Las críticas de Junts no cambiarán la estrategia de ERC. Así lo ha hecho saber el president de la Generalitat, Pere Aragonès, que ha asegurado que seguirán en la vía de la mesa del diálogo con el PSOE pese a que sus exsocios les hayan acusado de flojos y de venderse demasiado baratos al presidente Pedro Sánchez.
El republicano se ha reivindicado como el voto útil del independentismo para evitar que los socialistas acaben absteniéndose para hacer presidente del Gobierno a Alberto Núñez Feijóo.
"Llamadas de poderes fácticos"
En un acto de ERC en Manresa (Barcelona), Aragonès ha advertido de que el miedo del PSOE a un gobierno formado por PP y Vox podría empujarle a abstenerse en el Congreso de los Diputados para evitar la entrada de la ultraderecha en el Gobierno de España. En este sentido, ha recordado que el partido socialista ya se abstuvo en 2016 posibilitando que el popular Mariano Rajoy presidiera el Ejecutivo.
De hecho, el republicano ha augurado que Pedro Sánchez recibirá el 24 de julio --día después de las elecciones-- "llamadas de teléfono de poderes fácticos" para que su partido haga un "servicio a España" permitiendo al PP gobernar. Algo que, a su parecer, solo podrá evitarse si ERC logra un resultado "decisivo".
"Para defender a Cataluña hace falta la máxima movilización, y la máxima movilización significa que no se quede nadie en casa", ha agregado en un mítin junto a la número dos de la candidatura, Teresa Jordà, y que ha contado con la ausencia de Gabriel Rufián.
Junts responde con críticas
Así, el president se ha postulado como el voto útil del independentismo y ha defendido que ERC se ha hecho imprescindible en esta legislatura en las Cortes, tanto en medidas económicas como sociales y en defensa de los condenados por el 1-O. "Si esto hace cuatro años cambió, es porque ERC tuvo la fuerza", ha recordado.
Por su parte, los neoconvergentes no han tardado en reaccionar a estas palabras. La candidata de JxCat al Congreso, Míriam Nogueras, ha cargado contra la mesa de diálogo porque "solo ha servido para adormecer a la gente y blanquear al PSOE y al reino".
Pelea entre 'indepes'
Si algo se está reforzando en esta campaña electoral es la pelea entre los partidos independentistas, que llevan meses lanzándose mensajes sobre quién tiene más capacidad para defender los intereses de Cataluña en la capital. Los republicanos se defienden por activa y por pasiva de que el voto que no sirve para nada es el de Junts por haber estado cuatro años en una suerte de rincón de los enfadados, mientras que ellos han obtenido los indultos para los políticos que estuvieron en la cárcel por el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017 y la reforma de la sedición.
Mientras tanto, Junts apela al votante descontento con ERC al considerar que están actuando como muleta del Estado y que no se están obteniendo las contrapartidas suficientes. "Si nosotros ganamos el 23J, nada volverá a ser igual ni en Madrid ni en Cataluña", ha prometido la actual diputada de JxCat.