La presidenta de Junts, Laura Borràs, y el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, juntos en los Gaudí de 2022 / EUROPA PRESS

La presidenta de Junts, Laura Borràs, y el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, juntos en los Gaudí de 2022 / EUROPA PRESS

Política

Desgastar a Aragonès, el objetivo de Borràs antes de conocer la sentencia a su juicio por corrupción

La presidenta de Junts dice sentir "vergüenza ajena" por el 'president', de quien cuestiona la legitimidad de su cargo tras la ruptura entre posconvergentes y republicanistas

4 marzo, 2023 13:24

La presidenta de Junts, Laura Borràs, ha cuestionado la legitimidad de Pere Aragonès como presidente de la Generalitat después de que el republicano diese por superado el pacto entre posconvergentes y ERC que permitió arrancar la legislatura en 2021, con él al frente del Ejecutivo autonómico. Lo ha dicho este sábado en el Consell nacional de Junts, celebrado en Vilalba del Arcs (Tarragona), en el que ha manifestado que siente “vergüenza ajena” por el president. El acoso y derribo contra su exsocio es el último objetivo de Borràs a pocos meses de las elecciones municipales y a la espera de conocer la sentencia de los tribunales al juicio al que se ha enfrentado por posible corrupción.

En su reaparición política tras unas semanas sentada en el banquillo de los acusados, Borràs ha expresado que “produce cierta vergüenza ajena” escuchar a Aragonès decir que el “pacto” con Junts está “superado”, porque, en ese caso, “lo que estaría superado y afectado también es su propia presidencia”, ha declarado. Además, ha denunciado que “los primeros que rompieron el pacto, no cumpliéndolo”, fueron los propios republicanos, que han “fracasado con el diálogo” con el Gobierno de Pedro Sánchez.

La presidenta de Junts, Laura Borràs, durante el juicio / TSJC

La presidenta de Junts, Laura Borràs, durante el juicio / TSJC

Contra el autonomismo de ERC

Más allá del cuerpo a cuerpo –acrecentado en los últimos tiempos por el apoyo de ERC a suspender a Borràs como presidenta del Parlament mientras se resuelve su causa judicial por corrupción, así como por el victimismo no secundado de la afectada—, la todavía presidenta de Junts ha cargado contra la gestión del Govern en minoría de Aragonès. En concreto, ha tirado un nuevo misil contra la “tan sobrevalorada mesa de diálogo” entre los republicanos y el Gobierno de la nación, que en realidad “no ha sido nunca una verdadera mesa de negociación” sobre la autodeterminación y la amnistía, como pretendía el independentismo más radical, sino un foro donde rebajar las tensiones posprocés.

“El diálogo y la negociación no son posibles con el Estado español cuando de lo que hablamos es de la independencia de Cataluña”, ha recordado ante sus fieles. Es por eso por lo que, tras constatar que esta “vía del falso diálogo” es ya “un camino agotado”, según Borràs, es el momento de “entrar en la vía de la confrontación”, todo lo contrario de lo que está haciendo “el Govern en minoría absoluta de ERC”, que ha realizado “un giro absolutamente autonomista, de pacto y rendición” que incluye el pacto ERC-PSC por los presupuestos catalanes.

Victimismo de nuevo

Tampoco ha desaprovechado la ocasión para volver a interpretar el papel victimista por su causa judicial, que ha calificado de “suplicio”. “Si hubiese justicia, la única sentencia posible sería la absolución”, ha insistido, tras afirmar que ha “podido demostrar con razones y hechos” su “inocencia”. “No es, sin duda, el TSJC quien tiene la potestad de decidir cómo son las cosas”, ha atacado.

En las próximas semanas, el TSJC dictará la sentencia de la que pende el futuro político de Borràs, para quien la fiscalía pide seis años de cárcel y 21 de inhabilitación por fraccionar presuntamente contratos de la Institució de les Lletres Catalanes para adjudicárselos a un amigo entre 2013 y 2017.