Josep Lluís Alay, jefe de la oficina del expresidente Carles Puigdemont, ha respondido a la polémica generada por el beso robado de Luís Rubiales a Jenni Hermoso. Lejos de sumarse a la ola de indignación generada, ha centrado sus críticas en las jugadoras, esto es, en las víctimas. Considera que el acoso sufrido por Hermoso es "el precio por jugar con la camiseta española" y reprocha a Alexia Putellas que exprese sus quejas en castellano.
Alay, conocido activista independentista con sueldo cienmileurista pagado por la Generalitat sin que se sepa exactamente cuál es su agenda laboral, ha utilizado su perfil de Twitter para dar un enfoque identitario al acoso del presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF).
La indignación de Putellas
En respuesta al enfado expresado por Putellas en las redes sociales y su apoyo a Hermoso --"Esto es inaceptable. Se acabó, Contigo compañera", ha escrito--, el hombre de confianza de Puigdemont ha respondido: "Este es el precio por jugar con la camiseta española".
Asimismo, ha afeado a Putellas que utilice el castellano: "¿Lo podrían decir en catalán, por favor?".
Las reacciones han sido inmediatas. "Para mostrar tu apoyo a una compañera madrileña que ha sufrido acoso sexual tienes que hacerlo en catalán. Alay es uno de los máximos exponentes de la merma característica del nacionalismo identitario catalán", escribe un tuitero.
"Es increíble que algunos no se den cuenta de hasta qué punto se han convertido en una caricatura grotesca. Es que ni una cuenta parodia llega a esos extremos de ridículo. Es la cuenta de Alay de verdad, lo he comprobado. Aún no salgo de mi asombro", responde otro.
"Alay creu que tots els problemes de la societat s'arreglen si es parla català. Llengua miraculosa, al seu entendre, que pot fer-ho tot. Les llengües serveixen per comunicar-se. Si les barreges amb la politica, les estàs posant en perill", remata otro internáuta.
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