El independentismo aprovecha el confinamiento para pedir dinero para los procesados por el 1-O
Representantes de la ANC y de ERC llaman a llenar la caja de solidaridad para evitar los embargos a los responsables del 'procés'
21 marzo, 2020 15:10El independentismo aprovecha el confinamiento para pedir dinero para los líderes políticos procesados por el 1-O. Lo hace en un momento de parálisis generalizada del país (incluidos los juzgados) a causa del estado de alarma decretado por el Gobierno para contener la expansión del coronavirus, y cuando en España el número de fallecidos con Covid-19 supera el millar.
La presidenta de la Assemblea Nacional Catalana (ANC), Elisenda Paluzie, por ejemplo, aprovecha el confinamiento para pedir "ayuda" para los procesados por el 1-O. En esta ocasión se refiere a los diputados de ERC Josep Maria Jové y Lluís Salvadó, "que ayudaron, que contribuyeron a organizar el referéndum de autodeterminación".
Estem en un moment molt difícil i tot i que terminis s'han aturat provisionalment, quan els aixequin la justícia espanyola seguirà la seva venjança. Ajudem a @jmjovellado i @LlSalvado com hem fet amb la resta de responsables del referèndum https://t.co/2fZZ7aiab6 #omplimlacaixa pic.twitter.com/JrQchtIJAm
— Elisenda Paluzie (@epaluzie) March 20, 2020
Jové, Salvadó y una fianza de 4,5 millones
Jové (que participa en la mesa de diálogo y es el propietario de la moleskine donde se detallaba la planificación del 1-O) y Salvadó están procesados por presuntos delitos de desobediencia, prevaricación, malversación y revelación de secretos. Asimismo, el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) les impuso una fianza conjunta de 4,5 millones de euros, a depositar en 15 días desde el 5 de marzo. No los tienen, pero el coronavirus les da algo de margen.
Los procesados presentaron un recurso alegando que parte de la fianza ya fue depositada en la causa que dirige el Juzgado de Instrucción número 13 de Barcelona contra una treintena de ex altos cargos de la Generalitat implicados también en la organización del 1-O y en el procedimiento del Tribunal de Cuentas.
Paluzie: "La justicia española solo quiere venganza"
Por el contrario, 1,6 millones de la fianza corresponden a la gestión informática impulsada por la Hacienda catalana para eventualmente recaudar los impuestos de los catalanes, partida que no está asignada ni en el juzgado de instrucción ni en el Tribunal de Cuentas.
En este contexto, Paluzie recuerda que "en estos momentos se han paralizado las actuaciones y los plazos judiciales", y añade que "algún día, pronto, se levantará este confinamiento". Será entonces cuando la justicia española, "que es vengativa y no espera, solo quiere venganza", embargará las cuentas de Jové y Salvadó, en palabras de la presidenta de la ANC. "Ayudémosles desde casa, hagamos una aportación a la caja de solidaridad estos días", añade.
Rosique: "Defendieron el derecho a la autodeterminación"
Hay que añadir que Jové y Salvadó, que estuvieron bajo el mando del exvicepresidente de la Generalitat Oriol Junqueras durante el procés, han quedado dispensados de comparecer una vez al mes ante el juez y el pago de la fianza ha quedado aplazado, de acuerdo con las últimas medidas acordadas por el Consejo General del Poder Judicial.
Pero Paluzie no es la única independentista que pide dinero en estos tiempos de confinamiento. La diputada de ERC en el Congreso Marta Rosique ha hecho lo mismo, con otro vídeo en el que afirma que "el coronavirus no detiene la represión" y avisa de que la justicia procederá a embargar bienes de quienes han "defendido el derecho a la autodeterminación" y "la independencia de los Països Catalans".
https://t.co/29rV9d5uit#OmplimLaCaixa pic.twitter.com/221ASQqeS5
— Marta Rosique i Saltor (@MartaRosiq) March 20, 2020
La caja de solidaridad, en horas bajas
"Nos tenemos que solidarizar. ¿Qué podemos hacer desde casa? De entrada, podéis llenar la caja de solidaridad. Hagámoslo por ellos, hagámoslo por todos nosotros y hagámoslo por la libertad de nuestro país", sentencia Rosique.
Como explicó este medio, la llamada caja de solidaridad (un supuesto fondo que recoge las aportaciones de los ciudadanos para cubrir los gastos judiciales de los representantes que han movido los hilos del procés) no atraviesa su mejor momento, y se han multiplicado las peticiones para llenarla.