Así ha asfixiado la Generalitat al sector industrial catalán
La UE suspende a Cataluña en investigación transferida al tejido empresarial, pero el Govern rechaza aumentar la inversión en esas políticas necesarias para la reconversión de empresas como Nissan
29 mayo, 2020 00:00Ni política industrial ni innovación. Cataluña es una de las regiones europeas con menos dinamismo en investigación para transferir al tejido empresarial. Algo que imposibilita la reconversión de sectores como el de la automoción, donde el cierre de la factoría de Nissan es el símbolo de la errática gestión de la Generalitat. Informes de la propia UE demuestran cómo la comunidad catalana está a la cola en esas políticas, mientras las formaciones independentistas incumplen sus propios compromisos parlamentarios.
Corte de la ronda Litoral por las protestas de Nissan / EP
“Debemos ser honestos y admitir que debemos mejorar. No tenemos política industrial ni de innovación, dos puntales de la UE. Los informes así lo indican. Cataluña suspende en inversión en investigación para transferir al tejido económico”, afirma la diputada de PSC-Units Alícia Romero.
Por debajo de Extremadura y Castilla-La Mancha
Se refiere al The Regional Innovation Scoreborad (RIS), un marcador que publica la Comisión Europea, que evalúa el rendimiento en innovación de las regiones europeas. El RIS de 2019 cubrió 238 regiones en 23 países. Cataluña aparece como una de las zonas menos dinámicas de Europa en investigación para transferir al tejido económico --a poca distancia de Extremadura o Castilla-La Mancha, a pesar de que en la comunidad catalana hay 620.000 empresas y el 21,4% del PIB tiene base industrial--, con indicadores similares al norte de Italia, mientras que Francia, Gran Bretaña, Países Nórdicos y Portugal presentan un mayor vigor en industria e I+D .
PSC-Units ha presentado diversas iniciativas en el Parlament con la finalidad de potenciar el sector industrial en general y el de la automoción en particular, pero el Govern “no ha cumplido estas medidas”, denuncia Romero. Por ejemplo, en marzo de 2019, el Pleno de la Cámara catalana aprobó una moción, con los votos de todos los grupos, en la que se instaba al Govern a presentar una evolución completa y detallada del Pacto Nacional por la Industria aprobado en julio de 2017, así como las líneas de actuación de cara a la estrategia europea Horitzó Europa (2021-2029).
Planes incumplidos
También se exigía que se garantizaran los recursos necesarios acordados en ese Pacto y aumentarlos en cada ejercicio dentro del período 2021-2027. Pero ni se ha hecho recuento de ese gran proyecto estrella, cuya ejecución alcanza el 80%, según la Consejería de Empresa, y que los sindicatos reducen a un 50%. Pero es que, además, ese Pacto acaba en 2020, y nada se sabe sobre qué pasará a partir de 2021.
La Cámara exigió también aprobar, antes de un año, un plan estratégico integral de apoyo a la automoción (2020-2025) para facilitar la adaptación a la digitalización y la transformación ecológica. Pero tampoco se cumplió.
Un mes antes, se planteó otra moción de los socialistas para impulsar el Pacto Nacional para la Sociedad del Conocimiento, que se reunió recientemente. En el mismo, los sindicatos avisaron del riesgo de que se repitieran los errores del Pacto por la Industria. Favorecer las políticas de clústers territoriales, acelerar procesos de cambio estratégico y tecnológico, con apoyo a los planes de actuación, de formación e inversión en I+D, era otro de los compromisos que secundaron Junts per Catalunya y ERC.
Ya en octubre de 2018, el Parlament aprobaba otra moción de apoyo a la empresa, consistente en reclamar a la Generalitat una estrategia de atracción de la inversión tras la fuga de empresas provocadas por el proceso independentista.
Enmienda a los presupuestos
También el PP ha intentado, vía enmienda, elevar la inversión en automoción. Con motivo de la tramitación de los presupuestos de la Generalitat, los populares presentaron una enmienda que elevaba a 4,1 millones de euros la partida destinada al plan de apoyo a la automoción y movilidad, pero “fue rechazada con los votos en contra de Junts, ERC y CUP y la abstención de Catalunya en Comú-Podem”, recordaba ayer el portavoz parlamentario Santi Rodríguez.
También ha recordado que ha recordado que, en febrero, el Govern anunció que invertiría 20 millones de euros en automoción, que finalmente se redujeron a 2,9 millones en las cuentas de 2020, “una cantidad insuficiente para apostar por la continuidad del sector de la automoción en Cataluña, que es el caso de Nissan”.
En efecto, la consejera de Empresa, Àngels Chacón --la misma que viajó sola a Japón en noviembre de 2019 para reunirse con la empresa nipona y que rechazó hacer un frente común con el Gobierno-- admitió que la Generalitat dedicaba a automoción 10 veces menos de lo necesario. Lo dijo a modo de puya contra el vicepresidente catalán Pere Aragonès, responsable de los presupuestos.
Sin revertir los recortes desde 2010
Igualmente insuficientes han sido las partidas destinadas al apoyo industrial, que actualmente ascienden a 51 millones, frente a los 163 millones que destinaba el Gobierno tripartito en 2010.
También desde Ciudadanos se ha reclamado una política industrial más decidida. Y ahora ha vuelto a hacerlo. El pasado martes, la Junta de Portavoces del Parlament aceptó una propuesta de resolución de Cs para debatir en el próximo Pleno del 3 y 4 de junio la celebración de una sesión monográfica sobre la crisis de Nissan.
"Es urgente que se planteen medidas para garantizar los derechos de los trabajadores, así como alternativas de viabilidad para las plantas de Nissan en Cataluña", afirma Lorena Roldán, quien considera “urgentes la concesión de ayudas y bonificaciones para empresas en el marco del Covid-19 que sirvan para mantener los puestos de trabajo y evitar que se deslocalicen.