El Ayuntamiento de Barcelona vuelve a repartir dinero entre los afines. El gobierno municipal de la Ciudad Condal, que comanda Ada Colau (BComú) ha inyectado otros 17.100 euros públicos en Enginyeria sense Fronteres, la oenegé en la que el concejal de Transición Ecológica, Eloi Badia, fue project manager antes de dar el salto a la política.
La subvención figura en la resolución provisional de subvenciones para las Actividades y Proyectos de Promoción y Refuerzo de la Economía Social y Solidaria en la Ciudad de Barcelona en 2020 [consultar aquí]. Según este documento, Enginyeria sense Fronteres se lleva 17.100 euros del Ayuntamiento de Barcelona, pago que se suma a los 171.330,50 euros que pescó la misma entidad en la convocatoria de ayudas de Justicia Global y a los 4.500 euros que arañó del reparto global de subvenciones de 2020. En total, la asociación lleva asignados 192.930,50 euros del Ayuntamiento de Barcelona en lo que va de año.
Calle Casp 43, nueve subvenciones
Hay más. Las entidades afines a los comunes vuelven a llevarse diversas ayudas públicas pese a las tensiones de tesorería que sufre el segundo mayor ayuntamiento de España por la crisis económica derivada de la pandemia. El conglomerado de cooperativas que opera desde el número 43 de la calle Casp de Barcelona, sede de Observatori Desc, donde trabajó Ada Colau antes de saltar a la política, se lleva nueve ayudas.
En esta ronda de pagos a la economía social salen premiados en la granja de subvenciones de BComú iLabso (6.370 euros); Arç Cooperativa (6.500); Opcions (6.500); Ecos (6.500), Crític (4.500); Calidoscoop (4.945,20); Sostre Cívic (3.985); Nusos (7.800) y CoopHalal (4.500). Muchas de ellas captaron también dinero público en las convocatorias anteriores.
Obsesión por el agua
En el caso de Enginyería sense Fronteres, oenegé en la que Eloi Badia fue project manager entre 2007 y 2015, cuando salió escogido concejal en la lista de Barcelona en Comú, el apoyo municipal a sus actividades genera un retorno ideológico al gobierno municipal de la Ciudad Condal. No en vano, ESF apoya e impulsa diversos proyectos para municipalizar el agua, la misma medida que defienden los comunes. De hecho, la nueva subvención de 17.500 euros es para subvencionar un proyecto para "recuperar el agua".
Enginyers es, además, uno de los valedores del Movimiento Agua Pública y Democrática, que proponía una gestión solo pública del suministro frente al modelo de colaboración público-privada actual. Esta apuesta ideológica, que Badia impulsa también desde el Área Metropolitana de Barcelona (AMB), donde es vicepresidente de Ecología, recibió un revés en 2019, cuando el Tribunal Supremo avaló la configuración de la empresa mixta.