Trapero mantuvo en ‘secreto’ su viaje a Madrid ante el consejero del Interior

La visita del Mayor Josep Lluís Trapero a varias instituciones en Madrid el pasado 15 de julio ha levantado polvareda en la consejería del Interior, encabezada por Joan Ignasi Elena. Fuentes cercanas al departamento señalan que el máximo responsable de Mossos d’Esquadra eludió comentar el viaje y la agenda de contactos al Govern a pesar de que tan solo cuatro días después de que mantuviese reuniones en el Tribunal Supremo, la Audiencia Nacional y el Palacio de la Zarzuela se sentase con el consejero designado por ERC.

Trapero y Elena departen sobre la situación en el cuerpo de seguridad catalán cada lunes. Las vacaciones han propiciado que la última vez que se sentaron juntos fuera, precisamente, el pasado 19 de julio. El problema es que el agente no habló ni entonces ni con anterioridad de su viaje, cuestión que ha tensado unas relaciones ya de por si complicadas entre ellos.

Confianza “deteriorada”

Desde la consejería se apunta que existe un motivo de peso para estos encuentros “de forma segura”. Con todo, no se esconde el malestar y estupor tanto de Elena como de sus colaboradores más cercanos porque “el conseller no estaba informado de este viaje”. “El Mayor dará las explicaciones oportunas”, sentencian los mismos interlocutores.

Josep Lluís Trapero, mayor de los Mossos d'Esquadra / TV3

Señalan, asimismo, que las suspicacias responden más al secretismo de la escapada que a las instituciones que visitó. “Se ha deteriorado la confianza entre ambos”, admiten. Como mínimo, por parte del político.

Reuniones “operativas”

Fuentes policiales remarcan que el predecesor en la responsabilidad (no en el cargo) de Trapero tras su destitución, el comisario Eduard Sallent, protagonizó un road show análogo. Aseguran que son “reuniones operativas” compatibles con las responsabilidades del cuerpo de seguridad catalán.

Recuerdan que ejercen de “policía judicial”, por eso la visita al Supremo y la Audiencia Nacional. En cuanto a la reunión en el Palacio de la Zarzuela, se apunta que este tipo de encuentros se han celebrado en diversas ocasiones a lo largo de la historia de la democracia en el marco de las “relaciones de seguridad” que mantienen con la Jefatura de Estado.

Nuevo encuentro el 30 de agosto

Será el próximo lunes, 30 de agosto, cuándo el Mayor y el consejero Elena se vean las caras tras sus respectivos descansos estivales. Se da por sentado que el “incidente” va a “dejar huella”, destacan las mismas voces de la consejería. Todo ello, en un contexto en que Trapero ha pasado de héroe a villano para una parte del independentismo catalán. Durante los momentos álgidos del procés se convirtió en un referente del secesionismo, con presencia en una de las paellas que Pilar Rahola organizó en su casa de Cadaqués en el verano de 2017. El Mayor nunca perdonó a la periodista que divulgase la imagen.

Todo cambió cuando fue absuelto por la Audiencia Nacional de las acusaciones de sedición y desobediencia por su papel en el 1-O. Fue restituido como máximo responsable de la policía catalana, alejado ya de cualquier atisbo de complicidad secesionista y entregado plenamente a su labor policial.

Dan cuenta de ello las críticas del independentismo al papel de los Mossos en las manifestaciones de protesta por el encarcelamiento del rapero Pablo Hasél y por su papel institucional, ya que Trapero asistió a la visita de Felipe VI a la fábrica SEAT, mientras el Govern plantaba al monarca. También acudió al acto protagonizado por el Rey en las Jornadas del Círculo de Economía, así como a la toma de posesión del nuevo General de la Guardia Civil en Cataluña, confirmando así su interés por restablecer la colaboración con los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado.