Pere Aragonès tiene los días contados para conseguir los apoyos de los comunes a los presupuestos de la Generalitat, la ley más importante de la legislatura que deberá votarse esta misma semana en el pleno del Parlament. Por ahora, el president solo cuenta con los votos favorables del PSC, si bien la vicepresidenta Laura Vilagrà se ha mostrado convencida que habrá acuerdo con los de Jéssica Albiach, que siguen enrocados en el no por el Hard Rock.
"Tenemos que encontrar la solución, y evidentemente la encontraremos. Estoy convencida de que los comunes, su electorado, es lo que espera de ellos", ha expresado en una entrevista en la Cadena Ser de Cataluña.
Cabe recordar que los presupuestos no solo son importantes para dar respuesta a los desafíos que tiene el territorio, como la sequía o el sistema educativo. También son el balón de oxígeno que necesita Aragonès para agotar el mandato y no propiciar un adelanto electoral.
Albiach rechaza las presiones
En la misma línea se ha expresado el viceconsejero de Estrategia y Comunicación, Sergi Sabrià, quien ha instado a los comunes a "recapacitar" sobre su negativa a apoyar las cuentas. Unas presiones que el domingo rechazó la líder de En Comú Podem, quien volvió a reiterar su oposición a un macrocasino que, a su parecer, solo trae problemas de delincuencia y salud mental.
Además, advirtió al Govern de que "los presupuestos de Cataluña se deciden en Cataluña", para pedir así que no se mezclen con la negociación de las cuentas estatales.
Siguen las reuniones
Pese a que el panorama está complicado para los republicanos, Sabrià es "optimista" y espera que los comunes cambien de opinión en las 48 horas que quedan hasta la votación en el Parlament. De no hacerlo, se estarían equivocando, ha advertido. "No hay nada en este presupuesto que tenga que ver con el Hard Rock", ha recalcado uno de los miembros principales de la guardia pretoriana de Aragonès.
Esta mañana, negociadores del Govern y de los comunes vuelven a reunirse para intentar encontrar un punto de entendimiento, que según Sabrià no puede pasar por vetar el proyecto de Vila-seca, porque este proyecto depende "de un proceso administrativo". "Si piden una cosa que no se puede hacer, no se puede hacer. Por lo tanto, es muy difícil de resolver. Miraremos hasta dónde podemos llegar y hasta dónde podemos entendernos", ha reconocido.
Un intercambio de cromos
Sabrià ha evitado amenazar a Albiach con un veto de ERC a los Presupuestos Generales del Estado, porque "no va especialmente bien a nadie ligar unos presupuestos con otros", pero ha dejado entrever que no se entendería que el Gobierno de PSOE y Sumar reclamase el apoyo de los republicanos si las cuentas catalanas fracasan.
"Se hace muy extraño entender que no haya presupuestos en Cataluña y que después esperen que haya presupuestos en el Estado", ha dicho el viceconseller, que cree que ambos proyectos deben negociarse "de manera individual", pero hay que llegar a un acuerdo "en todos ellos".
Enmienda a la totalidad
Por otro lado, el grupo de Junts ha presentado una enmienda a la totalidad al proyecto de presupuestos en el último día en que se podía registrar en la Cámara autonómica.
Según han explicado fuentes parlamentarias a Europa Press después de que la semana pasada ya enmendaran a la totalidad a la ley de acompañamiento. Además de los neoconvergentes, han presentado enmienda a la totalidad a las cuentas los comunes, CUP, Vox, Ciudadanos y PP.