Toni Soler

Toni Soler es uno de los empresarios televisivos que mayor tajada han sacado en los últimos años gracias a TV3. Los contratos millonarios de su productora, Minoria Absoluta, con la televisión pública de la Generalitat de Cataluña le han reportado, además de su principal fuente de ingresos, una notable popularidad e influencia.

Pero parece ser que el sesgo secesionista de sus programas Polònia y Està Passant no son suficientes para dar rienda suelta a su activismo nacionalista. En sus redes sociales personales, Soler se dedica, además, a faltar el respeto a políticos que no son de su cuerda, es decir: constitucionalistas. Lo ha hecho ahora con la diputada del PSC Alícia Romero, aunque hay otros precedentes. Tanto es así que, en el pasado, el exdiputado Joan Coscubiela le llegó a demandar por "no rectificar una información falsa" cuando mintió sobre su supuesto vínculo con Endesa en Està Passant. Finalmente, la cosa no fue a más ya que, un día antes de ir a los juzgados, el empresario televisivo aceptó admitir sus falsedades en antena.

Huelga decir que los malos modos de Toni Soler incumplen, además, el libro de estilo de la Corporació Catalana de Mitjans Àudiovisuals (CCMA), que insta a los profesionales de sus medios de comunicación públicos a mantener la neutralidad, también en sus redes sociales. Pero Soler, como otras estrellas de la radio y la televisión autonómicas, no parece darse por aludido. Por desgracia, llueve sobre mojado.