¿Quién pilotó las negociaciones de ERC?
Moncloa elogia la agilidad de los canales informales tejidos con los republicanos, coordinados por Aragonès siguiendo precisas instrucciones de Junqueras
9 enero, 2020 00:00Semanas de negociaciones sin apenas filtraciones que fructifican en un acuerdo de investidura. Todo un mérito si se tiene en cuenta la presión del independentismo más duro sobre los republicanos. “Estamos satisfechos”, aseguran fuentes de ERC. Aunque son conscientes, ayer lo confesaba el vicepresidente Pere Aragonès, que lo peor está por venir y que su abstención implica riesgos. No obstante, añadió, el partido está dispuesto a pagar el precio de investir a Pedro Sánchez.
Es precisamente Aragonès el principal valedor y artífice de ese acuerdo con el PSOE, siguiendo instrucciones de Oriol Junqueras. Porque es el líder de ERC quien, desde la prisión de Lledoners, ha liderado esas negociaciones. “Obviamente ha habido fontanería, como suele haber en estos casos, pero de incidencia menor”, admiten esas fuentes. Y es que ese pacto con los socialistas se había convertido en una apuesta personal de Junqueras.
Junts per Catalunya lo sabe, y le resulta difícil cuestionar la estrategia de un dirigente que cumple condena en la cárcel. De ahí los ataques con sordina que, por ahora, está sufriendo ERC por parte de sus socios de Gobierno. Máxime cuando se avanza en el calendario pactado, pues ayer mismo Moncloa confirmó que Sánchez llamará a Quim Torra para avanzar en la organización de una mesa de diálogo entre ambos Gobiernos, tal como establece el pacto suscrito entre PSOE y ERC.
Desde el Gobierno, según ha podido saber Crónica Global, “se valora positivamente la agilidad de los canales informales tejidos con ERC”, formación que se había propuesto administrar los tiempos y evitar cualquier tipo de resbalón en vísperas de la fecha de la investidura. El principal escollo era la agenda judicial, esto es, los procedimientos abiertos en los tribunales y en la Junta Electoral Central contra Torra y el propio Junqueras, y las reacciones sociales y políticas que se pudieran derivar.
Buen entendimiento entre las partes
Asimismo, ambas partes coinciden en que hubo buen entendimiento entre los negociadores. El perfil de los tres representantes de ERC --Marta Vilalta, Gabriel Rufián y Josep Maria Jové-- respondía a objetivos precisos.
Vilalta, secretaria general adjunta y portavoz de ERC, es la máxima dirigente del partido junto con Junqueras, Marta Rovira y Aragonès. Es un valor en alza dentro del partido, donde está identificada con un sector menos proclive a un acuerdo con el PSOE --entre ellos se encuentran Sergi Sabrià y Roger Torrent-- pero que, finalmente, cerró filas con Junqueras.
Rufián fue el cabeza de lista de ERC en las elecciones generales y es portavoz del grupo parlamentario en el Congreso, donde en los últimos años ha obtenido un gran protagonismo debido a sus controvertidas intervenciones, moduladas en las últimas semanas para no entorpercer el diálogo con el PSOE. Representa la cuota castellanohablante de ERC, esto es, el alma menos identitaria de un partido que aspira a ampliar su base social.
Sin embargo, la presencia más controvertida en esa mesa de negociación fue la de Josep Maria Jové, presidente del Consell Nacional, miembro de la dirección del partido y diputado en el Parlament. Está considerado como uno de los organizadores del referéndum del 1-O y, por ello, está pendiente de juicio en el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña para responder por los presuntos delitos de malversación, revelación de secretos y desobediencia grave.
Con la elección de Jové --interpretada como una provocación por PP, Ciudadanos y Vox--, ERC pretendía desmontar la imagen de independentista irredento que el PSOE podía tener.