmente con la Consejería de Interior, para que la rutina penitenciaria no se vea alterada, ya que "la situación de ayer y anteayer" impidió que presos salieran de sus celdas y también que pudieran ver a familiares.

Sin recursos ni autoridad

La responsable de la Generalitat ha pedido compaginar el derecho a la protesta con el funcionamiento cotidiano de las cárceles, un servicio que ha definido como esencial, muy delicado y una responsabilidad del Govern. Lo ha dicho tras las manifestaciones de esta semana y las previstas para el lunes por los sindicatos, que han bloqueado accesos a algunas cárceles tras el asesinato de una cocinera del centro Mas d'Enric en Tarragona presuntamente a manos de un interno que se suicidó el miércoles.

Los funcionarios de prisiones llevan años avisando del peligroso cóctel de combinar una falta de trabajadores con erosionar su autoridad en nombre de los derechos de los reclusos, una situación que ha llevado los centros al límite con repetidas agresiones que han dejado heridos y, finalmente, se han cobrado una vida. A pesar de ello, Ubasart ha calificado el suceso de excepcional y ha instado una vez más a "garantizar la normalidad en los centros y la seguridad de internos".

Protesta de los funcionarios de prisiones ante Mas d'Enric Cedida

Nadie quiere dimitir

También ha repetido que su departamento está dispuesto a hablar con los sindicatos que han encabezado las protestas: "Reitero esa mano tendida hacia las organizaciones sindicales. Es necesario que hablemos para reconducir la situación". Al ser preguntada sobre el aumento en la plantilla de funcionarios, Ubasart ha respondido que el Ejecutivo ha aprobado recientemente 407 plazas pero que el proceso "ha quedado detenido" con el caso de Mas d'Enric.

Hasta el momento, se resisten a dimitir tanto Ubasart como su número dos, el secretario de Medidas Penales, Amand Calderó, y hasta el director del centro de Quatre Camins en la Roca del Vallès (Barcelona), Domingo Estepa. Calderó lo ha defendido como "un excelente profesional valorado por la plantilla". Una percepción muy distinta a la expresada por la propia plantilla, pues fuentes sindicales acusan a este responsable de insultos y amenazas a los funcionarios desde que empezaron las protestas, por lo que piden su cese.

Aragonès, "desaparecido"

Por su parte, el portavoz de los Comuns en el Parlament, David Cid, ha instado este domingo a los sindicatos de prisiones a reunirse y negociar con Ubasart para "recuperar cierta normalidad" en el funcionamiento de las cárceles catalanas. En declaraciones en Cornellà de Llobregat (Barcelona), les ha pedido que "acepten la mano tendida" de Ubasart, tras las protestas por el asesinato presuntamente a manos de un interno que se suicidó el miércoles.

El diputado morado ha acusado al presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, de estar "absolutamente desaparecido" con la situación de las cárceles en Catalunya. "Es una muestra más de la falta de liderazgo y de la falta de rumbo del Govern de ERC", ha criticado.

"Vergüenza"

Los sindicatos de prisiones han interpretado las palabras de la consellera de Justicia como una "amenaza" y una "vergüenza". Aunque las prisiones catalanas viven hoy una jornada de normalidad después de que anoche los funcionarios acordaran levantar el bloqueo a los accesos a tres centros penitenciarios que permanecían todavía cerrados, los sindicatos prevén nuevas movilizaciones generalizadas para mañana.

UGTpressons, sindicato mayoritario, ha valorado la comparecencia de la consellera como una "amenaza". "Básicamente, nos ha amenazado. Nos tomamos la comparecencia como una amenaza, y de esta manera no vamos bien", ha afirmado a Efe su portavoz, Xavi Martínez. Por su parte, el coordinador de CSIF, Alberto Gómez, en declaraciones a la misma agencia, ha calificado las palabras de la consellera de "vergüenza".

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