El independentismo tampoco alcanzaría el 50% de votos en las próximas elecciones catalanas. Según el último sondeo publicado por el Centre d'Estudis d'Opinió (CEO), la suma de ERC, JxCat y la CUP se estancaría en el 47,7% de los sufragios --en los últimos comicios, las tres fuerzas cosecharon el 47,49% de apoyos--. Así, los partidarios de la independencia de Cataluña no lograrían el objetivo de hacerse con más de la mitad de papeleras en la próxima cita electoral.
Sin embargo, la unión de los tres partidos independentistas bastaría tanto en la horquilla baja de la estimación (72) como en la alta (75) para reproducir el Govern de coalición entre JxCat y ERC. Pero la encuesta también apunta otra posibilidad: una mayoría alternativa de 70 escaños sumando la representación de ERC, PSC y los comuns que podría cambiar el signo ideológico del Ejecutivo catalán.
Hundimiento de Cs y despegue del PSC
El Barómetro de Opinión Política del organismo dependiente de la Generalitat sitúa a ERC en cabeza del bloque independentista con 35 o 36 escaños y el 23,4% de los votos. Le seguiría JxCat, con 31 o 32 escaños (19,4% de votos), con una gran fluctuación debido a la fractura del espacio posconvergente en distintas siglas. En tercera posición se ubicaría el PSC, que mejoraría notablemente su resultados obteniendo 24 o 25 escaños (en 2017, obtuvo 17).
El gran perjudicado en las elecciones sería Cs, que podría llegar a perder 20 diputados y quedarse con 16 o 17. Por detrás de la formación naranja se situarían los comunes (8-9 escaños) y el PP, que mejoraría levemente sus resultados alcanzando 7-8 escaños. Cerrarían la representación la CUP, con 6-7 escaños, y Vox, que se estrenaría en la Cámara autonómica con entre 4 y 6 escaños.