El presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, ha respondido al Tribunal Supremo que no ha pedido ningún indulto, puesto que no se arrepiente de ninguna de sus acciones, y que su prioridad "no es salir de la cárcel", sino la resolución de lo que denomina "conflicto político" en Cataluña, empezando por la amnistía de los políticos presos secesionistas.
Cuixart ha respondido de este modo en un escrito remitido al tribunal después de que éste haya dado cinco días a los condenados en el juicio por el procés para expresar lo que consideren "conveniente" sobre las peticiones de indulto.
No se arrepiente y "lo volverá a hacer"
Según su defensa, encabezada por la abogada Marina Roig, el posicionamiento de Cuixart sobre los hechos por los que fue condenado a nueve años de cárcel por sedición fue "firme y contundente" durante el juicio, en el que sostuvo que actuó en el marco del "ejercicio de los derechos fundamentales de reunión, libertad de expresión y libertad ideológica" en defensa del denominado "derecho de autodeterminación" de Cataluña.
En este sentido, el escrito dirigido al Supremo apunta que "es público y notorio" que Cuixart mantiene lo que declaró en su turno de última palabra en el juicio a la cúpula del procés: "Que no podía haber actuado de otra forma atendiendo a su conciencia y su compromiso social, que no hay ningún tipo de arrepentimiento, que todo lo que hizo lo volverá a hacer" porque, en su opinión, no cometió ningún delito y sigue convencido de que "es lo que tenía que hacer".
Cuixart resalta además en su alegato que dos votos particulares de la primera de las sentencias del Tribunal Constitucional que abordaron la condena por sedición --en este caso, relativa al exconseller Jordi Turull-- consideraron "vulnerados", según él, los derechos fundamentales de reunión, libertad de expresión, libertad ideológica y legalidad penal. Según dice el empresario nacionalista en su escrito, varios organismos internacionales le han apoyado, como el Consejo de Europa, el Comité de Detenciones Arbitrarias de Naciones Unidas o Amnistía Internacional.
"Quien debería pedir perdón es el Estado"
En declaraciones a la prensa en la sede de Òmnium Cultural, el vicepresidente de la entidad, Marcel Mauri, ha explicado que esta respuesta "va en coherencia" con todo lo que Cuixart defendió en el juicio del 1-O.
"Ni él ni nadie tiene que pedir perdón. No pedimos clemencia, Cuixart no busca el perdón del Estado ni de nadie, al contrario: es el Estado el que debería pedir perdón", ha añadido Mauri. A renglón seguido, ha señalado que, bajo su punto de vista, el Gobierno "no tiene ninguna voluntad de solucionar el conflicto" nacionalista porque, de haber sido así, ya lo habría hecho. Es por eso que ha argumentado que el indulto a Cuixart es un escenario que no creen que vaya a ocurrir y que, por tanto, no lo contemplan.