Cataluña entrará en fase de emergencia por la sequía el próximo 1 de febrero, cuando está previsto que los embalses de las cuencas internas del sistema Ter-Llobregat se encuentren al 16% de su capacidad. Ahora mismo se encuentran al 16,7%.
Lo ha anunciado este martes el conseller de Acción Climática, David Mascort, en la rueda de prensa posterior a la reunión semanal del Consell Executiu, donde ha detallado cómo serán las restricciones sobre los gimnasios y centros deportivos, un asunto que preocupaba desde hace meses al sector del deporte.
No se cierran las duchas (por ahora)
En un principio se habló de prohibir el llenado de piscinas o incluso cerrar las duchas en los centros deportivos y gimnasios. Pero parece que el Govern ha escuchado las demandas del sector y finalmente no será así.
La emergencia por sequía constará de tres fases. En la primera, los centros que dispongan de piscina y pretendan llenarla tendrán que compensar el agua gastada. Podrán hacerlo cerrando algunas duchas o reduciendo el uso de agua en las instalaciones de otra forma. Por lo que en una primera etapa, cerrar las duchas no será una medida obligatoria. Los clubs que necesitan regar el césped o la tierra batida deben actuar de forma similar.
En caso de entrar en la segunda fase --en abril, si no mejora la situación-- sí será obligatorio que los centros deportivos que quieran llenar piscinas cierren sus duchas. Los gimnasios sin piscinas podrán mantener las duchas abiertas. En el peor de los casos, si se activa la fase tres, todos los centros deberán cerrar las duchas.
Las restricciones en emergencia
Las restricciones sobre duchas y el riego de clubs deportivos son solo algunas de las muchas medidas que se activarán. Las nuevas restricciones amparadas por la fase de emergencia pesarán sobre 5,9 millones de vecinos de los 202 municipios abastecidos por las cuencas internas. No podrán gastar más de 200 litros por día, incluyendo actividades económicas y comerciales. Asimismo, solo estará permitido lavar el coche en negocios de este tipo. No se podrá limpiar las calles ni mobiliario urbano con agua potable.
También estará prohibido llenar total o parcialmente cualquier tipo de piscina --excepto los centros deportivos-- y fuentes ornamentales, así como regar jardines y zonas verdes, ya sea públicos o privados; solo podrá utilizarse aquella que no proceda de la red municipal de agua potable para riego "cuando se justifique en la supervivencia del arbolado singular o monumental" del espacio público.
Se duplican las ayudas para hacer frente a la sequía
El Govern también ha anunciado que se duplicarán las ayudas de la Generalitat dirigidas a las entidades locales para la realización de inversiones de recuperación, rehabilitación, adecuación y ejecución de captaciones de aguas subterráneas para el abastecimiento.
Según ha detallado Mascort, se pasará de los 90 millones de euros inicialmente presupuestados a los 200 millones. La Agencia Catalana del Agua (ACA) ha recibido un alud de solicitudes de más de 700 ayuntamientos y entidades locales.