La nueva presidenta del Parlament de Cataluña, Laura Borràs, preside la reunión de la nueva Mesa del Parlament / EP

La nueva presidenta del Parlament de Cataluña, Laura Borràs, preside la reunión de la nueva Mesa del Parlament / EP

Política

La nueva y la vieja Convergència, enfrentadas por la investidura

El próximo congreso de JxCat agudiza la pugna entre el sector que defiende el pacto con ERC y los duros, que prefieren repetir elecciones y dominar la ejecutiva neoconvergente

1 abril, 2021 00:00

La posición de fuerza que Junts per Catalunya (JxCat) ha exhibido estos días en sus negociaciones con ERC esconde un fuerte ruido de sables dentro de este partido demasiado transversal para poder ser gobernado. Así, mientras un sector quiere que haya un nuevo gobierno cuanto antes, otro prefiere que haya una repetición electoral. Incluso hay una corriente en las bases de JxCat partidaria de investir a Pere Aragonès sin entrar en el Govern para dejar en evidencia a ERC y la CUP. ¿Pero quién es quién en cada grupo? Y, sobre todo, ¿qué quiere Carles Puigdemont?

Desde que se celebraron las elecciones catalanas del 14F, y de eso hace ya mes y medio, JxCat ha medido sus fuerzas con ERC, cuyo candidato estaba llamado a presidir la Generalitat sin problemas, dada la existencia de una mayoría independentista. De momento, han sido los neoconvergentes quienes han ganado la batalla. Por dos veces, pues con su abstención, ha tumbado a investidura de Aragonès.

 

 

Posiciones enfrentadas en JxCat sobre el apoyo o no a ERC para formar gobierno / CG

Duros contra gestores

Dicho de otra manera, JxCat tiene de nuevo la sartén por el mango y, a día de hoy, se desconoce si Cataluña está abocada a unas nuevas elecciones o a un tripartito independentista, que según el PSC, En Comú Podem, Ciudadanos y PP, está condenado al fracaso debido a sus diferencias ideológicas. Oficialmente, tanto JxCat como ERC aseguran que el acuerdo es posible y que no se agotará el plazo de dos meses que el martes se abrió tras la investidura fallida. Pero en lo que respecta a JxCat, hay discrepancias de criterio entre la nueva y la vieja Convergència. Fuentes soberanistas aseguran que Elsa Artadi, Damià Calvet y Jordi Puigneró son partidarios de formar gobierno cuanto antes, preferentemente antes del 23 de abril, día de Sant Jordi.

Todos ellos tienen experiencia de mandato y, en el caso de Artadi, suena como la mujer fuerte de JxCat en el Ejecutivo liderado por ERC. O, al menos, ese es el deseo de los republicanos. La exconsejera de Presidencia es, ideológicamente hablando, la dirigente menos estridente de la formación y acredita experiencia de gestión junto al exconsejero de Economía, Andreu Mas-Colell.

Presidenta del Parlament con desgana

Por el contrario, dirigentes como Laura Borràs, presidenta del Parlament, el empresario Joan Canadell y otros diputados prefieren que todo reviente y convocar nuevos comicios. Están convencidos de que, en una nueva contienda electoral, podrían aumentar sus votos a costa del PDECat, que no logró representación parlamentaria el 14F. Y es necesario recordar que Borràs prefería formar parte del Govern que ser presidenta de la Cámara catalana, según explicó ella misma en su discurso de toma de posesión del cargo.

Tal como publicó ayer Crónica Global, Álex Fernández y Fran Bragado, especialistas en comunicación política y fundadores de Campaña Permanente, recuerdan que en las elecciones catalanas la ventaja de Aragonès sobre JxCat fue de unos 35.000 votos, mientras el PDECat logró 77.000 papeletas. “Junts aspira a ejercer la mayor presión posible sobre ERC, buscando maximizar su poder en el próximo Ejecutivo; y si esto sale mal, para ellos la repetición electoral no sería un problema, incluso puede ser positiva, si logra atrapar mediante el voto útil apoyos del partido de Àngels Chacón. Sería bastante positivo ante su target que lo empaquetasen con un relato de que bajo su liderazgo, un Govern independentista ha sido posible, llevando la lupa del fracaso sobre ERC".

Las dudas de Puigdemont

¿Pero qué piensa Puigdemont de ese posible adelanto electoral? Pues las citadas fuentes soberanistas apuntan que “como siempre, el expresidente duda mucho”.

El secretario general de Junts, Jordi Sànchez / JUNTS

El secretario general de Junts, Jordi Sànchez / JUNTS

De ahí que todas las miradas estén puestas en quien se ha revelado como el hombre fuerte de JxCat. Se trata de Jordi Sànchez, expresidente de la Assemblea Nacional Catalana (ANC), que cumple condena por sedición. Sànchez, que pronunció una conferencia en días previos a la investidura de Aragonès, en la que dejó claras las posiciones de JxCat, es partidario de formar gobierno “pero quiere quitarse de encima a unos cuantos convergentes clásicos”. Considera Sànchez, el gran negociador del partido, que JxCat sigue lastrada por los pecados de CDC --corrupción, recortes, liberalismo…-- y que queda por acometer una gran catarsis, que vaya más allá de las siglas.

Esa gran transformación podría producirse a finales de abril, cuando JxCat tiene previsto celebrar su congreso. “Es muy posible que los dirigentes más duros e intransigentes con ERC tengan más números para ocupar los órganos de decisión del partido”.

Lobby de altos cargos

Pugna, por tanto, partidista que se ha hecho extensiva a las negociaciones con ERC. Sin embargo, tras casi cuatro décadas de poder de CiU --el tripartito de izquierdas no supo o no pudo deshacerse de un sottogoverno convergente--, hay mucho alto cargo en juego. Y también mucho asesor inquieto ante una corriente de fondo de las bases de JxCat, consistente en apoyar la investidura de Aragonès sin entrar en el gobierno, para visualizar una gestión ERC-CUP que preconizan traumática.

De ahí que, a modo de lobby, un grupo de altos cargos estén presionando para que retener el poder.