La Generalitat de Cataluña esgrime una supuesta ausencia de "asignaturas" en su sistema educativo para rechazar el porcentaje mínimo de 25% de clases en castellano que establece la sentencia, firme y de obligado cumplimiento, del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) que acaba con la inmersión monolingüe obligatorio en catalán. El Govern "está trabajando" ahora para aprobar antes del martes --fecha límite para acatarla-- un decreto que indique cómo se deben usar el catalán y el castellano en las escuelas. Un texto del que se derivarán las instrucciones que recibirán los centros para cumplir teóricamente con la sentencia.
El Parlament suspendió ayer viernes el pleno en el que se debía aprobar en lectura única la proposición de ley sobre el uso de las lenguas en la escuela pactada por el PSC, ERC, JxCat y En Comú Podem, a la espera del dictamen solicitado por Vox, Cs y PP al Consejo de Garantías Estatutarias para frenar su entrada en vigor. La ley en cuestión reafirma al catalán como única "lengua vehicular" en las escuelas y relega al castellano como lengua de "uso curricular".
"Ya no hay asignaturas"
El secretario de Política Lingüística de la Generalitat, Francesc Xavier Vila, ha afirmado este sábado en una entrevista en el canal televisivo 3/24 que el Govern secesionista "está trabajando intensamente para llegar en el momento adecuado" con el decreto aprobado "y con todas las escuelas sabiendo lo que tienen que hacer, protegidas ante la sentencia".
El alto cargo de la Generalitat ha argumentado que el decreto prevé que "no se trabaje sobre la base de porcentajes, en el sentido de que, como cada vez tenemos un sistema que trabaja menos con asignaturas (de hecho asignaturas ya no existen como tal), es poco lógico hablar de asignaturas cuando no hay asignaturas".
Las escuelas, a las órdenes del Govern
En ese escenario, ha dicho Vila, se trabaja en diseñar un modelo en el que haya "un sistema compartido, donde no solo estás estudiando matemáticas sino materias diferentes de forma compartida", "y también pasa por las lenguas", ha agregado.
La ley pactada y el nuevo decreto, ha reiterado, fijarán "un nuevo marco legal", en el que no se fijarán explícitamente porcentajes y en el que "el centro se ha de atener a las instrucciones de Educación".
El catalán, "centro de gravedad del sistema"
"Básicamente", ha dicho, el decreto que pretende sacar adelante la Generalitat servirá para "explicar cómo se hace el proyecto lingüístico" en un marco "en el que el catalán es el centro de gravedad del sistema educativo", su "columna vertebral".
A partir de ese punto, ha continuado, "una vez que se reformen los proyectos que se deban reformar", éstos se elevarán a la Consejería de Educación, "que es quien los valida", procedimiento con el que, según él, "se quita presión a los centros".
Ve "graves perjuicios" en el bilingüismo
Según este dirigente de la Generalitat, "hay una situación política en la que el catalán se ha convertido en un objetivo a batir" [sic], por lo que ha pronosticado que los sectores defensores del bilingüismo "seguirán con su cruzada para arrinconar el catalán", según él.
El secretario ha informado del decreto en la jornada en la que se ha sabido que el Govern ha recurrido el ultimátum del TSJC para implantar un 25% de castellano en las escuelas con el argumento de que prepara una normativa nueva y que cambiar los proyectos lingüísticos a final de curso acarrearía "graves perjuicios" y un gran "impacto económico".