El idilio independentista de ERC y Junts per Catalunya pasa por momentos turbulentos. Lo demuestran los constantes enfrentamientos entre representantes de ambos partidos, socios en el Govern, ya sea por la gestión de la crisis del coronavirus o de las futuras elecciones catalanas, aún sin fecha. La última muestra --por ahora-- ha tenido como protagonistas a Joan Tardà y a Quim Torra, enzarzados dialécticamente de forma pública, a través de los medios y las redes sociales.
El diputado de ERC en el Congreso ha publicado una columna de opinión en El Periódico en la que, entre otros aspectos, ha acusado al partido heredero de Convergència de "anclarse en el conflicto simbólico estéril y en el consevadurismo, ignorando la realidad" de Cataluña desde el punto de vista ideológico. Es decir, de la fractura entre independentistas y no independentistas. Unas acusaciones que al president no le han sentado nada bien, por lo que se desprende de la contestación expuesta en su perfil personal de Twitter.
Junqueras apuesta por ampliar la base
Tardà deja clara su intención desde el principio de su publicación, con un título que no deja lugar a dudas: "Más junquerismo y menos torrismo". Alaba la forma de trabajar de Oriol Junqueras en pos de la independencia, que busca "apoyos democráticos" mediante la "acción política socialmente transformadora". Es decir, la ampliación de la base secesionista en Cataluña con diálogo. Y en contraposición señala a JxCAT --con Torra y su "torrismo" al frente--, que deja de lado "la perentoria necesidad de conseguir en el próximo ciclo electoral un avance significativo de apoyo popular".
El líder de ERC en la cámara baja critica la "preocupante y creciente desaparición del catalanismo" en el PSC y, también, el "terraplén nacionalista postconvergente" que, a pesar de compartir con ellos la ideología independentista, decide "pactar [la gobernanza de] la Diputación de Barcelona con Núria Marín por tal de impedir que un republicano la comande".
Comparación entre Torra y Sánchez
Tardà equipara la política de Torra y los neoconvergentes con la de Pedro Sánchez desde el Gobierno --a la que denomina "sanchismo"--, al señalar que tanto el uno como el otro crean "obstáculos" que impiden "desplegar la acción política" que defiende ERC. En resumidas cuentas, esta especie de doctrina Junqueras que expone Tardà querría conseguir que "todas las partes catalanas, independentistas o no, se sientan interpeladas a trabajar y respetar la opción contraria y a no bloquear ninguna solución en el marco de un acuerdo" que lleve a un nuevo referéndum de autodeterminación.
Esta comparación con Sánchez parece ser el punto que más ha dolido a Torra, habida cuenta de la contestación que a esta columna ha dado a través de la red social de micropublicaciones. Señala el president que las palabras de Tardà son "pirotecnias verbales" y que la equiparación entre la actuación política de su partido y las del PSOE "supera los límites" de su imaginación. Y acaba su tuit con lo que parece una ostentación sobre quién de los dos es más independentista: "No acostumbro a ver la vida en clave española. Fácil, yo quiero la independencia. ¿Y tú?".