El alcoholismo deja de ser prioritario en la atención primaria catalana

Se ha demostrado que este tipo de cribados son clave para poder realizar un diagnóstico precoz y minimizar los daños ocasionados por el alcohol, además de reducir el consumo entre la población. No obstante, en los últimos años, esta actividad ha ido a la baja. Cada vez se hacen menos.

Disminuyen los cribados en los ambulatorios

El porcentaje de población adulta con cribado de alcohol en 2017 era de un 75,5%. Por aquel entonces, no sólo funcionaba bien, sino que además iba en aumento. Pero a partir de 2018 empezó a disminuir de forma progresiva hasta situarse en un 30,2% en 2021. Es decir, en cuestión de cuatro años se ha reducido más de la mitad.

Son datos que figuran en un informe sobre salud pública de la Central de Resultados de la conselleria de Salud, que recopila numerosos indicadores del sistema sanitario. Aunque las cifras apuntan a que en 2022 se produjo un cambio de tendencia -al alza-, los resultados siguen estando muy lejos de los de 2017.

Un centro de atención primaria EUROPA PRESS

Las causas

"Es difícil realizar hipótesis sobre las causas del descenso de una actividad que hasta 2017 funcionaba con buenos resultados y que es, además, uno de los pilares de la atención primaria", aseguran los expertos. En este sentido, explican que podrían influir factores organizativos como la focalización en la atención a la enfermedad, la saturación de los sistemas de registro o la pérdida de la atención longitudinalidad, entre otros. 

"Pero todo son hipótesis", recuerdan. Además, creen que sería importante valorar el impacto que puede tener el aumento de las consultas telemáticas, ya que el cribado se basa en una búsqueda oportunista durante la consulta a personas que van a visitarse por cualquier otro motivo.

Ventajas del cribado de consumo

Fuentes de la atención primaria catalana lamentan que esta actividad se realice cada vez menos en los ambulatorios. Explican que una de sus principales ventajas es que, en pocos minutos, el cribado permite identificar a las personas con un consumo de riesgo o perjudicial "para después ofrecer una serie de consejos o derivar al paciente a un manejo clínico más intensivo".

Relacionado con más de 200 problemas de salud, el consumo de alcohol es una de las primeras causas prevenibles de morbilidad y mortalidad en España. La Organización Mundial de la Salud (OMS) clasifica el alcohol como un agente cancerígeno en la misma clasificación que el tabaco o el amianto.

Una persona con adicción al alcohol / PIXABAY

Demanda de tratamientos

Desde hace años, la demanda de tratamiento por alcohol en Cataluña representa casi la mitad del total de peticiones de deshabituación. En 2022 se iniciaron un total de 6.306 tratamientos, la mayor cifra desde el 2016 y cerca del récord registrado en el 2010. 

De las 63.918 muertes ocurridas en Cataluña en 2019 -año sin afectación aún de la pandemia de la Covid-, 2.706 fueron atribuibles al alcohol, lo que significa el 4,23 % del total de fallecimientos. De hecho, en la comunidad autónoma catalana se registra un consumo de alcohol que se sitúa por encima de la media europea, con una ingesta de 11 litros de alcohol puro por habitante mayor de 15 años de forma anual.