Dos alumnos levantan la mano en un aula

Dos alumnos levantan la mano en un aula EUROPA PRESS

Política

Los bandazos del Govern ante los docentes que luchan contra el acoso escolar

La comunidad educativa ve con buenos ojos que se implemente la figura del coordinador 'antibullying', pero lamentan que la 'conselleria' de Educación de la Generalitat no aumente el número de horas, para lo cual se necesitan recursos al conllevar una sobrecarga de trabajo

27 octubre, 2023 23:30

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Si por algo se ha caracterizado la conselleria de Educación de la Generalitat de Cataluña es por ser una de las más criticadas de los últimos años. Sobre todo durante el mandato del conseller Josep Gonzàlez-Cambray. Aunque su sucesora, Anna Simó, también arrastra algunas polémicas. La última está relacionada con los llamados coordinadores de coeducación, convivencia y bienestar (Cocobe). Una figura creada para los colegios e institutos y que resulta clave para luchar contra el acoso escolar.

La consejera de Educación, Anna Simó

La consejera de Educación, Anna Simó EUROPA PRESS

La primera noticia al respecto se produjo en mayo de este año, cuando Cambray anunció la creación de este referente en cada centro con el fin de velar por que el proyecto educativo y las programaciones de las áreas y materias incorporen el bienestar emocional, de coeducación y perspectiva de género, de ciudadanía democrática y de conciencia global. 

La consejería recula

Pero el pasado octubre, cuando las direcciones se habían organizado y designado a dedo a quienes debían ejercer esta función, la 'conselleria' reculó. Según dijo, sólo podrían hacerlo aquellos que ya fueran coordinadores o tutores de ESO. De ser otro docente, no cobraría por ello. El último viraje ha ocurrido esta semana, cuando la Consejería de Educación ha encontrado 3,9 millones y se ha abierto a que pueda ejercer de Cocobe  quien la dirección considere.

Una alumna con varios libros de texto

Una alumna con varios libros de texto EUROPA PRESS

Si bien es una buena noticia que se destinen recursos a esta figura esencial para preservar el buen clima en las aulas, los sindicatos avisan de que está "abocada al fracaso" si no se aumenta el número de horas. "Lo que no se puede hacer es nombrar a una persona que no tendrá horas suficientes para hacer esta función, que comporta una burocracia brutal” y una sobrecarga más de trabajo, advierte Jesús Martín de UGT.

"Tenemos un límite"

Según explica, este coordinador tiene "una responsabilidad muy elevada" para luchar contra problemas como el bullying ya que, "además de entrevistas a la víctima, al agresor y a las familias, debe redactar informes, derivarlo a la dirección y coordinarse con el resto del profesorado". Unas tareas que no son fáciles si se deben compaginar con otras. En este sentido, considera que el Cocobe debería poder destinar un tercio, media o una jornada entera a llevar a cabo estas funciones, dependiendo también del número de alumnos por aula y de si la escuela es de alta o máxima complejidad, donde la situación es todavía "más difícil".  

Por eso, califica de “propaganda” esta medida que, si bien es un avance para luchar contra esta lacra, supone una desmotivación más para unos docentes a quienes ya no les vale con la vocación. “Tenemos un límite”, agrega. Una muestra de ello es la falta de profesorado en las bolsas de trabajo: “Nadie quiere ser profesor”, pues se precisa un máster obligatorio que implica tiempo y dinero, un título de catalán y unas condiciones laborales “muy malas”.

Un terrible testimonio

La realidad demuestra que esta figura que lucha, entre otras cosas, contra el bullying es más necesaria que nunca. La prueba está en que, esta misma semana, se ha dado a conocer el terrible testimonio de un chico de 15 años con autismo que reconoce haber sufrido acoso escolar. En una conferencia organizada por la Asociación Trastorno Espectro Autista Terres de l’Ebre (ATEATE) en Tortosa el 21 de octubre, el menor pidió la palabra para compartir lo que lleva sufriendo desde hace tiempo en su colegio. Explicó el abandono que siente por parte del profesorado y el instituto en general, y sus ideas suicidas.

Ante este caso, la Federación Catalana de Autismo se ha echado las manos a la cabeza y exige a la conselleria de Educación que “implemente acciones efectivas de prevención de este tipo de hechos”. Piden “formación previa y continuada del profesorado y profesionales del centro, así como sensibilización entre el alumnado, y garantizar una educación que contemple la diversidad y sea segura para todos”.

“Este chico, que tuvo la valentía de explicar su caso ante tantas personas, necesita ayuda urgente”, expresa la entidad en un comunicado. Pero no es un caso aislado, ya que otros menores que atraviesan la misma situación se mantienen en el anonimato. Por eso, las voces consultadas por este medio avisan de la importancia de “no improvisar” y de destinar recursos para que todos los niños tengan "la atención individualizada que merecen".