Sigue el tira y afloja entre ERC y Junts. La secretaria general de los republicanos, Marta Rovira, ha recriminado a sus exsocios de Govern que estén retrasando la investidura de Pedro Sánchez para beneficiar a miembros concretos de la formación, entre los que se encuentran Josep Lluís Alay y Laura Borràs, a quienes quieren incluir en la ley de amnistía. "No va de personas", ha manifestado Rovira, que insiste en redactar un texto que pase los filtros del Tribunal Constitucional.
Así lo ha dicho el día que el expresident de la Generalitat fugado, Carles Puigdemont, refuerza las conversaciones con el PSOE en Bruselas para encauzar el acuerdo que permita la reelección del socialista como presidente del Gobierno.
"Satisfecha" por el acuerdo ERC-PSOE
En una entrevista en Cafè d'idees de Ràdio 4 La 2, la republicana espera que Junts llegue a un acuerdo más pronto que tarde y ha criticado la desunión del independentismo durante las negociaciones para la gobernabilidad de España. En este sentido, considera que hubiese sido más "oportuno" que hubiese coordinación entre ERC y Junts para utilizar sus 14 votos.
"No nos hemos podido coordinar con Junts, pero sí con muchos represaliados y juristas y con parte de la sociedad civil que es víctima de esta represión", ha expresado Rovira, que se ha mostrado "satisfecha" por lo que su partido ha podido aportar y por el pacto al que ha llegado con el PSOE en la ley de amnistía, la condonación de la deuda y el traspaso de Rodalies.
Asimismo, ha destacado que ERC estudiará a fondo los cambios que añada Junts en la ley de amnistía para "garantizar que no es ambigua y que tiene seguridad jurídica". Y desea que esta sea la última vez que el independentismo negocia por separado con el Gobierno, por lo que ha insistido en que, después de la investidura de Pedro Sánchez, seguirá trabajando para recuperar esa unión que les llevó a ser socios del gobierno de la Generalitat.