El cara a cara entre el excomisario José Manuel Villarejo y el expresidente de la Generalitat Artur Mas ha dejado algunos titulares coincidiendo con el sexto aniversario del referéndum ilegal del 1-O.
Estos son algunos de los hits que ha lanzado en El Món a Rac1 este lunes en una conversación tensa entre dos de los grandes protagonistas de la llamada Operación Cataluña.
El CNI, partidario de "carros de combate"
Villarejo ha asegurado que "los responsables del CNI eran partidarios de posicionar carros de combate en lugares estratégicos" de Cataluña tras la manifestación de la Diada de 2012, cuando Mas convocó elecciones anticipadas. Ha explicado que, como agente de inteligencia, aportó unas ideas que no iban en esta dirección: "Yo me permití comentarles: ¿Por qué no optáis por furgones policiales? Consumen menos combustible, gastan menos y son menos bronca. Y además, y ustedes lo saben porque hace 30 años que lo permiten, hay elementos de corrupción en el Govern para poder hacer una actuación judicial y policial", ha agregado.
Pese a que hubo "diversas reuniones de crisis" en las que se planteó esa opción, "al final se optó por esta línea menos dura", ha dicho el excomisario, que ha negado ser el cerebro de la Operación Cataluña, cuyo objetivo era, según ha dicho, desgastar y debilitar la extinta Convergència i Unió. "Era el único partido con la capacidad, estructura y el poder suficiente para provocar dolores de cabeza al Estado", ha confirmado.
Las filtraciones sobre Rosell
Por otro lado, Villarejo ha asegurado que el actual presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, filtró información sobre el expresidente del club, Sandro Rosell, que terminó en prisión preventiva durante dos años.
"Gente del entorno del presidente, que le había echado, creo recordar", ha manifestado en el cara a cara, en el que también ha afirmado que "engañaron" a la jueza del caso Rosell, Carmen Lamela, para que creyera que este era un peligro para la seguridad del Estado. Ante estas acusaciones, el FC Barcelona ha anunciado que pedirán una rectificación y, si no lo hace, pondrán una querella contra él.
Los Pujol y ERC
Asimismo, ha desvelado que los Pujol negociaron con la corona y ofrecieron trapos sucios de Esquerra Republicana a cambio de esquivar a la justicia. Según ha explicado, la familia estaba preocupada porque el CNI había conseguido informaciones económicas que los ponían en el punto de mira.
"Había una ingente cantidad de dinero, imposible de explicar por una procedencia lógica y normal, y dije, mira, yo puedo transmitir lo que me pide de ayuda y tal, me constaba que su padre había hablado con la Corona en este sentido, para pedir ayuda, y que el director del CNI era partidario de que no se indagara en cuentas como Soleado, donde estaba Pujol padre", ha remarcado.
En esta situación, ha explicado que pidieron a Josep Pujol que les proporcionara información sobre algún grupo que consideraran que fuera más partidario de la independencia "por métodos más radicales". "Me dijo, ¿ERC? Pues dame información de ERC, yo encantado de admitírsela", ha añadido Villarejo, que ha rechazado que participara en las supuestas presiones del Estado a la BPA por el caso Pujol.
Felip Puig informaba al CNI
Además, Villarejo ha asegurado que el exconseller de Interior de la Generalitat Felip Puig fue una de las fuentes que el CNI utilizó para construir la operación. Ha declarado que tuvo "diversas entrevistas con Joan Piqué Vidal [abogado] o Felip Puig", y que este último le dio "información sobre Xavier Martorell [entonces alto cargo del departamento], que era uno de sus principales enemigos".