Carrizosa acusa al Gobierno de "desarmar al constitucionalismo" con los indultos
El diputado de Ciutadans (Cs) en el Parlament cree que el secesionismo "seguirá comiendo terreno" si puede negociar fuera de la ley
9 julio, 2021 18:34El líder de Ciutadans en el Parlament, Carlos Carrizosa, ha acusado este viernes al Gobierno de "desarmar al constitucionalismo" con la concesión de los indultos a los dirigentes del procés, y cree que con esta medida de gracia se ha retrocedido años en el conflicto secesionista.
Carrizosa ha calificado de "mesa de chantaje" la denominada mesa de diálogo entre el Gobierno central y los dirigentes de la Generalitat, porque considera que en ella está representada solo una facción de catalanes.
"Ningunean al resto de catalanes"
"Imponen condiciones no compartidas por la mayoría, y orillan y ningunean al resto de catalanes", ha manifestado el líder de la formación naranja en un acto en las jornadas de verano de Societat Civil Catalana (SCC). Asimismo, ha defendido que donde se debe hacer un debate es en el Parlament, en igualdad de condiciones para todos los representantes políticos.
El diputado de Cs ha avisado de que el secesionismo va a "seguir comiendo terreno" si se le permite negociar y hablar fuera del marco de la ley, según él, y ha sostenido que la solución no pasa por hacer concesiones a quienes no hacen ninguna concesión, en sus palabras.
Recursos al TEDH
Preguntado por cómo interpretaría que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) no compartiera la sentencia del Tribunal Supremo (TS), Carrizosa ha responsabilizado al Gobierno central porque con los indultos "se da mensaje de que la sentencia no fue justicia, sino revancha, y el Gobierno avala esta tesis".
Ha lamentado que Cs no tiene "potencia pedagógica suficiente" para hacer llegar a instancias internacionales los principios democráticos españoles, por lo que ha pedido que el Gobierno haga campaña en el exterior en ese sentido, porque considera que no se ha contrarrestado el discurso nacionalista.
También ha calificado el espacio político de Junts per Catalunya (JxCat) como un grupo "acaudillado, con unos líderes dispuestos a todo por su caudillo", en referencia al expresidente de la Generalitat fugado Carles Puigdemont; de la CUP ha dicho que son de una religión y que su reino no es de este mundo, y de ERC, que quiere mostrar una cara más amable pero está sometida a la puja de sus socios en el Govern.