Giró pide a De Guindos una banca pública catalana

El consejero catalán de Economía y Hacienda, Jaume Giró, ha trasladado al vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, la voluntad del Govern de constituir una banca pública catalana. Ambos dirigentes se han reunido este jueves en Fráncfort (Alemania).

Giró ha aprovechado el encuentro para subrayar “la determinación del Govern de hacer una banca pública del siglo XXI en Cataluña”, y ha expuesto a De Guindos las vías que estudia su consejería para lograr su objetivo.

El vicepresidente del BCE, Luis de Guindos (i), y el consejero catalán de Economía, Jaume Giró (d) / GOVERN

Objetivo del nacionalismo catalán

La creación de una banca pública catalana es uno de los objetivos históricos del nacionalismo catalán, ya desde los tiempos de Jordi Pujol, cuando la pretensión era ampliar las capacidades financieras de la Generalitat. Sin embargo, los primeros pasos firmes se dieron ya en pleno procés, a partir del 2012, con el argumento de que una entidad pública aportaría competencia al mercado para asegurar financiación a empresas y particulares.

En el actual mandato, el Govern ha pedido al Banco de España la transformación del Instituto Catalán de Finanzas (ICF) en una banca pública, pero el regulador se ha negado, por lo que Giró ha activado otras vías. Cabe recordar que, en los pactos de investidura de ERC y la CUP para apoyar la candidatura de Pere Aragonès, se incluía esta petición, que debe implementarse antes de las próximas elecciones, según lo acordado por estos partidos.

El contexto macroeconómico

Más allá del asunto de la banca pública, De Guindos y Giró han abordado el contexto macroeconómico europeo y catalán, condicionado por las consecuencias de la invasión rusa de Ucrania, en especial con relación al incremento de los precios de la energía y el encarecimiento de algunas materias primas.

Según ha comunicado la Generalitat, en el encuentro también se ha hablado de la creciente inflación, de la evolución de los tipos de interés, el freno a la compra de bonos por parte del BCE a partir del verano y las perspectivas económicas de los próximos meses.