El Consell de l'Àudiovisual de Catalunya (CAC) ha incoado un expediente sancionador a TV3 por un eventual incumplimiento de la normativa sobre publicidad en su polémico programa Bricoheroes, según ha informado este viernes la autoridad de regulación en un comunicado.
El CAC ha detectado siete emplazamientos de producto que tendrían que haber sido advertidos a la audiencia al inicio y al final del programa, así como otros tres emplazamientos de producto con prominencia indebida en uno de sus episodios.
Una multa mínima
La sanción a imponer en este caso es una multa, cuya cuantía todavía no ha sido determinada y que, según el CAC, debería ser el mínimo establecido por la ley, ya que la Corporació Catalana de Mitjans Audiovisual (CCMA) --el ente que gestiona los medios audiovisuales de la Generalitat-- recondujo su actuación y retiró este programa tras comunicársele la apertura de expediente, sin necesidad de requerimiento previo.
Al plantear el CAC imponer "el grado mínimo establecido legalmente", la multa sería de 12.001 euros. La productora, El Corral de l'Humor, se librará de una sanción más grave, que podría haber llegado hasta los 90.000 euros.
Acusación a Loppacher
De hecho, entre quienes han desvelado la cuantía --de la cual no se habla en el comunicado-- figura una de las consejeras del CAC, Carme Figueres, que en su perfil de Twitter ha acusado al presidente del organismo, Roger Loppacher, de dar a conocer la noticia "ocho días después" de su aprobación en el pleno, y de ocultar el importe de la sanción.
El eventual incumplimiento del deber de informar claramente del emplazamiento del producto al principio y final del programa y cuando se retome después de una pausa publicitaria; la eventual incitación directa a la compra; y la eventual prominencia indebida del producto se tipifican como "infracción grave" en la ley de comunicación audiovisual.
Análisis del gag machista sobre la reina
Bricoheroes, un espacio supuestamente humorístico que se sigue emitiendo en la web de TV3 y a través de su canal de Youtube y redes sociales, ha protagonizado en los últimos años varias polémicas por los exabruptos hispanófobos de sus presentadores, Jair Domínguez y Lluís Jutglar Peyu. Entre sus últimas controversias figura un gag machista y denigrante en el cual se hablaba de una felación por parte de la reina Letizia, que TV3 no llegó a emitir, lo cual le valió acusaciones de "censura" por parte de sus propios autores.
De hecho, el CAC está analizando de oficio a Bricoheroes por ese mismo gag, aunque todavía no ha hecho pública la resolución. En el pasado, ese mismo programa se había hecho célebre al proferirse en el mismo varias veces el insulto "puta España", sin que ni los dirigentes de TV3 ni de la CCMA ni del propio CAC se hayan tomado nunca medidas al respecto.